pensando en que si iba a morir no tenía sentido que esas cosas jugaran conmigo, para mi sorpresa ya no había nada, debo decirles que hasta el día de hoy esas cosas malignas siguen visitándome por las noches, no es todo el tiempo menos mal , pero tampoco puedo decirles que ya me acostumbre, ahora mismo es de noche y escribo esto esperando a que esas cosas no quieran jugar hoy conmigo, aunque debo confesar que ahora mismo me siento observado, probablemente en este momento esas cosas se estén riendo para sí mismos, burlándose de mi mientras escribo esto para desahogarme para saber que aun mantengo un poco de cordura, pero no puedo dejar que esas cosas ganen al final de todo sé que no volverán a jugar conmigo si me quito la vida.