Cap 1

Todos queremos ser felices, algunos buscan la felicidad mediante al amor, otros por vicios perjudiciales como beber, fumar etc, otros son felices por cualquier cosa y ese era el caso mío y de mis hermanas. 

Céline, Cecilia, yo, cassidy y charlotte, éramos felices con cualquier cosa, a pesar de yo no ser de su sangre me sentía muy agusto con ellas, lo que nos unía era la hermandad y el amor que nos sentíamos. 

Nuestra casa era mediana cerca de un lago y estábamos a unos 40 minutos del pueblo, la escuela era muy productiva... Para mis hermanas,yo suelo escaparme de las clases para ir a la biblioteca y leer. 

Madre siempre me apoya pero no le gusta que me escape, nuestro pueblo era pequeño todos nos conocíamos, desde el panadero hasta el herrero y los chismes circulan muy rápido. 

El chisme de hoy era que llegaría una familia de Corea hasta el pueblo, no me interesaban esos chismes... Eso sí no tenían que ver conmigo pero hoy era diferente aquella familia serían vecinos nuestros y tenían 3 hijos ¡Que novedad para mis hermanas! 

–cecilia: ¿que dicen? ¿Creen que son guapos? 

–cassidy: posiblemente, pero papá quiere que te cases con alguien que gane buen dinero. 

–cecilia: que mal y todo por tener una cara bonita, la que debería hacer eso es Céline ella es la mayor. 

–charlotte: pero papá ya lo estableció así — hablo mi pequeña charlotte mientras practicaba ballet. 

El orden de nosotras era este, Céline era la mayor, cabello castaño claro con ojos verdes y piel sonrosada, muy buena pintando. 

Luego le seguía Cecilia, ella es la favorita de papá por ser muy buena tocando el piano, y como ella es la que más se cuida su apariencia, papá la cuida más a ella, ojos verde menta, cabello rubio y piel pálida. 

Después estoy yo, cabello ondulado negro, piel morena, ojos color Miel, me gusta hacer varias cosas pero soy más amante de la poesía y literatura, soy una escritora en proceso y me la paso la mayor parte del tiempo escribiendo. 

Cassidy es de cabello rizado con un castaño oscuro, ojos verde avellana y piel bronceada con pecas en la zona de la nariz y mejillas, es una cantante muy buena, pero quiere ser maestra. 

Y por último charlotte, la más pequeña de nosotras, heredó el cabello pelirrojo de la abuela y los ojos grises del abuelo, cualquiera que la viera diría que no es nuestra hermana, es toda una prodigio en el ballet y anhela con ser bailarina. 

–Cecilia: tu que opinas TN, ¿crees que esos chicos nos pretendan? 

–TN: yo hullo del amor, el amor es algo que no me conviene. 

–Céline: sigue escuchando a la tía caliope y serás toda una solterona — llegó céline a la habitación con una canasta de pan fresco. 

—Charlotte: en la escuela dijeron que si una mujer se quedaba soltera hasta los 30 hiba a morir sola. 

—TN: número 1, tengo 16 falta mucho para los 30 ,numero 2 tu maestra no te enseña nada bueno. 

A la habitación llego mamá muy arreglada, ajusto su corcet más de lo debido, llevaba un peinado impecable. 

—señora garnier: niñas vistanse iremos a casa del alcalde, junto con otros invitados incluyendo a los vecinos nuevos. 

Todas fuimos a nuestras respectivas habitaciones a arreglarnos yo me puse un vestido sencillo 

( Chicxs tenía la foto del vestido pero no se como poner imagen, cuando sepa como poner las imágenes se las pondré) 

Baje hasta la puerta encontrándome con amara mi mejor amiga una chica gordita de baja estatura y cabello corto. 

—TN: no entiendo porque las mujeres insisten en usar esos incómodos corsés. 

—amara: sólo una chica sin panza haría una pregunta como esa. 

Las dos nos reímos por lo dicho, siempre intentábamos animarnos una a la otra y intentaba de convencerla de que no llevará semejante tortura en su estómago. 

Las demás bajaron y nos subimos al carruaje, papá hiba conduciendo después de 20 minutos llegamos, para ser sincera el ambiente no era mi ambiente. 

Había personas bailando y hablando, mis hermanas se adaptaron de inmediato pero yo solo observaba. 

Observaba como mis hermanas Céline y Cecilia bailaban con dos chicos, pero uno de ellos no era de aquí, sus ojos parecían ojos de venado, pelinegro alto y bailaba con Cecilia y de inmediato deduje que era uno de los vecinos. 

Luego un chico intentó acercarse a mi ¡ni loca permitiré que me invite a bailar! 

Me escondí entre la multitud, y luego me metí a uno de los comedores de la gran casa, retrocedía lentamente verificando que el chico no me siguiera hasta que mi espalda chocó con algo voltie a ver y era unos de los chicos nuevos del pueblo, cabello castaño, ojos negros, piel pálida el simplemente me observaba como si fuera lo más impresionante que hubiera visto. 

—sehun:¿también te escondes de las personas? 

—TN: no mira estaba planeando como iniciar una guerra de comida — dije con sarcasmo, el solo se rio y una sonrisa se poso en su rostro. 

—sehun: por cierto, me llamó Oh sehun. 

—TN: TN garnier, es un gusto 

—sehun: entonces dime ¿quieres bailar? 

–TN: si bailo contigo no quiero que me cortejes. 

—sehun: descuida, apenas te conozco. 

Sehun y yo bailabamos como dos niños pequeños por todo el comedor, debía admitirlo tenía linda sonrisa, pero no estoy interesada en buscar pareja. 

—TN: entonces ¿ustedes vivirán a 5 minutos se nuestra casa? 

—sehun: claro que si, podríamos bailar como dementes a diario — el sonrió y me guiño el ojo haciendo que diera una carcajada. 

—TN: y hablame de ti y tu familia.