Prólogo

Dos personas distintas no pueden coincidir en un mismo lugar, sus sentimientos no son los mismos y ellos tampoco. Una criatura de la oscuridad no puede estar y encantar a la luz, eso era imposible pero... El amor todo lo puede.

º  º  º

Reí y limpie las lágrimas que sin querer habían salido.

— ¿Y qué me enseñara usted? ¿A matar personas? ¿A humillar a las personas? Créame señor que yo no podría ser alguien tan cruel y despiadado como usted—dije dejándole claro mi molestia. 

Cada palabra que salía de mi boca era más dolorosa, no porque mintiera, sino porque decía la verdad, el monstruo no era solo él, yo también lo era, mis palabras lo eran.

—No señorita Jade, le enseñare algo que usted no ha podido lograr—se acercó a mí  acorralándome a la pared—le enseñare a no opinar mal de las personas por su apariencia...—intente alejarme pero su fuerza era mayor impidiéndome salir de su agarre, sus colmillos salieron y tomo mi quijada apartando mi rostro con rudeza dejando un libre acceso a mí cuello. —le enseñare a amar...— dijo clavando sus colmillos en mi cuello y haciéndome gritar.