Al llegar a casa tuve que darle el curso al tipo que me daría mi máscara.
Así fue toda la semana, aburrida y adolorida.
Después de los 7 días por fin llegó mi máscara y el curso que estaba impartiendo terminó.
Mis heridas ya habían sanado, mi máscara había llegado y mi ropa se había lavado. Estaba listo para salir. Tomé mis cosas, mi navaja y salí. Al salir noté que el día estaba tranquilo, no parecía que fuera a haber nada interesante, aún así caminé a ver qué encontraba. A lo lejos vi a una señora que se veía aproximadamente de unos 30 años, pelo castaño y no muy alta, junto con su hijo de aproximadamente unos 5 años, pelo castaño y también bajo de estatura, al inicio pensé que no iba a pasar nada, que estarían bien, pero luego vi que la señora se metió a un local que estaba cerca y dejó al niño afuera. Ahí decidí quedarme cerca para vigilar al niño, para que nada le pasara, no pasaron ni 5 minutos cuando un tipo se acercó al niño, lo tomó de la mano y se lo empezó a llevar. Enseguida empecé a correr detrás de él, al ver que lo estaba persiguiendo empezó a correr cargando al niño en su espalda, seguí corriendo tras el unos 3 minutos continuos. En un momento pasamos por una calle con bastante tráfico a diferencia de todas las demás, ambos seguíamos corriendo cuando de pronto un carro pasó bastante rápido pero alcanzó a detenerse para evitar atropellar al secuestrador, después de eso yo salte por el capo del carro como en las películas, aunque quisiera probablemente no lo podría hacer hoy en día. Ahí fue cuando lo alcancé, me abalancé sobre él, tirandolo junto al niño. Empecé a golpearlo en la cara para después tomar al niño. Lo único con lo que no contaba era con la gente a mi alrededor, aunque iban en carro, algunos empezaron a grabar cómo golpeaba a ese secuestrador, mientras que algunos otros bajaron para ir a golpear a alguien, pero claro, sí ves a un hombre corriendo con un niño de un tipo con una chaqueta de cuero y una máscara de gato, no te da muy buena impresión y te haces una idea de quién es el bueno y quien el malo. Tomé al niño y vi como bastante gente enfurecida se acercaba a mi; tuve que tomar una desición, dejar que me golpearan y probablemente terminar en la cárcel... O sacar la navaja y amenazarlos, en ese momento la segunda opción fue la mejor para mí así que lo hice, pero claro al ser tantos no se asustarían al ver un solo tipo con una navaja contra más de 5, así que hice algo que nunca pensé que haría, puse la navaja cerca del niño mientras lloraba y grité: "¡UN PASO MÁS IDIOTAS Y ASESINO AL NIÑO… YO NO SOY EL MALO, ÉL LO QUERÍA SECUESTRAR, YO SOLO LO DETUVE!, así que si me perdonan tengo que ir a entregar a este niño a su mamá". Algunos se retiraron por el miedo de que les pudiera hacer algo, otros se veían más enojados aún y algunos me creyeron, al final por el bien del niño todos retrocedieron a sus carros y algunos me empezaron a seguirme seguramente para ver si cumplía mi palabra. En el camino hacia el local pude observar que todavía dos sujetos en una Ford fiesta me seguían aparte de que me estaban grabando, no les dije nada, después de todo, el único video donde se podía unir a mi persona era en el que hable y en ese vídeo gritaba, que aunque no lo parezca la voz cambia mucho cuando gritas a cuando hablas normal, y la parte en la que hablaba sin gritar usé un tono diferente al mío para evitar cualquier conexión.
Llegué al local donde todo había empezado, ahí estaba la señora de antes con lágrimas en los ojos, al ver a su hijo se acercó a mí y me gritó:
-"¡Ladrón!"
- "Señora, YO NO SOY EL QUE ESTA MAL AQUÍ, yo detuve al secuestrador de su hijo ya que usted lo dejó afuera del local al que usted se metió, para empezar, por qué demonios dejaría a su hijo afuera sin vigilarlo, créame que tiene suerte que le devuelva a su hijo, debería de ir a dejarlo a un orfanato antes de devolvérselo, pero creo que todos merecen otra oportunidad, tenga, y que esto no se repita por favor".
La señora se veía triste, enojada e impotente, sabía que lo que decía era verdad y es por eso mismo que le dolía. Por otro lado, los que me venían siguiendo se bajaron del carro y se disculparon conmigo, me dijeron que borrarían los vídeos que le habían tomado y que sentían mucho el haber pensado mal de mí; yo acepté la disculpa, no iba a hacer un drama por algo tan pequeño, a final de cuentas no me habían golpeado. Me iba a retirar cuando me preguntaron: "¡Oye! ¿Quién eres?" A lo que respondí con un tono de voz diferente al mío: "Somos la legión porque somos varios" después de eso me retiré corriendo lo más rápido posible ya que probablemente alguien habría avisado a la policía.
Llegue a mi casa cerca de las 8 de la noche ya que me quede rondando un poco más para ver si algo sucedía, por suerte nada pasó. Al llegar me cambié y guarde mi máscara en un cajón de mi buró. Ya tenía sueño así que decidí acostarme a dormir. Desperté al día siguiente bastante renovado, había dormido genial y tranquilo. Me metí a bañar ya que había sudado el día anterior y no quería irme oliendo mal a la escuela. Después de salir de bañarme tomé un pan que estaba en la alacena de la cocina y le puse un poco de cajeta, tomé un vaso de leche y ese fue mi maravilloso desayuno. Tomé mi maletín y me despedí de mi gato para salir de la casa. Tomé un taxi y el conductor me hizo plática en lo que llegaba a mi destino, yo le respondía amablemente ya que estaba feliz por mi buena acción del día pasado. Llegamos a la escuela, le pagué el dinero del viaje y se despidió. Entre a la escuela y vi como todos estaban hablando de "la legión", pensé que de un derrepente nuestro grupo de amigos se había hecho popular y querían unirse, al pregúntale a Damián que porque hablaban de nosotros me respondió: "Ellos no hablan de nosotros, hablan del maniático de las noticias de ayer, el que amenazó con asesinar un niño, de casualidad su grupo se llaman como nosotros, ¡ahora van a pensar que nosotros somos unos locos también!" Me quedé helado al saber que ese "maniático", en palabras de Damián, era yo. Tuve que responder mostrando un disgusto similar por la legión, al llegar Gwen dejó sus cosas y vino a hablar conmigo, ella también estaba en la moda de hablar de la legión, ella me dijo: "Ay… ese muchacho podría hacer grandes cosas, pero aún así, ¡lo detesto por sus métodos!, ¿¡Quién en su sano juicio amenzaría con matar a un pobre niño inocente!?" Yo mantuve mi postura de disgusto y repugnancia hacia ese tipo.
Gwen me insistió en que me sentara con ella y lo hice, a diferencia de la vez pasada, esta vez le conté yo a ella como estaba trabajando en un proyecto que me estaba haciendo feliz, ella se alegró y empezó a hacerme preguntas pero yo solo le respondía con un "no puedes saber" o un "luego te digo". Las clases eran igual de aburridas que siempre pero esta vez no era tan pesado soportarlas como en otras ocasiones. En el cambio de clase Fernanda se acercó a mi lugar y me dijo: "William, ¿te podrías sentar conmigo? Ya sabes que se me dificulta química" yo acepté y le prometí a Gwen que volvería.
Estando al lado de Fernanda ella a diferencia de la otra vez, se notaba interesada en mi y en mis cosas, yo le respondía sus dudas cordialmente hasta que me dijo con un tono seguro y un poco burlón: "Ya sé que eres tú... No te puedes esconder ante mi jajaja". A lo que le respondí: "No se de qué hablas, ¿Podrías explicarme?. Se rió y me dijo: "Se que tú eres la legión, no hay otros, solo eres tú, pero vaya nombre que se te ocurrió decir, pudiendo escoger cualquiera y escoges "la legión"… sé que eres tú porque en el vídeo "la legión" amenaza al niño con un cuchillo muy especial jiji, el que te regalé, lo mandé diseñar especialmente para ti; no hay dos como ese…" yo me quedé inmóvil, no sabía que decir o que hacer, de verdad sabía eso ¿O solo estaba vacilando para jugarme una broma?, Después de que vio que no tenía reacción alguna siguió hablando: "Tranquilo jaja, no te voy a delatar, después de todo, sabía que harías algo así, por eso mismo te di el cuchillo, eres especial, no eres cualquier persona, ahora, vamos a poner atención… que te vas a desmayar si sigues pensado en eso." Esas palabras me relajaron un poco, después de todo era bueno saber que aunque sabía que era yo no diría nada. Preste atención pero tenía esa pequeña espina en mi de que Fernanda sabía que yo era la legión.
Las clases pasaban y yo no dejaba de estar ansioso, a final de cuentas cuánta gente "leal" y "honorable" hay que al final te traicionan. Pensaba en que sería lo mejor que hacer, pero al final decidí confiar en que no diría nada ya que se vería muy sospechoso si una persona que no tenía ningún antecedente desaparecía así porque si además después de que "la legión" había salido a la luz.
Las clases terminaron, ese día nos habían dejado un proyecto para hacer en duo, obviamente escogí hacerlo con Damián, él aceptó sin dudas. Por esa misma razón ese día Damián iba a ir conmigo a mi casa, para hacer el proyecto.