CAPITULO 11

Ya ha pasado una semana desde que regresamos de vacaciones, me alegre de volver a Hide pues, aunque solo haya sido un fin de semana, ella hacia todo muy divertida y extrañaba esa personalidad suya.

Afortunada mente, todo lo que paso en el aeropuerto no paso de un susto y Mateo me aseguro que nadie se dio cuenta de que estuve ahí, eso me alegro pues estaba segura al igual que todos los que quería.   

Hable por teléfono con Mateo más tranquila, después de aterrizar ese día; me dijo que se me veía increíble ese cambio en el cabello, al igual que estaba más tranquilo de haberme visto pues estaba seguro que yo estaba bien. 

Me puse a pensar y creo que me he adaptado muy bien a esta nueva vida, y ya me he acostumbrado a casi todo, pero aun así me hacía falta mi mejor amigo a mi lado, y que aunque tuviéramos muchas llamadas telefónicas, eso no bastaba. Espero y un día poder vivir con él a mi lado.

Se me hacía tarde para ir al trabajo, había pasado mucho tiempo en la bañera. Sali rápido me cambie, Hide también estaba muy apurada. Bajamos corriendo porque Harb ya está abajo esperándonos.

-¿que las atrasó tanto? - preguntó Harb  

-buenos día, yo me tardé en duchar- dije dándole un beso en la mejilla y poniéndome el cinturón 

-buen día hermanito, perdón es que Morfeo no me soltaba- dijo Hide divertida riendo 

-está bien vámonos- dijo y arranco el auto

Y así paso otra semana llena de buenos momentos y normales.

Es viernes y Harb como siempre nos llevó a casa después del trabajo, subimos al departamento. Preparamos la cena y dormimos así termino un día más.

Paso otro día más y Harb iba a ir a revisar algunas cosas en la otra cafetería, así que Hide y yo regresamos solas a casa, porque él iba a salir tarde.   

Ya me encontraba en la cama pues era tarde, de pronto sentí unos grandes brazos rodeando mi cintura. Pronto también mi cuello se llenó de besos al voltear me encontré con Harb.

-hola... hermosa...- dijo Harb

Un olor extraño salía de él, me acerqué para poder percibir mejor el olor y me di cuenta que era alcohol, pero había algo más en él, Harb me dio un beso y se separó de mí.

-Huelo mal, creo que será mejor que me dé una ducha- 

Diciendo se paró de la cama y tambaleándose, se dirigió a la ducha. No me centre más en eso y cerré los ojos para dormir, de verdad estaba muy cansada. 

Me levante para solo encontrar a Harb a mi lado, esta es una de mis cosas favoritas, le di un beso en la mejilla me levante para bañarme y hacer el desayuno. 

-Hoy ¿harán algo?- dijo Hide metiéndose un pedazo de fruta a la boca 

-yo no tengo nada planeado, estaba buscando ideas de que hacer en mis días libres- dije tomando un poco de jugo 

- quería tener una cita hoy con Hide, pero al parecer ella busca algo mas- Harb voltee a verme 

-esta bien tengamos una cita- le conteste viéndolo de igual manera con una sonrisa 

-genial, debo de conseguir un novio urgentemente- dijo Hide un poco desanimada 

-¿quieres ir con nosotros? - dije invitándola a la salida 

-no gracias, no quiero ser la tercera en su relación- rio después de decirlo y siguió comiendo

Nuestra cita comenzó yendo a un acuario, me encantaba no había estado en un lugar así desde ya hacia un tiempo, corría tomando fotos por todos lados y viendo todo tipo de peces. 

-me encanta verte así-  dijo Harb 

-¿asi ?- no sabía exactamente a que se refería 

me llevo hasta una banca para sentarnos, abrió una botella de agua.

-Me encanta verte sonriendo y feliz, tus ojos brillan cada cuando haces algo nuevo o experimentas algo nuevo que te gusta, daría cualquier cosa por verte siempre de esta manera- esas palabras de vedad tocaron lo más profundo de mi corazón

-¿de verdad me veo así de genial?, lo único que debes hacer es estar a mi lado y no lastimarme, con solo eso te aseguro que esta sonrisa siempre estará en mi rostro - dicho esto me acerque para darle un corto beso 

Salimos de aquel lugar. 

-ohh quiero un helado - dije viendo un lugar de helados - ¿quieres uno ?, yo lo invito- dije orgullosa   

 -eres genial, si quiero vamos- 

Caminamos hacia el lugar de helados y los pedimos. Caminamos hacia el auto.

 No sabía exactamente a donde íbamos hasta que llegamos al lugar y era una pista de patinaje. Me sorprendí de verdad no sabía patinar muy bien, pero al mismo me emocionaba.

Al parecer él era un experto haciéndolo. Pero aun así lo intentaba lo más que podía, para no caer tanto.

-vamos sujétate fuerte de mí, vallamos lento- Harb me iba sujetando

-ohh esto es muy difícil- dije intentando avanzar

-solo tienes que tener equilibrio, ¿quieres irte? - dijo 

-no, esto me gusta, solo enséñame- dije viéndolo con una sonrisa   

Y así pasamos unas horas, de verdad aprendí algo en ese tiempo, me gustaba que Harb tenía mucha paciencia conmigo. Sali ilesa de aquella pista de patinaje.

-vamos a tomar comer algo, ya es tarde- solo asentí con la cabeza

Me llevo a un lugar muy colorido con música en vivo y una pista de baile en el centro el lugar. había dos niveles. Una señorita nos llevó hasta nuestra mesa 

-gracias- dije 

-aquí le dejo la carta, con permiso- y dicho eso la señorita se alejo 

Abrí la carta y había muchos platillos no sabía que elegir. 

-¿sabes que vas a pedir? - pregunto Harb

-creo que si- 

Seguido de eso nos pusimos a comer, todo estaba realmente delicioso 

-tengo curiosidad por ti, ¿a qué te dedicabas antes de llegar aquí? - pregunto Harb

No podía decirle la verdad y eso dolía, no me gustaba mentirle, pero no tenía opción, nadie podía saber nada.

-ahh antes solo estudiaba, mi papa me pagaba clases particulares en línea, después decidí seguir con mi camino y llegué hasta aquí- no estaba mintiendo, solo resumí la historia