… Amir…
Salgo de la Universidad, solo pensando en Lucy, ella puede hacer que me olvide por un momento de todas mis preocupaciones. Al llegar al auto, recuerdo la travesía de anoche, una pérdida total de tiempo y energía. El rastro de Dimitri ya no se sentía, se tuvo que detener la búsqueda en el mismo lugar que la vez anterior. No tenemos noticias de los desaparecidos. Sin contar que los que se encuentran en el hospital, empeoran cada hora. Los médicos no pueden reconocer aún la toxina que les produce que su cuerpo se ataque así mismo, cada hora que pasa es crucial. Si no encontramos una solución, tendré que solicitar al consejo asistir ante el oráculo.
Sumido en mis pensamientos, llego a la empresa. Diciendo mi auto, subo en el ascensor, al llegar al último piso me encuentro con mi secretaria detrás de su escritorio.
_ Buenas tardes Carla._ continuo caminando hasta llegar a mi oficina, que es la única de este piso.
_ Buenas tardes Jefe._ responde con su sonrisa y esa mirada sugerente. Aún después de dos años de insinuaciones no deja de insistir. Nunca me fije en una humana, y no porque los descalifique de alguna manera, sino por el simple hecho de ser dos mundos diferentes.
En mi escritorio se encontraba todo el trabajo acumulado del día. No suelo ausentarme de la oficina, ya que no soy hombre de delegar responsabilidades, pero temo tener que hacerlo por fuerza mayor si no encontramos a los desaparecidos.
Firmo algunos documentos urgentes, y organizo lo más importante para la próxima semana. Tres golpes en la puerta interrumpen mis quehaceres.
_ Adelante._ digo en voz alta, aunque se que es Carla con una taza de café.
_ Permiso jefe, le traigo una taza de café._
_ Gracias Carla, y por favor reorganiza mi agenda para postergar estas citas para la próxima semana y aplaza las demás para cuando sea posible._ extiendo mi manuscrito mientras sigo leyendo otro documento, giro mi asiento hacia el ventanal, evitando cualquier intento de coqueteo de su parte, hoy en día me resultaría más que molesto.
_ En seguida lo preparo, necesita algo más?_ escucho como sus tacones se acercan rodeando mi escritorio y se que lo que sigue va a ser muy incómodo.
_ No, realmente no. Muchas gracias, puedes retirarte._ sus pasos se detienen abruptamente.
_ Ya no puedo resistir la tentación de tocarte Amir._ mi asiento es girado lentamente, para encontrarme con Carla inclinada con su rostro a la altura del mío. Una sensación de enojo me invade. Solo la observo, ella se acerca lentamente con intenciones de besarme. Por lo que deslizó mi silla hacia atrás y me pongo de pie.
_ Retírate en este instante de mi oficina._ la mujer frente a mi se endereza ajustando el primer botón de su camisa, claramente ofuscada y se encamina hacia la puerta, haciendo resonar sus tacones.
No puedo entender su atrevimiento, trato de concentrarme nuevamente en los papeles que tengo en frente, ya casi es hora de irme. Suena mi celular, es Pen.
_ Pen dime._
_ Encontraron a Eva._ suspire con alivio.
_ Y como se encuentra, donde la hallaron?_ el silencio me anticipa malos presagios.
_ Esta mal herida, al igual que los demás sus heridas no sanan y de continuar así, según los médicos no llegará a la noche. La dejaron a pocos kilómetros de la manada, pude sentir su olor por eso la encontré._ Siento su dolor en cada sílaba y sin poder dar una palabra de aliento ya que ambos sabemos que no hay muchas esperanzas.
_ Ya voy para allá._ dejo todo tal cual, y salgo de la oficina, al parecer mi secretaria se tomó la tarde libre.
Subo a mi auto y me encaminó a la Universidad, ya es la hora de que salga Lucy, quiero llevarla a la manada, eso me asegurará que pase segura esta tarde, y que la empiecen a conocer en el lugar.
Estaciono y camino hasta ver el auto de Sasha, ya han empezado a salir varias personas y veo como Sasha y Lucy vienen a mi encuentro.
_ Veo que no hace falta que te lleve a tu casa._ dice mi prima.
_ No hoy no hará falta, gracias igual._ sonríe mi hermosa mate mientras saluda con beso en la mejilla a Sasha.
_ Nos vemos mañana Lu, nos vemos luego primito y cuida mucho a mi nueva amiga._ rio ante su comentario, mientras beso la frente de Lucy, sintiendo su dulce aroma a rosas, y extiendo mi mano para que la tome.
_ Hasta luego prima y no hace falta que lo digas._ Sonrío sintiéndome el hombre más afortunado del mundo, bajo varias miradas curiosas.
_ Cómo estuvo tu día?_ le pregunto a la bella mujer que me acompaña, mientras esa extraña corriente me recorre desde nuestras manos unidas.
_ Bien muy emocionante, no creí que me gustaría tanto la Universidad. Y tus asuntos, todo sigue igual? _ su preocupación me hace recordar todos los temas pendientes de la manada.
_ Lamentablemente si, encontraron a la mate de mi Beta, que sería mi mano derecha. Pero esta muy mal herida y al igual que los demás no se está recuperando. Los científicos y médicos que se están ocupando temen que no pase de esta noche, se encuentra muy grave._ una punzada fuerte en mi pecho me indica el pesar que siente Lucy por toda esta situación. Una mujer con tanta empatía con personas que no conoce, me hace agradecer una vez más a la madre Luna.