"Maybe I already knew You before..."
(Quizás yo te conocías antes)
<<Josie's on vacation far away, come around and talk it over, so many things that it want to say, You know I like my girl's a little bit older... I just want to use your love tonigth... I don't want to lose your love tonigth>>
Quisiera ser una canción para que cuando todos me escucharán, sus sentimientos brotarán, pero en especial una de amor; -¿A quién no le gustan esas canciones?- poder bailar lentamente, meneándose de un lado a otro, y sonriendo estúpidamente con aquella persona.
Con solo imaginarlo se me estremecía la piel de tan hermoso sentimiento. Me imaginaba en aquel castillo como si fuera una princesa o en aquel típico baile de graduación con el chico de tus sueños mientras que el te decía lo mucho que te amaba...
—¡SUNNY! —todo aquello se volvió en una realidad utópico al cabo de un segundo ya que mi madre había interrumpido esa fantasía - ¡Ya levántate! Vas a llegar tarde a clases- Su voz resonaba en mi cabeza provocando un dolor mañanero.
La verdad me encantaba ir a la escuela y eso era extraño para algunos chicos, pero siempre me costaba levantarme temprano. Me aliste con el uniforme (medio planchado) de la secundaria, tenía una corbata con su propia chaqueta que combinaba con tonos azulados claros. Fordd, era unas de las más grandes escuelas secundarias de Danville con muy buen nivel académico. Oí el autobús sonar en la entrada, estaba repleto de jóvenes y olía a una mezcla de sudor con un perfume de Carolina Herrera.
El primer módulo me tocaba en la planta de arriba con a señorita Stephanie, una maestra con la que jamás te debías de meter. Subí lo más rápido que pude con aquella falda un poco corta y con aquellos zapatos puntiagudos, di algunas cintas por el edificio hasta encontrar mi salón,donde se encontraba otros seis salones, un grupo de chicos estorbaba en la entrada entre ellos Arthur Black, mi mejor amigo de toda la vida, era un chico bastante inteligente, su gran sentido de humor enamoraba al instante aunque su físico no fuera tan atractivo,castaño con del mismo color de su cabello y su piel medianamente morena muy normal para el lugar donde estábamos ubicados, perfectamente hecha para él.
—¡Hey, Sunny!—exaltó Arthur que estaba en el pasillo rodeado de otros chicos- ¿Dónde estabas? Te estuve buscando toda la mañana, tengo algo grandioso que contarte.
—Perdón, se que quedamos en vernos temprano en la cafetería pero se me hizo tarde, ¿Qué es eso “tan grandioso” que tienes que decirme?— sonreí con picardía.
—Bueno, adivina quién acaba de perder su virginidad en el verano— al oír esas palabras, abrí mis ojos mucho que me ardieron un poco—¡Este nene!—se señaló con sus dos pulgares cerrando el puño mientras daba un baile ridículo— Y lo mejor es que fue con la chica de mis sueños.
—¿Y? ¿Quién es la desafortunada? Dios, no me puedo creer aún que hayas perdido la virginidad. ¡Tenemos apenas 15 años!—resalté las últimas dos palabras que salieron de mi boca, me sentía un poco extraña, mi mejor amigo acababa de perder la virginidad y yo no había podido decirle lo que sentía desde mucho tiempo. Lo único que me quedaba era alegrarme por él y eso era lo justo que iba hacer.
—Marie Avonlea, la del grupo 3-A, jamás creía que iba a hacerme caso— suspiró y puso una mirada tan cursi.
—¿Son pareja?
—No, solo lo intentamos, ella me mandó un mensaje y yo le dije que sí, ¿Qué opinas?
—¿Solo un mensaje? Eso creo que es solo una salida casual, en realidad nada, que asombr— me interrumpió con aquel grito ahogado de felicidad.
—¡Mira, Sunny! ¡Es ella!—señaló cuidadosamente con el dedo índice para que no se diera cuenta la chica— ¿No es hermosa?—respondio incrédulo.
El timbre de entrada sonó y yo no me moví de ahí hasta verla, el tenía razón Marie, era extremadamente hermosa, parecía ser una diosa con aquella cara perfilada y ese cabello tan deslumbrante. Sentía que nunca iba a poder ser algo más con Arthur; no me sentía tan hermosa como esas chicas que brillaban al caminar; era desaliñada y con el pelo completamente esponjado y no era atractiva para los chicos, el único que me había interesado completamente estaba perdidamente enamorado de aquella princesa.
°°°
El tiempo en la escuela era insaciable, todo el día Arthur platicaba sobre cómo se sentía respecto a su amoroso problema. No pude evitar sentirme incómoda pero tenía que tratarlo con amabilidad ante todo.
Esperaba con ansias el timbre final, no soportaba estar ahí sentada al lado de mi supuesto amor imposible, era una niña de tercer grado con casi 15 años y me preocupaba tanto por alguien que me conocía tan bien.
—¡Sunny-Fatty! Venga, ven acompañarnos a comernos unos pastelillos, oink oink—gritó un grupo de chicos al final del pasillo mientras soltaban grandes carcajadas burlonas.
Arthur me agarró del brazo y me arrastró hacia la salida —No les hagas caso a esos idiotas—me susurró al oído para tratar de consolarme de aquellas criticas vergonzosas. No quería seguir lidiando con estos problemillas por lo menos este día, el siguiente sería uno nuevo y sin errores, con nuevas esperanzas y nuevos sueños, sería aún más impactante por que cumplía 15 años... Aún más maravilloso por que estaba otro año a lado de mi familia.
—No deberías dejar que esos chicos te intimiden, ¡Defiéndete,chica!
—En realidad no me afecta tanto, solo dicen la verdad—señale mi cuerpo indicando de lo que estaba hablando era cierto— solo mírame.
Deseaba estar en un lugar donde no me reconociera nadie y no supieran quién era en realidad, me fui caminando con decisión tratando de ser lo más “natural”, no quería que me viera llorar aunque lo intentará esos insultos me afectaban hasta el alma; me hacía sentir débil, sin ninguna “capa de protección” desnuda ante la sociedad. Quería un cambio en mi vida pero era difícil.