Capítulo 6 — Un viaje para la respuesta

Desde lo alto Lin y Mei lo miraban alejarse solo en un mundo sombrío, lleno de luz y oscuridad. Donde las personas no son del todas buenas, y tampoco del todo malas. Donde es fácil confundir a los héroes con villanos y a los villanos como héroes, pues todo depende de la perspectiva de donde sea mirado la persona que haya cometido sus actos. Por ejemplo, si robas cualquier cosa, todos te juzgan por lo cometido, dicen que has dejado sin comida, sin sustento a otros, para ellos tu eres el villano, pero desde la perspectiva de tu lado esa persona que robo es probable que estuviera necesitado y para lo que lo conocen es su héroe.

Las personas actúan desde sus propios sentidos de moralidad y sus necesidades, no importa que tan bueno o malo seas solo que cumplas con un papel que has sido determinado sin saber ¿Cuál es ese papel?

—Maestro ¿está seguro de esto? —pregunto Lin.

—Este viaje lo ayudara a descubrirse así mismo. Le pido al cielo que encuentre, algo que pueda cambiar su forma de pensar y tener una vida tranquila —respondió el maestro Hiroki.

—Supongo que pensaste que de esa forma evitarías las tres causas de su despertar —aparecieron los maestros David y Josué. el maestro David hablo.

Las dos alumnas saludaron a los maestros —parece que no lo interpretaste del todo la profecía —hablo el maestro Josué.

—¿A qué se refiere maestro? —pregunto Mei.

—El mensaje de la expulsión no se refería precisamente a ti Hiroki —continuo el maestro Josué —en realidad no sabemos quién lo expulsara. Pero si eso sucede en este viaje, estaremos a dos causas para que la tragedia ocurra.

—Eso no sucederá y llegará a pasar aún tenemos dos oportunidades de evitarlo. Solo confió en que la última —miro a sus dos estudiantes —nunca se llegue a completar.

Los dos maestros empezaron a caminar —no podemos confiar en tu razonamiento maestro Hiroki. Muchos maestros no lo hacen, por eso estamos nosotros aquí —dijo el maestro David.

—Esperen. ¿Qué piensan hacer? —pregunto Lin preocupada.

—Lo vamos a vigilar de la distancia. Si muestra algún indicio negativo. Lo mataremos —respondió el maestro David.

—No pueden… —dijo Lin, pero los dos maestros no la escucharon desapareciendo. —maestro no puede permitir eso. El mensaje fue que lo salvara, no que lo matara.

—La decisión fue tomada por los maestros. No puedo hacer nada su mandato, aun siendo uno de ellos —respondió el maestro Hiroki.

—Entonces que hacemos. Esperar que Shun despierte para matarlo —dijo Lin molesta.

El maestro no dijo nada y solo se retiró —maestro —dijeron Lin y Mei. 

~Le ruego al cielo. Que nunca despiertes un poder Shun. Encuentra una vida con los humanos y se feliz ~se dijo en su pensamiento.

Shun caminaba sin descanso a través del denso bosque, el cantar de las aves, la brisa del viento chocando contra su rostro hondeando su vestimenta solo recordando las palabras de su maestro que se las dijo de una forma muy fría y distante.

~ Y si en tu viaje consigues despertar tu poder, entonces búscame y te considerare digno de ser entrenado por mí.

Esas palabras le retumbaban su cabeza quería deshacerse de ellas, pero mientras lo intentaba retumbaban con más fuerza en su cabeza, paso por un pequeño arroyo al cual regreso para llenar su cantimplora para su largo viaje.

—¡Por favor! sujeta mi prenda —escuchó la voz de una chica de unos catorce años vestida con ropas de montaña. Shun sujeto la prenda.

—Tómala —dijo extendiendo la prenda para devolvérsela. 

—Gracias. —dijo amable —¿de dónde vienes viajero? —pregunto la joven.

—De…

—¿Qué tenemos aquí? —Shun fue interrumpido por cinco sujetos, pero solo uno de ellos lucia como alguien importante —es un gusto volver a verla señorita Carla —dijo el hombre.

—Otra vez tu —dijo la joven Carla —es que no entiendes, que no me gustas y mis padres tampoco lo aprueban.

—Tus padres no son nadie para decirme que hacer. No son más que unos vulgares agricultores. No entiende que, si te comprometen conmigo, tendrán una vida de lujo —dijo el joven.

La chica rió —precisamente por esa actitud tuya, es que mis padres no ven bueno comprometerme contigo. Solo eres un niño mimado, que nunca se ha esforzado por tener algo. Piensas que solo por tener dinero y posición puedes hacer lo quieras. Conmigo eso no funciona Alessandro, mucho menos con mis padres.

Esto molesto al joven que desvaino su espada —quería que esto fuera por las buenas, pero si te vas a comportar así entonces, no tengo más opción que tomarte por la fuerza. Atrápenla.

La joven Carla se asustó ocultándose detrás de Shun, que al ver la agresividad de ellos desvaino su espada. Talvez no tenga poder, pero era muy bueno con el combate cuerpo a cuerpo —escuchen será mejor que se vayan. Dejen en paz a esta joven.

—¿Tú quién eres para interferir? ¿Acaso te gusta mi mujer? —hablo con posesión y agresividad el joven Alessandro.

—A esta chica no le gustas. Ve y busca alguien quien te acepte como eres —dijo Shun.