Cap 12: Tempestad

Narra Dean

Ya estábamos a punto de salir. Todo estaba tan tranquilo... Que era raro.

Suena mi teléfono alertándome de un mensaje. Es de mi mamá, dice:

"Cariño, tenemos que hablar."

Okey, esa frase nunca es buena y menos de tu madre.

- Dean, ¿Pasa algo?- Pregunta Clary

- No... Descuida, ¿Por qué lo preguntas?- la miro

- Llevas frunciendo el ceño desde que tomaste tu teléfono y te quedaste mirándolo como 10 minutos- dice

Woow. No me di cuenta. Le sonrió para calmarla, de seguro mamá quiere hablar de algo de la casa y no es nada malo. Quizás me va a regañar porque no he ordenado mi cuarto, o porque dije que pintaría la reja de la casa y no he comprado pintura...

¡Oh rayos! ¡La pintura!

Debí comprarla la semana pasada, debo ir hoy.

Tocan la campana y comienzo a juntar mis cosas rápidamente .

- Hey hermano! ¿Tan apurado?- habla Bruno

Saco mi teléfono y le muestro el mensaje de mamá.

- ¡Corre!- dice él y me ayuda a juntar mis cosas.

¿Dios, por qué soy tan desordenado?

Al cabo de un rato, todos me están ayudando a guardar mis cosas y termino.

Caminamos hacía la salida de la escuela y como me notan apurado, se despiden de mí.

Corro unos metros y me volteo a verlos. No se porque lo hago, de todas maneras los veré mañana.

Al mirarlos pasa algo extraño. Como si el tiempo se detuviera... Como si estuviera en una película y viera a los chicos en cámara lenta.

Sonriendo y despidiéndose con la mano.

Una presión se instala en mi pecho pero la ignoro. Me volteo y empiezo a correr hacia la tienda, ignorando el malestar de mi pecho.

- Hola Chris- saludo al chico de la tienda- Dime que tienes el pedido que te hice.

- Claro, lleva días esperándote- dice gracioso. Busca la pintura y me la entrega.

- Gracias, me has salvado de mi madre- le digo

El ríe fuerte. Pago y corro hacia mi casa.

Cuando voy llegando a casa, veo a mi madre por la ventana. Al verme cierra la cortina y me abre la puerta.

- Hola mam...- me interrumpe

- Entra rápido- dice

La miro extrañado y hago lo que me dice.
Voy a la sala y escondo la pintura en mi espalda. 
Ella se me acerca.

-¡Sorpresa!- le muestro la pintura

Esperé un grito de alegría o entusiasmo ya que ella quería desde hace mucho tener una reja bonita y ahora que compre la pintura le podría cumplir ese sueño. En cambio, recibí llanto.

- Hey mamá, ¿Qué te pasa?- me preocupo de inmediato

Dejo la pintura en la mesa y me acerco a ella, la abrazo y la hago sentarse en el sillón.

- Lo siento, lo siento, lo...- no para de llorar

- ¡Mamá!- alzo un poco la voz para que me escuche

Ella me mira y quiero llorar yo también al ver sus mejillas llenas de lágrimas, hace mucho tiempo que no la veía así.

Voy por un vaso con agua para ella, y le ayudo a beberlo lentamente. Ya más calmada, me habla.

- Dean... Marcos estaba aquí- dice

Yo me tenso, eso lo sabía- Lo sé mamá, pero hace rato que no lo he visto en la ciudad.

-No Dean, Marcos estuvo aquí- dice

- ¡¿Qué?!- me levanto del asiento

- Tranquilo, no paso nada. Yo solo lo vi por la ventana cuando hice el aseo luego del trabajo, dejo esto en el buzón- de su bolsillo saca un papel blanco

Lo tomo y lo abro para leer su contenido.

"Hola Dean.
Supongo que ya viste a Marcos, y que te preguntarás el porqué esta en tu cuidad.
Pues no creerás que te dejaría tan fácil, ¿cierto? No a uno de mis mejores chicos.
Todos esperamos tu regreso Dean y confío en que sea pronto, tu sabes que no somos muy pacientes.

Pdt: Tu madre esta tan guapa como siempre y tu amiga... Bueno tiene lo suyo, a Marcos le gusto.

Jack"

Escucho en mi mente un cristal romperse. El de la realidad. Despierto como si de un sueño se tratara. Como si se bajará el telón cuando la función ha terminado.

Eso era. Viví lo que era la calma antes de la tempestad. Y ahora esa tempestad me reclama y me arrastra.

Me hierve la sangre al terminar de leer, arrugo la nota en mis manos y miro a mi madre.

Ella sabe lo que pienso y lo que estoy a punto de hacer, y por eso llora aún más.