11.Closed Eyes

ANDREA 

Mientras estoy caminando tranquilamente hacia el Instituto, una patrulla policial con las sirenas encendidas pasa velozmente al lado mío.

Que raro

En este pequeño pueblo nunca antes se mencionaba la posibilidad de un asesino, pero todo cambió hace algunas semanas al escuchar rumores sobre un asesino del que nadie hablaba por temor. Al parecer, había fallecido, aunque solo es una teoría, ya que también se decía que había desaparecido debido a su muerte.

El Artista 

Bastante original.

Al llegar al instituto observo que están distintos vehículos policiales y guardas patrullando a los alrededores del instituto.

 Algo sucedió 

Entró rápidamente al instituto siendo observada sin disimulo por todos los policías en la zona.

Mientras recorro ciertos pasillos, noto a profesores angustiados conversando con policías, y algunos estudiantes lloran, gritan o están desmayados.

Poco después escucho el sonido de una ambulancia llegar.

¿Que paso?

La desesperación por no encontrar respuesta se empieza a apoderar de mí.

Sigo caminando observando detenidamente todo el desastre a mi alrededor tratando de encontrar una respuesta a toda esta situación.

Esto es un caos.

Algunos padres de familia han comenzado a llegar con urgencia, buscando a sus hijos de manera desesperada.

noto a un grupo de estudiantes al final del pasillo mirando algo, por lo que decido acercarme. Sin embargo, al llegar, una línea Amarilla nos impide entrar al aula.

Es el salón de arte.

Que casualidad 

Exacto.

- ¿ Que sucedió? - pregunto en un susurro.

- Brusela encontró a Rosalína muerta en el salón de arte - susurran con temor en la voz.

Me quedé perpleja, incapaz de creer lo que acababan de contarme. Mis pensamientos dieron vueltas en un torbellino de incredulidad, dejándome atónita ante la impactante noticia.

Brusela

- ¿saben donde esta Brusela?- mi voz tembló ligeramente, titubeando en las palabras que intentaba expresar.

- La llevaron a la dirección los guardias para interrogarla, ya que es la principal sospechosa.

- esa estupida de seguro es la asesina- murmura en un tono casi inaudible pero que logro escuchar.

A mi alrededor, se murmuran acusaciones hacia Brusela, tachándola de asesina, loca y maníaca, mientras las maldiciones le llueven por sus supuestas acciones perturbadoras.

Escuchar esas suposiciones y ver cómo la tachan de asesina me llena de impotencia. Saber que esas afirmaciones carecen de fundamento y sentir la injusticia que recae sobre alguien inocente es abrumador e irritante.

 Tampoco puedes descartar la posibilidad de que ya sea la asesina

No. Me niego a creerlo, no la conozco completamente pero sí lo suficiente como para saber que no haría algo como esto.

 Estás estás confiando en alguien 

A pesar de haber confiado en muchas personas y haber experimentado daño y traición, estoy considerando confiar una vez más, con la esperanza de que esta vez las cosas sean diferentes.

Eres una estupida 

Los murmullos no cesan; empeoran con comentarios horribles e indecentes acerca de ella, provocando que mi respiración se acelere y la ira comience a apoderarse de mí.

La situación me deja impotente y desesperada; no puedo quedarme inactiva ante la injusticia que está ocurriendo.

Si puedes hacer algo

Una leve sonrisa se forma en mi rostro, pero la elimino rápidamente para ser sustituida con una expresión furiosa, me acerco decididamente a una de las chicas que inició los murmullos sobre las injustas suposiciones hacia Brusela.

Al notar mi aproximación, intentan entablar una conversación, pero no les doy tiempo suficiente. Mi puño impacta contra su rostro, provocando un quejido de su parte y sonidos de asombro de todos a mi alrededor.

Siempre me he destacado por mi amabilidad y educación, siendo incapaz incluso de hacerle daño a una mosca. Por lo tanto, mi actitud tan inusual sorprende a quienes me conocen.

muy bien, acorde al plan

Lo sé.

Con incredulidad en su mirada, se sostiene adolorida la nariz con algunas gotas de sangre cayendo al suelo. Me acerco lentamente, colocando mi mano en su hombro, y acercando mis labios a su oído. Aunque intenta alejarse asustada, pero aprieto mi mano en su hombro, lanzándole una amenaza silenciosa para indicarle que permanezca en su sitio.

-No solo es una asesina la que empuña un cuchillo, sino también aquella que dice palabras cortantes sin justificación alguna.- le susurro de manera amenazante.

Observo cómo los vellos de su piel se erizan, su cuerpo tiembla ligeramente y su respiración se acelera, mientras sollozos ahogados por su palma resuenan en el silencioso lugar.
 Nadie interviene ni protesta en su favor, ni siquiera sus supuestas amigas. La falsedad reina, siendo amigas en los momentos buenos pero desconocidas en los malos. En última instancia, nadie pondría la mano en el fuego por otro más que por sí mismo; al final del día, estás solo, ya que por más que ayudes a los demás, nadie vendrá en tu ayuda en algún momento de necesidad.

Es cruel pero es la realidad.

-¡ANDREA! - una voz llena de enojo me llama alejándome de un empujo de la chica mientras yo observo la situación con seriedad analizando mi siguiente movimiento.

Guardo silencio al escuchar las reprimendas de uno de los profesores, culpándome por el acto inmoral hacia una compañera en lugar de reprenderla a ella, que sin razón alguna perjudicó verbalmente a otra persona.

Pero claro;como en este pequeño pueblo, solo prospera la injusticia y la maldad, mientras la escasa amabilidad y justicia se desvanecen entre las sombras.No esperaba menos de un profesor sin una pizca de profesionalidad.