Capítulo 22: El Luto de Seth

Seth se encontraba solo en su habitación, rodeado de oscuridad y silencio. La muerte de Mayda aún resonaba en su mente, y él no podía evitar sentir un profundo vacío.

Pero a medida que pasaban los días, el dolor se convirtió en ira. Seth sabía que Kael y Ariana habían sido los responsables de la muerte de Mayda, y él juró vengarse.

- Voy a hacer que paguen por lo que han hecho, se prometió Seth, su voz llena de determinación.

Seth comenzó a reunir a sus amigos, Abadon, Orfeo, Elin, Erika y Eyra, y les contó su plan.

- Amigos, Mayda ha muerto, dijo Seth, su rostro serio. Y yo voy a hacer que Kael y Ariana paguen por su muerte.

Sus amigos asintieron, listos para apoyar a Seth en su búsqueda de venganza.

- Entonces, empecemos, dijo Seth. Vamos a encontrar a Kael y Ariana, y vamos a hacer que paguen.

Seth y sus amigos entraron en la habitación de Mayda, buscando sentir su presencia cercana. La habitación estaba llena de recuerdos de Mayda, desde sus ropas hasta sus joyas. Pero lo que más llamó la atención de Seth fue el libro que Mayda siempre llevaba consigo.

De repente, el libro se abrió solo, y una luz blanca comenzó a emanar de sus páginas. Seth se acercó al libro, sintiendo una energía extraña que lo atraía hacia él.

- ¿Qué es esto?, preguntó Seth, su voz llena de asombro.

Abadon se acercó al libro, examinándolo con cuidado.

- Es el Libro de la Oscuridad, dijo. Un libro que contiene los secretos y poderes de Mayda.

Orfeo se acercó también, su mirada brillante.

- Y parece que el libro está tratando de comunicarse contigo, Seth.

Seth miró el libro, sintiendo una conexión extraña con él. De repente, las páginas del libro comenzaron a girar, revelando una página en blanco.

- ¿Qué significa esto?, preguntó Seth.

Elin se acercó, su voz llena de misterio.

- Creo que el libro está esperando que tú escribas en él, Seth. Que tú continúes el legado de Mayda.

Seth miró el libro, sintiendo una mezcla de emociones.

Seth miró el libro, buscando una respuesta.

- ¿Hay alguna forma de comunicarme con Mayda?, preguntó.

El libro se abrió en una página nueva, revelando un hechizo escrito en letras rojas. Seth lo leyó, sintiendo un escalofrío en su espalda.

- ¿Qué es esto?, preguntó Seth, su voz llena de asombro.

Abadon se acercó, examinando el hechizo.

- Es un hechizo de comunicación con el más allá, dijo. Pero es muy peligroso. Si no se hace correctamente, puede tener consecuencias fatales.

Seth miró el hechizo, sintiendo una mezcla de emociones.

Orfeo se acercó, su mirada brillante.

- Seth, no lo hagas, dijo. Es demasiado peligroso.

Pero Seth ya había tomado una decisión.

- Lo voy a intentar, dijo, su voz firme.

Elin se acercó, su voz llena de misterio.

- Entonces, debes hacerlo en un lugar donde la energía espiritual sea fuerte. Un lugar donde el velo entre el mundo de los vivos y el mundo de los muertos sea delgado.

Seth asintió, sabiendo que Elin tenía razón.

- Conozco un lugar, dijo. Un lugar donde Mayda y yo solíamos ir. Un lugar donde puedo sentir su presencia.

Seth y sus amigos se reunieron en el lugar que Seth había elegido, un antiguo cementerio abandonado en el borde de la ciudad. El ambiente era sombrío y tranquilo, perfecto para realizar el hechizo de comunicación con el más allá.

Seth comenzó a leer el hechizo, su voz firme y clara. El aire alrededor de ellos comenzó a cambiar, la temperatura bajó y una niebla espesa comenzó a formarse.

De repente, una figura comenzó a tomar forma en la niebla. Era Mayda, su rostro pálido y su mirada intensa.

- Seth, mi amor, dijo Mayda, su voz suave y melancólica. Me alegra verte de nuevo.

Seth se sintió emocionado al ver a Mayda de nuevo.

- Mayda, te extraño tanto, dijo.

Mayda sonrió tristemente.

- Seth, no te preocupes por mí. Estoy bien. Pero tú y nuestros amigos deben ser más poderosos. Deben prepararse para lo que viene.

- ¿Qué viene?, preguntó Seth.

Mayda miró a sus amigos.

- Un gran peligro se acerca. Un enemigo que amenaza con destruir todo lo que hemos construido. Pero no te preocupes, Seth. Yo volveré. En el momento indicado, volveré para ayudarte.

Seth se sintió aliviado al saber que Mayda volvería.

- Te esperaremos, dijo.

Mayda sonrió de nuevo.

- Sé que sí. Ahora, id y sed más poderosos. El destino os llama.

Y con eso, Mayda desapareció, dejando a Seth y sus amigos con más preguntas que respuestas.