M E N T I R A S

2. Mini-Marker

Riley

Me hago a lado de mi auto. A Aiden se le ha quedado el celular ha corrido a buscarlo. No puede vivir sin él. A veces cuando estamos hablando no me presta atención y me dan ganas de partirle ese celular por la mitad, pero me clamo y le dejo de hablar ¿Para qué estar gastando saliva?

Aiden sale de la casa y cierra la puerta. Me mira y me sonríe. Y yo como estúpida sonrió. Él es demasiado atractivo, por algo es mi mejor amigo ¿No? Tiene el cabello rojizo, pero a veces yo lo veo de color naranja. Le ha crecido la barba. Y lo que más amo de él, además de ser el mejor amigo del mundo es el color de sus ojos. Son celestes pero a veces se ven casi azules. Igual que los míos pero yo no soy importante.

Nos subimos al carro, y lo primero que hago al subir al auto es sacar un arma que tengo debajo del asiento, en momento que alzo mi brazo para apuntarle en la cabeza con esta, él lo hace al mismo tiempo. Ambos apuntados en la cabeza. Bajo el arma y la guardo en su lugar. Saco el freno y aceleró. Miro por el espejo retrovisor y justo está saliendo la chica rubia de los apuntes. Bajo aún más el pedal.

-Otro empate eh -Dice el chico a mi lado.

-Igual llevo más ganadas -Rápidamente volteo a verlo y le saco la lengua. Para enviar morir miro devuelta la carretera.

-Como que se te ha crecido el cabello ¿No? -Estira su mano abarra un mechón de mi cabello.

-Si -Digo a secas. Quito una mano del volante y toco mi cabello. Frunzo el ceño.

Por lo general llevo el cabello casi tan corto como un hombre. Odio que mi almohada se llene de cabello. Además molesta cuando estoy haciendo algún deporte.

-Sobre esa chica...

Sonrió.

-No te preocupes solo será para pasar el rato.

-Vale. -¿Escucharon eso? Eso es lo bueno de Aiden no cuestiona mis acciones.

-¿Qué piensas?

-No Durara, Estoy bien con eso-Se encoge de hombros-. ¿A dónde Vamos?

-A quitarme este maldito uniforme. Odio esta falda.

Se ríe.

-Casi no te dejan entrar a la escuela por buscar pelea, solo por qué no te dejaron usar el uniforme de hombre -Carcajea. Siempre que estoy con este chico no puedo evitar siempre tener una sonrisa.

-Si. Al menos puedo usar la corbata y no ese horrible laso. Que nostalgia eh. Ya tres año de eso. ¿Apostamos quien tiene que decir el discurso de graduados?

-Seguro tú.

-Apostemos.

-Claro. ¿Qué aremos?

-Es viernes, quiero beber.

-¿Ron?

-Sin Coca-Cola. A secas.

El hace una cara de asco. Ha pero esa cara no la pone cuando lleva la botella a la mita.

-Vamos a la playa -Dice.

-Así es.

Después de cambiarme Maneje hasta un mini-marker. Compramos dos botellas grandes de Ron, una cajeta de cigarrillos, y frituras. Casi que nos quedamos sin dinero.

Cuando llegamos a la playa, le subí el volumen al radio. Y nos sentamos en la arena cerca del agua a beber.

Cerca de las tres de la madrugada siento mi cara entumecida. Me duele la cabeza como loca. Mi botella casi vacía la dejo a mi lado, junto a las bolsas de frituras vacías. Recuesto mi cabeza en su hombro cierro los ojos y le digo:

-Si no fuese una basura de persona me hubiese querido casar contigo.

Él se carcajea y siento como su cuerpo se sacude. No estoy bromeando. O sí. No sé.

-Estas ebrias.

-Estoy ebria.

-Vámonos, hoy me quedo contigo.

Me levanto. Y siento mi cuerpo pesado. Me tambalea al caminar recojo las basura que hemos tirado y mi botella casi vacía. Recojo la de Aiden y está por la mitad. Frunzo el ceño. Intento caminar al carro. Cuando llego abro la puerta de atrás y meto todo lo que recogí. La cierro y abro la del piloto. Me siento y en siendo el auto. Voy a cerrar la puerta pero algo me detiene. Es Aiden.

-¿Qué haces -le cuestiono.

-Estas muy borrachas. Voy a manejar yo.

-Pero es mi carro.

-Sin carro te vas a quedar si conduces ebria.

Le miro, y luego miro al frente. El mar. Inhalo y exhalo. Le vuelvo a mirar. Cuando voy a responderle lo que hago es vomitar. Él se echa para atrás para no quedar salpicado. Salgo y me cambió para el copiloto. Saco la cajeta de cigarrillos de mi chaqueta y saco uno. Me lo meto en la boca y lo enciendo.

-Eso creí -dice Aiden.

Me volteo a míralo. Le suelto todo el humo en la cara. Me mira mal, y le sonrió.

-Gracias.

-¿Porqué? -Dice y enciende el auto.

-Porque aún sigues conmigo.

El asiente. Se mete a la carretera.

-Las buenas amistades persisten, por eso tú y yo seguimos siendo amigos.

Sonrió, porque esa frase se la dije cuando me toco aguantarlo borracho. Asiento repetidas veces y cierro los ojos.

*

Me despierto. Miro la hora, son las 12:26 PM. Bostezo y estiro mi cuerpo. Me levanto y camino a la cocina. Tomo una botella de agua del refrigerador. Me la bebo toda. Agarro otra botella y me siento en la mesa que tengo en la cocina. Allí hay unas pastillas y una nota que dice "Siempre es bueno tomarse unas pastillas para el dolor de cabeza, seguro que las necesitas." Me río y me tomo las patillas y bebo toda el agua.

Miro lo que tengo puesto. Un short de tela y una camiseta. Nada de lo que tenía ayer puesto. Me cambio a unos jeans rasgados negro y suéter gris con el logo de Guns N' Roses. Y mi chaqueta de cuero negra. Huelo la ropa, para asegurarme de no estar apestosa. Todo bien.



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En el texto hay: mentiras, mafia, bixesual

Editado: 19.09.2019

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