Mis deseos hacia él

Tenía claro mis deseos hacia él, quisiera probarlo, quiero besarlo, quiero hacerle un sinfín de cosas pero como lo deseo, no deseo a nadie más. El era inocente, un filósofo que me cautivo de mil maneras no eran solo sus palabras que me cautivaron sino también cada parte de él que me hace sentir deseada y amada.

Imaginar cómo me toca, como me besa como un experto es lo más morboso que he pensado en mi vida, solo él puede amarme como soy, siempre querré más de él como a ningún otro hombre.

Mis deseos hacia el son prohibidos, morbosos y excitantes es mi propia perdición y yo misma lo sé, solo quiero un mundo con él y permanecer siempre a su lado sin importar lo que pase al final.