Todo en su lugar

Con la ayuda de Sophie y Sleipnir, los ocho llegan a Asgard, su amado hogar, todo estaba tal y como lo recordaba, ahí no había ser vivientes más que ellos, llegan a la sala del trono.

- No lo quiero, no es mío, es de papá o de Magne.

- En ese caso, de nuevo hermana te pido que vayas por nuestros hermanos mayores.

_Desde luego – Gracias a la velocidad de su medio hermano, los tres regresan en tan solo un minuto, los tres desmontan, los rubios observan el salón principal -

_¿Es una ilusión?

_No hermano, es real. - Tristán le señala el trono- _Te veras muy bien en él.

_Pero tú eres quien tiene las cualidades para subir.

_- Niega con la cabeza- _ Yo soy feliz siendo un príncipe malcriado y engreído, tú en cambio, tienes la madures, la experiencia para gobernar.

_Eso sí, debes hacerlo bien o nosotros – Magni señala a los ocho- _Te patearemos el trasero.

_Se supone que yo soy el concejal del rey, pero creo Trude que eres mucho mejor que yo dando concejos.

_Prometo ayudar lo mejor que puede.

El rubio es coronado por su hermano y sube al trono, el casco que fuera de Odín aparece en él, así como los cuervos uno en cada hombro, Trude toma el lugar de Fenrir y es ella quien se coloca a la derecha, aparece una tiara dorada con una esmeralda en el centro, de los suelos del salón del trono emerge un cetro dorado al final del cetro otra esmeralda con el mismo diseño que el de la tiara, el Mjiölnir llega y se posa en su mano derecha.

- No te vez tan mal, es cuestión de que te acostumbres.

- Gracias Fenrir.

- Bien ahora debemos ir con Frey y Vanir.

- No, con nuestros padres.

- Así es solo les quedan dos días con nosotros. - Si todo está como estaba antes – dice para el Loki, desaparece del lugar, con Fenrir a su lado, Sophie, se lleva a los demás a Hellheim-

_Lo haremos bien ¿Cierto Trude?

_Cierto. Al menos eso espero.

Los seis llegan a Hellheim, ya conocían la entrada así que ni piden permiso para abrir las puertas y entrar corriendo para ir con sus padres, cuando ven a Thor hablando con Hela ni le avisan los tres le taclean llevándolo al piso, haciendo reír al Dios, este se los quita de encima de un salto se ponen de pie los cuatro, sin perder tiempo inician a pelar los tres contra Thor. Loki estaba en otra habitación meditando, pero los ruidos y más risas no le dejan seguir con su actividad, bufa fastidiada va a ver quiénes son los dueños de las risas, los seis hijos estaban sobre Thor.

- ¡Ríndete!

- ¡ Nunca jamás! – de una moviendo lanza a los seis cada uno estrellándose en las paredes, Loki sigue con la mirada a Annika, le cacha-

- ¡Otra vez! – dice riendo la pequeña-

- ¿Que significa este desorden? – ve a todos con una seriedad que incluso Thor se pone serio- cuántas veces debí repetir que no luchen dentro de casa, para eso es el patio – se coloca a Annika en la espalda, está se sujeta fuerte del cuello, acto seguido Loki, avienta por la ventana a Thor- ¿ Que, no piensan seguirnos?

- ¿ He?

- Doble contra sencillo a qué no nos derrotan a su padre y a mi. – sale por la ventana, llegando con Thor, baja a la pequeña- observa y aprende amor pequeño.

- ¿Los retaste?

- Si, pero creo que no me tomaron en serio.

- Tú tienes la culpa, eres muy estricto con ellos.

- Y tu muy blando - llegan los cinco- _me faltan dos hijos.

- Dijeron que llegan más tarde o mañana, pero no estamos aquí por eso ¿Verdad? — Sophie en posición de pelea-

- — Loki se sujeta el cabello en una cola baja, truena su cuello, Thor choca sus puños— ¿Listo grandote?

- Ujum… ¿Como siempre?

- No, Magni ya conoce nuestros movimientos, también Sophie.

- ¿Que propones?

El primero en atacar fue París quién se lanza sobre Thor, la pelea es pareja cada golpe dado es recibido, le sigue Magni contra Loki, los movimientos de Loki son finos, delicados, sin restar fuerza, golpeando fuerte a la rubia.

- Oye, ayúdame – súplica Magni a Sophie-

La pelirroja algo nerviosa entra a la pelea ayudando a la rubia, más tardo ella en entrar al quite en lo que tardo Loki en dejarlas fuera de combate, Sophie boca abajo en la tierra y en la espalda la rubia, ambas quejados, Loki de pierna cruzada asentado arriba de ellas.

- Y así pequeña Annika es como debes atacar, que te quede claro ¿Se rinden niñas?

- No, estamos tomando aire ¿Verdad Sof?

- Así es…¡ Pa! Pesas mucho.

- Su padre nunca se ha quejado — las dos de poner rojas por el comentario—

- No soy papá, soy tú hija y pesas mucho.

- Claro soy Jöthum ¿Que quieran? – Sophie logra ponerse de pie ayuda a Magni- perfecto, otra ronda.

Los trillizos al mismo tiempo se lanzan sobre Thor, el Dios estudia el ataque, da un gran salto haciendo que los tres choquen entre ellos les antes de caer al piso les pisa las cabezas a los tres haciendo que se quejen los tres, cae al piso de espaldas y sacude las palmas de las manos, ve a Loki otra vez sentado arriba de las muchachas. Loki se pone de pie hace una exagerada reverencia.