“Lasagna Para Cenar” nació de la idea de querer ser feliz. Ocurrió en un momento de mi vida en el que toqué fondo (Como en muchos otros momentos de mi vida). Al hablar de esas épocas con varios de mis amigos, noté este patrón constante en el que todos parecemos estar en el mismo barco. Comprendí que no estaba solo. Fui a terapia y muchos de mis amigos también. Buscamos mejorar individual y colectivamente sin darnos cuenta. Debo decir que algunos ya encontraron su camino y viven por inercia lo que siempre anhelaron. Otros seguimos un poco perdidos, pero ya no tanto como antes. Esta historia, a pesar de estar basada en una experiencia personal, es una oda a la salud mental. Aunque, con altos y bajos, intenta ser una reflexión sobre lo que nos atormenta, los problemas que cargamos desde hace años y un motivo para soltarlos y poder vivir en plenitud.
Agradezco a mi vida por hacerme sentir mal y poderle sacar provecho. A mis amigos por tenerme la confianza de contarme su vida, sabiendo que los voy a usar de inspiración para escribir. A Nicole, mi mejor amiga y editora, por ayudarme a estructurar esta historia, por corregir mis errores y darme ideas para continuar. A Gethsemani (Mi Toad) por apoyarme desde el inicio de esta historia, ayudarme con el final, crear personajes y estar siempre ahí en mis crisis al no saber cómo continuar escribiendo. A The Strokes por tener tan buena música e inspirarme, no solo con el nombre del protagonista, sino con el sentimiento que quise dejar plasmado en la historia.
Gracias a ti, como lector, que me acompañó en este viaje. Espero que hayas disfrutado esta historia y te invito a revisar alguna de mis otras obras.
Hasta que mi inspiración me pegue de frente.
CarlosVelord
#1685 en Novela contemporánea
#1846 en Joven Adulto
drama amistad dolor tristeza y perdida, terapia, superacionpersonal
Editado: 22.03.2024