Capitulo III

Luego que bebieron té, Casey se fue a dormir otro poco hasta que fue ya de mañana. Cameron no pudo dormir y se quedó despierta terminando un proyecto que tenía que entregar en unos días, pero seguía muy ebria y lo que estaba haciendo era un sin sentido. 

A eso de las diez de la mañana, Cameron se despertó con el rostro en el mouse de la laptop, se secó la baba que tenía, vio a Casey durmiendo en su cuarto y esta comenzó a hacer un café, se desmaquilló en lo que el agua hervía, se quitó el dizfraz y se dio un baño rápido, se puso ropa comoda. Cuando se terminó de hacer el café se dio cuenta de la hora que era, las 11 de la mañana con cuarenta minutos, su hora de entrada al trabajo ese día era en el turno de la tarde nuevamente, cerró la laptop rápido, entró a su cuarto buscando algo que ponerse, pero no tenía nada, la noche que salió de fiesta tenía que meter a la lavadora su ropa, solamente había un vestido negro, era lo único que tenían limpio para ponerse. buscó entre sus abrigos y vio que tenía un abrigo largo, le podía tapar bien las piernas para el frío, aunque en su trabajo tenía calfacción, pero quiso prevenir. Cuando se estaba cambiando, Casey se despertó, vio la hora y comenzó a ver a Cameron. Esta ni siquiera le dio importancia en ese momento, ahora tenía que llegar lo más rápido que pudiera de igual manera, iba a llegar tarde, pero no quería que le dijeran algo por pasarse de lo aceptable. Cameron tomó sus llaves, buscó su celular que estaba descargado, tomó su cargador y bajó corriendo de su departamento, mientras bajaba se ponía el abrigo y se comenzó a pintar los labios, mientras masticaba un chicle de menta que había encontrado en el bolsillo del abrigo. Cuando abrió la puerta, se golpeó con el '' Chico del supermercado'' Cameron ni le pidió disculpas, se puso de pie, recogió el bolso que se le había caido, el chico solo la vio y la habló antes que empezara a correr. 

-¿Necesitas que te lleve? 

-Voy a mi trabajo -Dijo Cameron con su respiración agitada-. Si me puedes llevar rápido, te lo agradeceria. 

-Deja voy por la moto rápido. 

El chico buscó en los bolsillos de su pantalon las llaves de la moto, las llevaba en un llavero de Harry Potter. Cameron no se había dado cuenta de eso la noche que salieron, pero esto le pareció curioso. El chico buscó la moto y se subieron. Él sabía dónde trabajaba, la había stalkeado un poco en instagram y a Cameron, le gustaba subir muchas fotos de ella en su trabajo o de lo que hacía. El reloj marcaban las doce con quince minutos cuando llegó a su trabajo, había mucho trafico y de no ser por eso hubiera llegado antes. Su jefa la vio entrar y lo único que le pudo decir fue sobre su vestido, era casual, pero lo que se miraba más extraño eran los tenis blancos que llevaba, una combinación rara. No le dijo nada y la dejó recibir lo que el turno matituno había avanzado. 

Entre las tres y media de la tarde, un mensaje le cayó a su celular, se dio cuenta puesto que tenía ella puesta la música de la tienda en su celular, algo tranquilo. Cuando vio el mensaje, era un correo de Casey y unas fotos. En el correo iba el trabajo que estaba realizando ebria. No era nada del otro mundo, eran unas ecuaciones matematicas y a Casey se le hacía muy facíl dicha materia. En whatsApp, Casey le había enviado unas fotos de su ropa limpia y seca, en el pie de las imagenes adjuntó: ''Te hice el favor de lavarte la ropa y secarla. Tú tarea estaba facil, no entiendo como en tu carrera te ponen ese tipo de ecuaciones"

«Gracias, Casey. No tuve tiempo de ni siquiera darte comida. Ójala que hayas cocinando»

«Si lo hice. No tienes nada saludable en tu refri, pero estaba rico.»

«Gracias enserio ¿Estará en mi casa cuando regrese? Así compro unas hamburguesas y cenamos juntas. »

«No creo, mi mamá está llamando como loca. Dejemos las hamburguesas para otro día. Le di comida a Donita. »

«Gracias por eso también. »

Cuando llegó la noche, el frio era mayor. Cameron estaba arrepentida por llevarse el vestio negro. A la salida, estaba el chico del supermercado esperandola, Cameron lo saludó, este le dio un abrazo y le invitó a subirse a la moto. 

-No es necesario que seas mi chofer. Me apenaría tenerte así. 

-La que no se debe preocupar eres tú. Si algún día necesitas que te lleve a algún lugar de urgencia pidelo, no me negaré. 

-Gracias. Aprovechando que estás aquí, podríamos ir a comer hamburguesas o comprarlas y comerlas en mi depa. 

-Me parece una buena idea. Espero que aún no esté cerrado. 

Cameron se subió en la moto y fueron a comprar un combo de hamburguesas para ambos. Esta vez, Cameron no dejó que pagara esta vez. Cuando llegaron al departamento, estaba todo sorpresivamente ordenado. Ambos se sentaron a la mesa y Donita comenzó a oler al muchacho. 

-No te preocupes por mi perrito, no hace daño. 

-Tuve uno hace varios años, pero descubrí que soy ligeramente alergico. Es raro que no esté estornudando como loco ahora. 

-Supongo que mi perro es diferente -Respondió con una sonrisa-. A todo esto, no conozco tu nombre: ¿Cómo te llamas? 

-Cristian. Cristian Mendez. 

-Es un bonito nombre y convina bien con tu apellido. 

-Mis padres pensaron en todo antes de que naciera, así que se preocuparon porque llevara un buen nombre. 

-Mi papá me puso cameron por la actriz. No nos parecemos en nada o bueno, eso supongo- 

El celular de Cristian vibró, este lo sacó de su bolsa y lo comenzó a revisar. Luego de unos segundos lo dejó en la mesa. Cameron le indicó que se sentará en el sillón, preguntó si quería ver alguna película y afirmó. Cristian comenzó a buscar en la tele algo para ver y encontró un documental sobre la historia del arte, Casey estaba sacando las hamburguesas y poniéndolas en un plato para ambos. El documental estaba empezado y lo puso, Cameron llegó con las hamburguesas y se extrañó un poco al ver que el documental había puesto. Ambos comenzaron a comer y el documental Cameron no lo terminó de ver, porque daba cosas muy erróneas de la verdadera historia del arte, por momentos ella miraba su teléfono, estaba desinteresada por completo del documental. Cristian lo notó, lo pauso y la miró.