Mi corazón está herido;
Mis pensamientos perdidos.
Mi vida está llena de nada.
Una vacía, que me impulsa a querer
quemarme y dejar de existir.
Quizá si me vuelvo cenizas,
este dolor agudo deje de molestarme.
Encerrada en mi mundo me quedo,
sin ver, completamente ciega
a merced de la oscuridad.
Anhelo sentir con intensidad,
y dejar de auto felicitarme
por mis logros. Ver rostros
distintos y alegres,
sentir que soy parte
de algo más profundo.
Pero por mas calidez que
encuentre en mi camino,
más fría me vuelvo,
siento la necesidad de apartarme.
Es porque le temo al mundo,
tengo miedo de estas
sensaciones aniquilantes.
De hacer lo mismo tantas
veces hasta aburrirme.
Estoy harta de encerrarme,
ya no sé como salir
de esta cárcel invisible,
sólo quiero ser nada.