Estaba súper nerviosa, recuerdo con la fuerza que te tomaba la mano en esos momentos, mas no podía evitarlo estaba tan nerviosa conocería a tu familia. No sabía yo nada de estas cosas, para mí todo era nuevo, tu mirada me mostraba calma pero al ver que ya faltaba poco para llegar no me podía tranquilizar.
Según recuerdo me dijiste que era una cena ya que un primo tuyo le tenía una sorpresa a todos ustedes, no me dijiste mucho ya que tú tampoco sabias demasiado.
Recuerdo que al llegar a casa de tu abuela yo te tome de la mano y por primera vez mis manos no sudaban al contraía estaban frías, no sé si era por la noche fresca o por mis locos nervios.
Si tan solo supiera lo que el futuro nos tiene preparado, muchas personas no dirían palabras que creen en ese momento que lo cumplirán. Sonreímos ambos y avanzamos a la entrada por fuera se miraba todo serio.
Tanto que pensé que aquí no había ninguna fiesta.
Tocas la puerta y en cuestión de segundos es abierta por una pequeña niña de cabellera negra. Ella te sonríe y grita avisando a todo el mundo que habíamos llegado.
Y mis nervios regresaron al igual que el sonrojo en mis mejillas. Tanto que el frio se me quito.
Tomas mi mano y nos adentramos a lo cálido de la casa, había demasiada gente. Niños jugando y tus tías mirando hacia nosotros, así que me prepare mentalmente para lo que se venía.
(…)
Al conocer todas tus tías al igual que tu madre admito que son unas personas muy mables y con un carisma encantador, también cuando me presentaste a tu abuelita, me sentí especial ya que ella no paraba de decir que era muy linda para ti y que si me habías embrujado y muchas otras cosas graciosas.
Tus hermanos también fueron muy amables y nos hacían burla que me hacían ponerme roja por completo.
Recuerdo que la cena iba a empezar con la llegada de tu primo junto con su novia, ya que la cena era especial para ellos dos. Ya que ellos cumplían un año de casados y acaban de terminar ambos su carrera universitaria, también había familia de la chica y todo esto me resultaba muy lindo.
Muy listo por cierto.
Me resulto extraño y notaron mi rostro de confusión.
Después de eso el silencio en la casa y la oscuridad se hicieron presentes, para segundos después escuchar como la puerta era abierta.
“SORPRESA”
En ese momento lo único que podía ver era la emoción de la pareja y de la familia. Más nunca pensé que el moreno también iba ser una persona importante en mi vida.
“El destino nos tiene sorpresas en la vida, sin importar a quien lastimen”