Dejé de hablarle a Hoa en mi mente cuando noté que el auto se detuvo y Octavio se bajó a cumplir con la rutina de seguridad, me sentía abatido, lo que nunca me hubiera imaginado es que Hoa me dejaría para darle una oportunidad a Fionna, solo por la felicidad de mis hijos.
Es una mujer excepcional, pero esta vez se equivocó, me duele que haya pensado que no me había divorciado de Fionna por esperar su regreso, nunca fue así, solo que pasó el tiempo porque ya no me ocupaba de ella, simplemente la saqué de mi mente y ahora estoy pagando caro ese error, de haberme divorciado enseguida que se fue, hoy no estuviera pasando por esto.
Al llegar a la oficina, llamé a Lucio y apenas lo vi entrar, traté de organizar mis ideas para poder explicarle lo sucedido. Sin lograrlo mucho, comencé así:
–Hola socio, necesitamos a tu amiga Magnolia, porque Hoa se fue, no sé a dónde específicamente, simplemente tomó un autobús a Montana y se largó para darme espacio de recuperar mi matrimonio con Fionna.
–¿Qué?, ¿se volvió loca?, ¿de dónde coño sacó que tú quieres volver con Fionna?, ¿hiciste algo? –exclamó Lucio con su temperamento habitual.
–Cálmate por favor, tú sabes que Fionna le montó una escena hace poco, además Bastián le dijo que extrañaba a su madre y hoy yo fui con los niños a una fallida reunión de conciliación en el tribunal de familia. Para colmo, como no me había divorciado antes, Hoa pensó que yo tenía esperanzas de que Fionna regresara a mí. Todo eso más sus propias ideas, la llevaron a dejarme, me escribió una carta despidiéndose de mí para que vuelva con Fionna.
–Por otro lado –intervino Octavio–, durante la reunión en el tribunal, Fionna se alteró mucho con la mención de una familia Carbone y Gaspar recibió dos mensajes de un número desconocido que lo ayudaron mucho durante la reunión, así que esas dos cosas hay que averiguarlas también, una es la relación de Fionna con los Carbone y la otra es, ¿quién le escribió a Gaspar?
Lucio no preguntó más nada, tomó su teléfono y le dijo a Magnolia:
–Hermana te necesito en la oficina de Gaspar, lo más pronto posible.
Cerró esa llamada, marcó otro número y al recibir respuesta saludó y preguntó:
–Hola de nuevo mi vida, ¿podrías decirme a quién tiene Hoa en Montana? –le preguntó a Dafne.
–Hola tesoro, a nadie, ¿por qué?
–Aparentemente tomó un autobús con ese destino y Gaspar quiere saber dónde está realmente, ya que solo dejó una carta despidiéndose de él.
–¡No puede ser!, trataré de comunicarme con ella y te aviso cualquier cosa.
–Gracias mi amor, nos hablamos pronto, cuídate para mí.
Lucio cerró la llamada sonriente y seguidamente marcó otro número, cuando le contestaron volvió a dar instrucciones:
–Hola bro, Hoa Thi Smith tomó un autobús hacia Montana, quiero saber exactamente adónde fue, es muy importante y urgente tu gestión.
Nuevamente cerró la llamada y esta vez, pulsó una sola tecla en su teléfono:
–Epa, requiero una conexión familia Carbone con Fionna Jones, para ayer.
Al terminar metió su teléfono en el bolsillo interno del saco y cuando levantó su vista se encontró con mis ojos y los de Octavio, ya que habíamos seguido cada detalle de sus llamadas, mi jefe de seguridad fue quien habló primero:
–¡Carajo Lucio!, pareces un integrante de la CIA o algún puto agente encubierto, hasta podría asegurar que eres espía. Solo das ordenes, no nombras a tus contactos, ¿por qué eres tan misterioso? –Octavio giró hacia mí para decirme– Gaspar, ¿tú alguna vez has sabido qué se trae este?, nos tiene engañados con sus bromas y su carita de inocente, pero yo ahora podría asegurar que es un miembro de algún grupo extremista –expuso Octavio señalándolo con el dedo.
–No soy misterioso y deja de ver tantas series en Netflix, te tienen el cerebro frito con teorías conspirativas. Tengo contactos y muy buenos, eso siempre lo han sabido ustedes, todo se debe a mis tíos y abuelo, hasta ahí llegó la información niños curiosos. En cuanto Manu esté aquí, averiguaremos lo de tu ayudante anónimo, lo demás ya está en marcha según se enteraron por estar vigilándome mientras hablaba por teléfono.
[Gaspar se sumergió en su computadora, leyendo correos; contestaba algunos, posponía otros y el resto lo delegaba a diferentes personas para su debida atención.
Lucio estaba concentrado en su teléfono y Octavio caminaba inquieto por toda la oficina, se detenía frente al amplio ventanal unos minutos y retomaba su caminar. Gaspar decidió ignorarlo y Lucio lo miraba de soslayo de vez en cuando y sonreía.]
***
[Hoa subió al autobús y a medida que este avanzaba su pecho se iba comprimiendo más hasta que unas lágrimas liberadoras de su tristeza comenzaron a brotar de sus lindos ojos, no pensaba en algo determinado, aunque por un momento se imaginó a Gaspar corriendo por la estación y alcanzando el autobús para pedirle que se bajara porque la amaba mucho.]
“No volveré a ver una película romántica en mi vida, me hacen imaginarme escenarios imposibles. Gaspar no vendrá porque es sensato y correcto, él siempre hará lo mejor para los niños y eso es, volver con su madre.”
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Editado: 22.05.2024