Dolor

Daghne

Henry acaricia mi cabello con delicadeza, mientras yo solo lo observó, el a estado a mi lado desde que desperté , Henry se aleja un poco de mi lado y me mira.

-Ya debo irme, no puedo quedarme demasiado tiempo, tus padres también deben de entrar, les voy a decir que entren ¿Ok? - Me dice y yo asiento en respuesta, besa mi frente con ternura y se va.

El dolor que siento en mi cuerpo con cada movimiento que hago es indescriptible, no recuerdo muy bien que fue lo que me pasó, solo recuerdo que iba conduciendo y luego los recuerdos son borrosos, aunque Henry me explico lo que pasó, no logro recordarlo, es como si me contarán un mito. 

Siento la puerta abrirse, volteo para ver a mis padres, pero no son ellos, sino el , veo su cabello castaño, sus ojos verdes, su mandíbula definida, sus carnosos labios y el traje que lleva le queda perfectamente, el se acerca a mi sin decir una sola palabra, yo solo observó cada movimiento que el hace, veo como acomoda su rebelde cabello, que le cae en el rostro.

-Hola - Digo para romper el incómodo silenció que se había formado entre nosotros dos.

-Hola - Me responde, se para delante mío, mientras me observa - Me acabo de enterar lo que sucedió - Me dice, tengo recuerdos de algunos sueños que tuve mientras estaba inconsciente y en cada uno de ellos estaban esos hermosos ojos verdes.

-No te preocupes - El toma mi mano y mi piel se eriza, al sentir su tacto, mis mejillas arden. 

El suspira, quiero saber que es lo que está pensando, quiero leer sus movimientos y sus gestos, pero no lo logro, nosé que pasa por su mente y la curiosidad está matandome, lamo mis labios.

-Perdón - Dice, y baja la mirada - perdóname por haberte dicho esas cosas y por haberte lastimado nuevamente, perdóname por no haber estado a tu lado cuando más me necesitabas - El soba su nuca - Estaba tan cegado por los celos, que no me detuve ni un minuto a escucharte y solo actúe sin pensar, se que no es ninguna justificación - El levanta la mirada y sus ojos encuentran los míos - Pero no quiero perderte - No se que responder, una parte de mi quiere perdonarlo y besar sus labios nuevamente, pero no quiero dejarme derrotar ahora por mis sentimientos, se que no estaría bien porque no confío en mi cuando debió hacerlo, pero todos merecemos una segunda oportunidad de cambiar. Me quedo en silencio.

-Permíteme ayudarte en lo que necesites, quiero estar a tu lado - Dice bajando la cabeza y con su pulgar acaricia mi mano suavemente - Pero si no quieres verme lo entenderé - El me mira esperando respuesta, pero no logro decir nada, trato de buscar mi voz pero no la encuentro, el asiente como si lo estuviera confirmando - Te quiero - Dice, me da un pequeño beso en la mano y veo una sonrisa triste en sus labios, está apunto de irse.

-Espera - Digo y el se detiene, voltea aún con la cabeza baja, le hago un ademán para que vuelva a acercarse y el lo hace - No quiero que te vallas - El me mira directo a los ojos, veo como sus ojos tiene un pequeño brilló.

-¿De verdad? - Yo asiento - Pero y nos... - Yo lo detengo porque se de qué va a hablar.

-¿Podemos solo actuar como amigos? - Le pregunto - Necesito un tiempo y creo que tú igual, quiero que tú y yo solo seamos amigos por ahora - El asiente

-Esta bien

Pase casi una semana en el hospital mientras veían si yo me encontraba bien, mis padres venían por las mañanas me dijieron que iban a cancelar su boda por qué yo no me encontraba bien, pero me negué a que lo hicieran y aunque insistieron mucho logre convencerlos de que no cancelaran nada, solo la pospusieron unos días más.

María venía por las tardes para contarme cosas del trabajo y decirme cuánto me extrañaban allá, me contó que Logan regreso de su viaje y ya lograron firmar el contrato con el señor Darmond pero me dijo que ellos pospusieron su vuelo porque se iban a quedar para la boda de mis padres

Por las noches venían Henry y Blake, ellos se quedaban conmigo hasta el día siguiente, charlábamos nos reíamos y la pasábamos muy bien a pesar de que yo me encontraba con un yeso largo para toda mi pierna derecha ya que estaba fracturada, la habitación tenía dos sofás y ellos dormían ahí, a veces me era casi imposible no besar a Blake, cuando el era tan agradable y lindo conmigo, pero sabía que necesitaba mi tiempo .

Henry me ayuda a subir en los asientos traseros de su auto, hoy por fin puedo irme de ese hospital, este año eh estado demasiado ahí, mi amigo cierra la puerta y se sube en el asiento de piloto.

-¿Estás cómoda? - Me pregunta y yo asiento - Bien - El empieza a conducir y yo miro mis brazos que tienen algunos rasguños y una que otra cicatriz.

Al llegar Henry saca de la parte de atrás del auto unas muletas.

-¿Segura que sabrás cómo utilizarlas? - Me pregunta algo preocupado.

-Eh estado practicando, tranquilo - Le digo el me ayuda a salir, caminar con las muletas no es tan fácil como se ven en los programas de televisión, o al menos no para mí, pero logro llegar al ascensor sin caerme y fracturarle la otra pierna, aunque Henry estaba mi lado cuidando que no caiga.

Cuando llegamos a la puerta del departamento mi amigo la abre.

-¡Sorpresa! - Se escucha un fuerte grito de las personas que están dentro, yo miro a mi amigo y el me sonríe.

Yo entro y mis padres se acercan a abrazarme, igual que algunos amigos que tenía en la empresa, Logan también se encontraba.

-Que bueno que te encuentres bien - Me dijo y yo le sonreí, no veía a Blake por ningún lado pero supuse que estaba ocupado.

Después de los abrazos, me siento en el sillón, mientras Henry cuida cada movimiento que hago.

Me da tanta ternura ver cómo todos cuidaban de mi, siento que no me había dado cuenta de todas las personas a las que les importo y no quiero poner en riesgo a ninguna de esas personas, no quiero que las lastiman, odio tener miedo pero lo tengo, tengo tanto miedo de que les hagan daño a las personas que quiero y todo por mi culpa, nunca me lo perdonaría.