11.- Actitud

Los días pasaron transformándose en semanas, específicamente dos semanas y septiembre del 2001 había terminado y la primera semana de octubre comenzaba, el mundo seguía su curso con importantes hechos. Estados Unidos de Norteamérica seguía con los atentados del 11 de septiembre y según sus investigaciones oficiales sus culpables pertenecían a cierta rama terrorista en medio oriente y se preparaba para invadir la zona en lo que su presidente decía que "sería una ofensiva breve y arrolladora" obtenido un gran apoyo de todos los gringos.

Visitados casi todos los días desde hacía semanas, la familia Montejo ya se había acostumbrado al nuevo "amigo" de Joshua, este había cambiado su extraña vestimenta por una ropa más moderna debido a que Jeth les había comentado al Sr. y Sra. Montejo que la obra había sido cancelada por motivos mayores. Por otra parte, Joshua ardía cada vez que le preguntaban sus compañeros de escuela por el muchacho con el que lo habían visto en distintas ocasiones, incluso sus propios padres parecían disfrutar de su presencia más que a su propio hijo, sin embargo su nuevo inquilino no parecía tener malas intenciones.

Cada día durante esas dos semanas fue casi normal salvo por algunas variaciones que causaba su compañero. Cuando Joshua salía de la escuela casi siempre Jeth lo esperaba en el estacionamiento, por las tardes conversaban de distintos temas mientras Joshua hacia sus deberes o trabajaba en algún proyecto personal e incluso cuando estaban aburridos jugaban "la leyenda de Zelda" cuando Jeth se quedaba a dormir escondido en el armario de su casa.

Durante la mayoría de las noches sin embargo, Jeth desaparecía y lo único que decía antes de irse era que iba a dormir con su familia, siempre oculto en el techo del último piso espiado a los dos niños que dormían debajo causando algunas conmociones entre ellos al asustar a la niña que veía su sombra de cabeza y que corría a dormir con su hermano en la otra cama que aún no se había acostumbrado a la nueva situación que ocurría durante las noches sin que el niño pudiera ver jamás aquella supuesta criatura de la que tanto hablaba.

Saliendo de la cafetería escolar con su computador colgando de su hombro Joshua camino hacia una pequeña área verde que estaba cerca de las canchas para poder comer y terminar un reporte que tenía que entregar, se sentó debajo de un árbol y prendió el aparato dejándola en el suelo mientras comía su almuerzo mirando los partidos de baloncesto que se desarrollaban, durante los últimos días en los que Jeth había entrado a su vida la escuela le resultaba mucho menos tediosa. Muchas personas se acercan a él para saber un poco acerca de su nuevo "amigo" que nunca se dejaba ver o hablar por nadie que no fuera él y que había sido visto constantemente rondando el estacionamiento en las últimas semanas.

Disfrutando su comida y sumido en los pensamientos por las diversas cosas que le habían ocurrido en tan poco tiempo, Joshua no reacciono hasta que un balón de básquet lo golpeo en la cabeza tirándole la comida, al incorporándose sobándose la nariz que empezaba a sangrar vio a Kyle que se acercaba riéndose de él junto con otros desde la cancha.

—¡¿Qué te ocurre estúpido?! —le respondió Joshua limpiándose con la mano la sangre.

—Ten cuidado Kyle o él bebe llamara a su niñera para que lo proteja —se burló uno de los que se encontraban a su alrededor mientras hacía gestos como si quisiera llorar.

—Quieres callarte imbécil. Metete en tus propios asuntos.

—Qué te pasa, ¿necesitas a tu guardaespaldas para defenderte? ¿No puedes pelear tus batallas? Eres patético —le respondió Kyle empujándolo haciéndolo retroceder.

—No necesito de alguien para defenderme —le respondió Joshua empujándolo pero su fuerza no fue suficiente como para moverlo de su lugar para luego ser empujado al suelo.

La hora de salida había llegado, Joshua guardo sus cosas y salió del salón con desanimo por haber sido un día particularmente difícil. El sentimiento de impotencia de no poder hacer nada para poder defenderse lo había torturado aunque había salido casi ileso hacia unas horas y el mismo sentimiento que había tenido el mismo día que conoció a Jeth se hizo presente.

Dirigiéndose a los arboles junto a la cancha de baloncesto para despejarse, recordó las palabras de Kyle en tanto miraba a algunos estudiantes que se dirigían a sus autos y otros que se quedaban en la escuela para entrenar o terminar algún proyecto.

—Aquí estabas. Te he esperado en la caseta durante un buen rato para irnos y... no me digas, ¿algo te ha ocurrido? —escucho la voz de Jeth que lo tomo por sorpresa.

—Nada que te importe subnormal —le respondió cuando se sentó a su lado.

—No es que me importe, pero debes hacer algo por que yo no puedo hacer nada para ayudarte cada vez que no esté contigo, no soy omnisciente. Van a creer que soy tu guardaespaldas y eso me fastidia, ¿sabes? —le respondió Jeth causando que Joshua lo mirara de soslayo.