Un relato sobre la vida aventurera de Benjamín Colunga y de cómo llegó a obtener el tan poderoso imperio.
Tenía 10 años, cuando sus padres murieron en un accidente de transito, fue criado por un tío, Frederic Colunga el padre de Francesco Colunga. Frederic era un hombre autoritario, que tomó la potestad de manejar los bienes de Benjamín hasta que tuviera 18 años, pero su tío era adicto al juego de casino, gastándose el dinero de su sobrino.
Ese dinero que su tío gastó, era el ahorro de sus padres para sus estudios universitarios.
Benjamín hipotecó la casa de su padre para pagar su universidad y así logró prepararse como abogado. En una conversación que escuchó de su tío con otras personas allegadas a sus padres, se enteró que él tenía un matrimonio arreglado con Helena Santamaria, una mujer que él recordaba cuando tenía 8 años, en ese entonces Helena era muy bonita. No la volvió a ver más hasta que tocan el tema del matrimonio.
—Los padres de Helena tienen buena influencia en el mercado, si te casas con ella, tendrías un futuro asegurado—. le dijo su tío.
El día del encuentro, Benjamín estaba algo nervioso al llegar a la casa de la prometida. Cuando él va subiendo los escalones ella se asoma con un vestido vintage, que mostraba sus largas piernas y su belleza única, la atracción fue mutua, evidentemente Benjamín se enamoró perdidamente de Helena.
Luego de casarse, la vida de familia no fue como él se imaginaba, un hijo pequeño, una esposa embarazada, y lo que ganaba de abogado no le alcanzaba para cubrir los gastos de la familia.
Decidió trabajar para los duros, irse con los que están en contra de la justicia y ser su aliado, fue cómplice de muchos lavados de activos, mafia rusa, trafico de drogas, pero como estaba inmerso en ese mundo no los delataba, estaba ganando tres veces mas.
Pero como la dicha dura poco, lo descubrieron y lo metieron en la cárcel, le quitaron las propiedades que había comprado, para ese tiempo Helena se fue a vivir a casa de sus padres con tres niños pequeños, Marcos de 7 años, Joseph de 3 años y Chantal que cumplía 1 año de edad.
Nuevamente estaba en quiebra, lo había perdido todo. Quién lo saca de la cárcel es un viejo amigo, el paga una gran suma de dinero, ese amigo es Rafael Cobalti, lo ayudó a salir de la cárcel y le prestó dinero para que comenzara un negocio.
Fue ahí cuando tuvo una visión crear una Empresa donde le proveyera bienestar a mucha gente y a la vez consolidarse en el mercado como una de las mejores.
Se le fue metiendo en la sangre la ambición y el poder y poco a poco fue alejándose de su familia, casi no convivía con Helena, se iba de viaje y duraba meses por fuera, al principio era por negocios, pero después comenzó ausentarse por placer, por diversión, por aventuras.
Le fue infiel a Helena durante esos viajes. Su conciencia le reclamaba la infidelidad, no pudo aguantar más y le confiesa la verdad a su esposa.
—Helena, te he sido infiel y quiero divorciarme— le dice, dejando a Helena destrozada con sus tres hijos a cargo.
Benjamín aportaba económicamente, pero estaba ausente afectivamente, esos chicos crecieron sin un padre al lado, el más afectado fue Joseph que tan sólo tenía 8 años cuando sus padres se divorciaron, de ahí fue adquiriendo una personalidad rebelde y un resentimiento hacia su padre.
Luego del divorcio, Benjamín se volvió arrogante, orgulloso, egocéntrico. Salía con mujeres de buena posición siendo de interés para las noticias del diario.
El magnate divorciado lo vieron de paseo en la isla de las Bermudas con una joven y hermosa rubia. Todas esas noticias era un puñal para Helena, ella siempre lo ha amado, y juró quedarse sola, si él no regresaba a su vida.
Cuando Benjamín intenta reconciliarse con Helena, él se encontraba de vacaciones en la costa de México, hablaron por teléfono, él le dijo que ya no andaba con ninguna mujer, que estaba arrepentido, que lo perdonará, que ella era la única mujer que él había amado y siempre amaría. Helena escuchaba sus palabras, su llanto, ella también se quebrantó y decidió perdonarlo.
—¡Cariño, te perdono! regresa a mi nuevamente. — le dice Helena, sollozando, con el corazón palpitando de amor por Benjamín.
Las Decisiones mal tomadas, traen su consecuencia y Benjamín lo vivió en carne propia. Una tos lo despierta a medianoche, piensa que es un resfrío y acude al médico para tratamiento.
La mala noticia llega cuando le diagnostican el VIH (virus de la inmunodeficiencia humana) una enfermedad inmune que es trasmitida por relaciones sexuales, contacto con fluidos corporales contaminados y el uso de agujas y jeringas compartidas.
A Benjamín se le viene el mundo encima, su futuro de tener una vida junto a su familia se esfumó de su mente, se debilito, se echó a morir, no fue más por tratamiento y simplemente moría lentamente y se alimentaba de resentimiento hacia las mujeres, que fueron la causa de su desgracia.
Esa noche conoció a una chiquilla de 14 años, es como si le hubiese regresado la vida, lo que no pudo hacer con sus hijos, lo hizo con Allison, le dio estudios, la vio crecer, vivieron juntos, compartieron alegrías, tristezas, dolor.
Sin embargo, lucho y lucho hasta que la enfermedad lo venció, pero estaba aliviado, sentía paz en su corazón y también había conseguido la reconciliación con su familia.
El matrimonio que hizo entre Joseph y Allison fue para ayudar a su hijo.
En cierta forma Joseph se parecía mucho a él.
Si Allison salvó a Benjamín de cometer muchas locuras, también salvaría a Joseph de su resentido corazón y lo haría una mejor persona. Benjamín los unió en matrimonio para que su hijo se detuviera de querer conquistar al mundo y solo se dedicara a conquistar el corazón de una mujer, esa que le enseñó a amar sin interés.
¡Qué Historia más conmovedora!
Quise sacar este extra, porque también había que conocer a ese personaje que hizo posible que Joseph y Allison se reunieran.