Veinticinco: El Príncipe y La Princesa

Después de que la princesa Adelaide es secuestrada y escuchar los gritos de su familia y de casi toda su corte, la muchacha que no supera los dieciocho años está muy asustada, uno de los hombres la toma de su mano y ella reacciona:

—¡Soltadme! — exclama la muchacha resistiéndose a sus secuestradores.

—Cierra esa boca, niña — dice uno de ellos y la muchacha se resiste.

—No te resistas o si no va a ser peor para ti — dice el capitán Barbarroja — que este en el calabozo con los demás.

La muchacha opuso resistencia por largos minutos, le despojaron de sus joyas y tiara de princesa. Y con solo su vestido de color dorado la encerraron en un calabozo que es muy frío, en ese espacio esta una cama y un escritorio. Un lujo dentro de la situación que se encuentra la joven princesa. La chica se afirma en los barrotes de su cárcel y dice:

—Soltadme... Bastardos — dice la princesa y uno de los hombres se le acerca a ella.

—Cállate niña.. Mi paciencia tiene límites que lo estás cruzando con tus gritos — exclama uno de los hombres que cierra la puerta y se va.

—¡AUXILIO! — grita la muchacha, su grito es interrumpido por una voz masculina.

—No pierdas el tiempo con los gritos— dice el muchacho que le habla desde la oscuridad. La chica intenta de mirar y el muchacho sale a la luz.

—¿Por qué lo dices? — pregunta la chica que esta sorprendida que este un chico apresado.

—Por ahora no va a venir nadie a rescatarnos a los otros príncipes y princesas — dice el muchacho que tiene la mirada muy fija en la bella princesa.

—¿Cómo te llamas? — pregunta la muchacha.

—Soy Matthew Trastámara — se presenta el muchacho — ¿Y tú?.

—Soy la princesa Adelaide Dunkeld — se presenta la muchacha y de repente recuerda el apellido del muchacho — Espera...

—¿Sí? — exclama el muchacho confundido.

—Dijiste ¿Trastámara? — exclama la muchacha con curiosidad.

—Sí.. Eso dije es mi apellido — dice el muchacho que todavía no entiende nada aún.

—Eres el príncipe heredero del reino Mingh — dice la muchacha muy interesada en la respuesta del muchacho.

—Sí soy el príncipe — dice el muchacho — y me pasó lo mismo que a usted, princesa.

—Lo sé, usted ha sido secuestrado hace dos meses — dice la princesa y luego piensa — ¿Qué es lo que quieren con nosotros, los demás príncipes y princesas?.

—Por lo que escuché de rumores.. — se acerca Matthew a Adelaide, una distancia prudente — que quieren llamar la atención del Consejo Intergaláctico Unidos.

—¿Al Consejo intergaláctico? — alarmada.

—Sí.. El único objetivo es dos personas en particular uno de ellos es el príncipe del reino de Ko — le informa a la muchacha.

—¿Pero no son tres príncipes? — cuenta la muchacha — a ver sí recuerdo sus nombres el primero Rami el heredero, Asim el Facineroso y el más joven Dameron el Caritativo.

—Bueno lo que escuché que quieren al capitán Dameron Montgomery, que es el príncipe  más joven del rey Mishal — dice el muchacho.

—Sí, es un héroe de guerra y tuve la fortuna de conocerle y es un hombre muy atractivo y su mayor belleza aparte de la física, es su personalidad — suspira la muchacha muy enamorada de Dameron — el muchacho es muy alto, de desplante tranquilo y caminar ligero y elegante.

—Debio ser genial — dice el muchacho.

—Sí.. Fue dentro de una fiesta de caridad que se realizó el año pasado — dice la muchacha muy ruborizada — él dono una gran cantidad de dinero como resultado de los impuestos a sus territorios sometidos y tuve la fortuna de bailar con él.

—Vaya — dice el muchacho.

—El hombre es un Dios de mitología, pero su mirada es indiferente y triste — destaca la muchacha.

—Debió ser un privilegio conocer a un héroe de guerra — dice el muchacho.

—Pero.. ¿Dijiste qué quieren llamar la atención de alguien más aparte del príncipe Dameron? — pregunta a Matthew.

—Sí.. A la otra persona es la que quieren realmente es a la denominada "Ángel, la quebrantadora de enemigos" — dice el muchacho y Adelaide lo mira con sorpresa — eso es lo que escuché.

—¿Qué?.. — sorprendida y emocionada — ¿Es real?.

—Sí.. — dice Matthew.

—Solo creí que era un mito, una leyenda — dice Adelaide muy emocionada.

—Según mi padre que fue participe en la fundación del Consejo intergaláctico Unidos — dice el muchacho — la conoció, ella no parece alguien fuerte, pero es una gran planificadora y estratega.. Fue concedida con el don del talismán de la mente de los supremos, la quinta generación de guerreros y derrotó al "Conquistador".

—Vaya — dice la muchacha.

—Y según las escrituras de las pitonisas del tiempo.. Traducido por los trillizos Lovelace  que publicaron el tercer volúmen hace unos meses atrás y dice algo así:

[... El enfrentamiento del Ángel y del  Conquistador será tan brutal que el Ángel morirá...

... Toda esperanza se pierde y gritos desgarradores de sus amigos que lloran antes de tiempo...

... El Ángel fue al cielo y resucitó como el Ave Fénix...

... La batalla final entre el Ángel y el Conquistador, su resultado es que el Ángel desprende de la cabeza al Conquistador de sí cuerpo con una espada que ahora será sagrada...].

La princesa esta muy impresionada por las profecías de las pitonisas del tiempo y como el príncipe Matthew se los aprendió de memoria, la joven siente curiosidad por el nombre del " Ángel, la quebrantadora de enemigos ". Esa parte de la historia galáctica es muy interesante y le fascina, en el fondo ella admira al ángel y no puede creer que un heroína de historia sea real y dice:

—Debo decir algo — dice la muchacha y Matthew le presta atención — nunca supe el nombre de la "quebrantadora de enemigos".

—¿En serio? — dice el muchacho — mi padre me dijo y su nombre es Melek Hoffmann, por lo que sé el significado de su nombre es Ángel.

—¡Oh! Interesante — dice la muchacha —¿Entonces? Su nombre sería literalmente " Melek, la quebrantadora de enemigos".