Perdida

Sol llevaba ratos sin ver a Estrella, y eso le pareció raro, ya que ella no era la que le gustaba esconderse de nadie solo cuando se ponía a jugar con su familia a la escondida.

Así que comenzó a buscarla en donde la había visto por última vez pero no se encontraba ahí, fue donde estaba sus padres para ver si estaba con ellos pero no, se dirigió a su cuarto y nada, ya había comenzado a buscar en todas su casa pero nada juntos con sus padres.

Llevaba dos horas desaparecida y Sol decidió buscarla de nuevo en el lugar que la había visto antes, el lugar se notaba algo diferente, se acercó más hasta que halló un sótano y ahí era donde se encontraba Estrella, se encontraba acostada en un suelo sucio y humedecido

- ¿Estrella...? ¿Te encuentras bien...?.

La niña no respondía.

- Estrella levántate para poderte sacarte.

Pero nada, buscó estrategias para sacarla pero se había dado cuenta que no podía porque era muy profundo y Sol era pequeña para ayudarla, así que fue en busca de sus padres.

-Papá, mamá ya encontré a Estrella....- les dijo a sus padres con lágrimas en los ojos no la he podido sacar donde está... No me responde...

-¡¿En dónde se encuentra?!- su madre le pregunto con desesperación.

El padre se encontraba a tónico con la descripción del lugar que su hija le daba mientras caminaban para encontrarla.

Al llegar halla, su padre le gritaba.

-Estrella, mi amor, hija, ¿Te encuentras bien?- le gritaba el padre desesperado por no oír a su pequeña responder.

Mientras su madre buscaba en el lugar algo para sacarla. Hasta que encontró una pequeña escalera.

-¡Jin encontré algo para que saques de ahí a mi pequeña!- le gritaba su esposa desde el otro extremo de la habitación.

Jin se levantó del lugar donde se había caído su hija y corrió hasta su esposa y agarro la escalera entre sus manos y la ubicó perfectamente en ese agujero que le ocasionaba escalofríos.

Al bajar por las escaleras y evitar caerse se dio cuenta que era una habitación enorme y espeluznante, aquel lugar se encontraba oscuro pero a dura penas se podía ver el pequeño cuerpo de su hija tirado en el suelo.

El, al ver a su pequeña se le llenó de lágrimas su rostro. La recogió entre sus brazos delicadamente para no causarle más daño. Subió por la escalera con un poco de tranquilidad por haberla encontrado, pero a un se sentía alarmado al ver que su hija todavía no reaccionaba.

Ya había pasado media hora desde que la hallaron, ella se encontraba entre las sábanas un poco consiente mientras el doctor la revisaba y sus padres esperaban que ella abriera los ojos y hablara.

La pequeña se sentía un poco aturdida con la presencia del doctor, no respondía nada mientras le preguntaban:

- ¡Despertó...!- grito el padre mientras le avisaba a su mujer.

Ella se percató que era verdad y corrió encima de su hija para abrazarla.

-¿Te sientes bien mi niña?- le preguntaba la madre con dulzura.

- Se encuentra bien señora, no se preocupe no tiene ninguna fractura decía el doctor- solo tiene unos pequeños moretones.

Estrella todavía no respondía a la pregunta de su madre.

- ¿Pero, porqué todavía no habla?- le preguntó la madre.

- Debe ser por el shock.- respondió el doctor.

El doctor se retira después de indicarle los medicamentos que debería de tomar para el dolor.

Ya había pasado más de dos horas y la niña no hablaba, la madre con paciencia esperaba oírla otra vez.

- ¿Mi niña, qué quieres comer?- la madre le preguntaba a Estrella.

Pero ella no respondía.

- Mamá creo que le gustarías que le prepararas su comida favorita.-dijo Sol al esperar una reacción de felicidad de su hermana.

Pero no emitía ninguna emoción.

Así pasó la pequeña hasta llegar la noche. Sus padres todavía no sabían por qué había dejado de hablar.

Se fueron a dormir todos, los padres con la duda en su cabeza y preocupado por el cambio.

Las dos hermanas dormían juntas, sus padres le contaban cuentas y les cantaban canciones de cuna como era de costumbre, al dejarla dormida después de la melodía, ellos decidieron dormir, dejando como es de costumbre sola y dormidas.

.....

- ¡Qué le estará pasando a Estrella duras penas abre la boca para comer!-decía la esposa.

- Recuerda Isabela lo que dijo el doctor que debe ser por el shock.- respondió Jin.

- Si se, pero me preocupa igual que no hable, ya lleva horas en esa situación.

- Si mi amor, pero ten paciencia.

- Paciencia es lo que estoy perdiendo.

- Descansa, mañana será otro día.

- Si, hoy ha sido un día muy cansado.

......

- Estrella, tranquila, no llores solo fue una pesadilla.- Sol con dulzura le decía a su pequeña hermana.

- Ya tranquila, duerme.- le dijo Sol dejándola dormida sola y tranquila en su cama. Pero esa tranquilidad no duraría mucho.

Sol que había quedado completamente dormida, así que no oyó cuando su hermana se bajó de la cama y que hablaba con alguien. Hasta que la hermana se había tropezado con algo y noto que Estrella ya no se encontraba dormida, buscándola con la mirada por toda la habitación se da cuenta que su hermana estaba susurrando algo y muy difícil de entender y detenida de frente a la nada.

- Ester, ¿qué haces ahí?-le pregunta Sol a Estrella - ¿Con quién estás hablando?.

Estrella no respondía nada y seguía como antes.

-Ven acuéstate a dormir ya es muy tarde.

Seguía sin responder la pequeña.

- Ester...- se baja de la cama, pensando que la hermana no había escuchado, al momento de que se acerca a su hermana ve algo raro en ella pero no lo puedo descifrar que era.

- Este...-Se acerca cada vez más y más - Ester... ¿estas bien?...-pero ella no responde.

Cuando ya se encuentra cerca de su hermana, Sol le tocó el hombro.

- Ester vamos a dormir, ¿si?- La pequeña gira la cara y Sol se asusta cayendo al piso y cerrando los ojos después de haber visto el rostro desfigurado de su pequeña hermana.