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Jasmine

—¿Que te sucede? No puedes amenazar al Alfa de esa forma y de ninguna forma posible ¿Quieres morir? Salvaste a su compañera, pero no te perdonara la vida si te atreves hacerle algo.

—¿Que relación tienes con el? —ignora por completo lo que le dije.

No puedo creer que en verdad me esté preguntando eso, he intentando acercarme a él las últimas semanas, por que así lo quiero ¿como puede estar celoso?
Aunque puedo aprovechar eso a mi favor, el se resiste a estar conmigo, pero en el fondo sufre incluso más que yo, es un lobo, es su instinto, en cambio yo, puedo elegir si fortalecer nuestra unión o no. En parte por eso, he estado diciendo que voy a regresar a mi hogar, aunque no es del todo mentira, no quiero estar aquí sabiendo que el, no solo me rechaza, si no que, me odia, según me dijo.

Todo es tan confuso.

—Contestame —me pide.
Mejor dicho, me ordena, cuando me perdí en mis pensamientos.

—No tengo que darte explicaciones —digo con indiferencia.

—No estoy jugando —esta muy furioso.

Es divertido.

En vez de asustarme,  más bien  me da risa, aunque claro, no voy a reírme en su cara, tal vez lo haga después cuando le cuente a mi amigo, dependiendo de cómo termine la reunión programada para después del desayuno.

—Me dejaste claro que me odias y no deseas nada de mi ¿por que habrías de tener el derecho de exigirme algo?

Abrió la boca para hablar, pero no dijo nada.

Cruzo mis brazos y me voy, punto para mi.

Plan B, torturar a Elioth.