La conversión genuina que se da en una persona al momento de que esta acepta a Jesús en su corazón y posteriormente hay un quebrantamiento en su interior, da inicio a un maravilloso proceso ejercido por el Espíritu Santo en donde la persona (ahora convertida) empieza a experimentar cambios que jamás pensó que sucedieran en su vida, por ejemplo, dejar alguna adicción o sentir una paz inexplicable en medio de los problemas que se le presenten, algo que solamente pasa en la vida de un creyente.
Estas experiencias con el Espíritu Santo son únicas, porque en una conversión suceden muchas cosas y entre ellas se encuentra la morada que el Espíritu Santo hace en la vida de aquel que le acepta; convirtiéndolo en su Templo (1 Corintios 6:19). Un corazón entregado y rendido a la voluntad de Dios hace que el mismo crezca espiritualmente, generando una pasión que lo impulsa a entrar de lleno a la obra de Dios, creando en él, un deseo de ser bautizado en las aguas para poder participar de los privilegios en una congregación de parte de Dios, lo que hará que su pasión por el Señor, crezca aún más y a corto plazo hará que el creyente empiece a dar “Frutos del Espíritu Santo”;
Mas el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, mansedumbre, templanza; contra tales cosas no hay ley.
Gálatas 5:22-23 (RV 1960)
Sin duda alguna esta, es una etapa maravillosa en donde la emoción, el gozo y el amor por la obra del Señor van en aumento en la vida del creyente porque está siendo restaurado tanto física como espiritualmente para ser lleno del Espíritu Santo en su andar en el evangelio, y fue esta etapa la que genero el avivamiento que tuvo lugar en la iglesia de Tiatira en aquel tiempo;
Estoy enterado de todo lo que haces. Sé muy bien que me amas y que no has dejado de confiar en mí; también sé que has servido a los demás, y que ahora los estás ayudando mucho más que al principio.
Apocalipsis 2:19 (BLS)
Dios le reconoció la gran labor y dedicación a la iglesia en Tiatira, no porque les nació en el corazón hacerlo, sino que fue la obra del Espíritu Santo que se manifestó en ellos. El ejemplo que esta iglesia nos da, es muy hermoso ya que todo lo que ellos hicieron no fue por mera ilusión o solo porque se sintieron obligados a hacerlo, sino que todo fue por amor a Dios, algo que para muchos que han estado años y años en una congregación no comprenden aun; que a Dios no se le puede engañar por lo tanto el conoce muy bien el corazón del hombre, cuando este le sirve con amor y dedicación o por obligación y rutina. Pero ¿Cómo es que una persona llega a amar a alguien, a quien no puede ver ni tocar? Pues solo hay una respuesta para tal pregunta: “mediante la fe”, y fue esta convicción o confianza la que llevo a la iglesia a tales obras, aprobadas por Dios: Sé muy bien que me amas y que no has dejado de confiar en mí;
Así como un cuerpo sin alma está muerto, también la confianza en Dios está muerta si no va acompañada de buenas acciones.
Santiago 2:26 (BLS)
La iglesia en Tiatira estaba pasando por un gran momento espiritualmente hablando, porque estaban siendo guiados por el Espíritu Santo para ser restaurados, ya que es el único que podría crear tal amor en el corazón de los creyentes (Gálatas 5:22-23), dejando por un lado todo aquello que impidiera un crecimiento espiritual en la congregación, como lo es el odio, la amargura o las contiendas. En si podríamos definir que esta iglesia, desde sus inicios fue en aumento con respecto a la obra del Señor que al parecer no le pusieron parámetros a su servicio ya que hay una buena cantidad de décadas entre sus inicios y la entrega del mensaje a la iglesia de parte del Apóstol Juan, por lo tanto, la perseverancia también era una de las cualidades que esta iglesia poseía. Teniendo en cuenta estos aspectos a cerca de la iglesia en Tiatira, podemos hacer una clara comparación entre el estado de la iglesia y la vida de un creyente, en dos aspectos;
- Recordemos que este mensaje no solo es de aspecto histórico con respecto a la iglesia en sus inicios, sino que se convierte en un mensaje profético para la vida del creyente en la actualidad, tomando en cuenta la conversión que hubo en él a través del evangelio, tal y como se dijo al principio, o sea que Dios conoce todo lo que el creyente ha hecho por la obra del Señor desde que se convirtió hasta su estado actual, independientemente de lo mucho o poco que haya aumentado su pasión por la obra, tomando en cuenta que tanto empleo lo que Dios le ha dado a través de su Espíritu Santo; amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, etc.
- El segundo aspecto llega a ser más profundo y complejo en la vida del creyente, ya que en el ámbito espiritual se sabe que hay una guerra continua en contra del creyente (Efesios 6:12). Pero hay que ser muy francos en este tema, porque hay muchos que no llegan a prepararse de la manera correcta para poder soportar los dardos de fuego que el enemigo manda a la vida de cada creyente (Efesios 6:16) lo que provoca que este caiga en distintos pecados ya sea de adulterio, fornicación o el retorno a alguna adicción de la cual Dios le había sacado, en fin, son muchos aspectos a considerar en cuanto a la gravedad que estos pecados conllevan, sin tomar en cuenta todos los pecados sigilosos que pueden entrar a una congregación. Aunque para muchos creyentes estos temas llegan a ser territorio perfecto para exponer la dureza de su corazón, ya que para algunos es inadmisible una posible restauración de la persona que haya caído, decisión que en si no les corresponde a ellos ya que si la persona en verdad esta arrepentida y dispuesta a cambiar, pues Dios mismo la va a restaurar y usara esta caiga para encender una vez más el fuego del Espíritu Santo en esta persona, o sea que se levantara con un gran impulso que la llevara a buscar más de la presencia de Dios y de la comunión con el Espíritu Santo lo cual haría que sus obras sean mayores a las anteriores.