cap3

Ese fin de semana debían regresar a sus casas por las Pascuas, un idea que no hacía muy feliz a Guadalupe. Tener que ver a su madre después de la última tormenta entre las dos no era un gran incentivo para ella. Un llamado de última hora la alivio su madre viajaba por negocios, ella sabía que no era verdad algún nuevo novio seguramente, por lo cual Guadalupe debería quedarse en el colegio. Intervino don Alfonso Aragón padre de Tina consiguiendo el permiso para que Guadalupe  pasara con ellos Pascuas en su casa. Tina entró a la habitación como una tormenta de verano. _Prepara tus maletas niña que nos vamos, a la cabaña del río a pasar unas “divertidísimas” pascuas con…mis padres-dijo tirándose en la cama con los brazos abiertos. _Yo debo quedarme… _Que no, que mi padre habló con tu benemérita madre y no sé porque milagro del cielo la estimada señora Elena dijo “yes”. _¿De verdad? …sí-grito emocionada Guadalupe. No hubo demasiados preparativos, salieron con sus mochilas y lo primero que hicieron antes de despedirse de la hermanita Aurelia fue pasar por sus móviles a la preceptoría. _Espero que no se manden macanas, acuérdense que estamos muy cerca del festival de las tres lunas y cuento con ustedes. Tina abrazó a la monjita. _No puedo prometerte algo que sé que no voy a cumplir… _Tina…-dijo resignada moviendo su cabeza la hermana Aurelia_ Vayan y que dios ampare a tus padres, nos vemos Guada a ti tampoco puedo pedirte que te portes bien… _Guada sonrió y negó con su cabeza. _Pero sabe que nos portamos mal pero actuamos bien…con libertad… La hermana Aurelia le sonrió…ella le había enseñado esa frase. _Las abrazó nuevamente a las dos dándole un huevo de pascua hecho por ella misma. _Las quiero disfrútenlo…el domingo-Dijo mirando a Tina que ya intentó abrirlo. El bocinazo del auto del padre de Tina las apresuró a las dos, corrieron tirándole besos y saludos de despedidas a la hermana Aurelia y a las compañeras. _Ala, ala niñas que estamos retrasados las apuró don Alfonso…hola princesa-dijo dando un abrazo y beso a su hija-cómo estás tú bonita_ saludó a Guadalupe. _Bien pa anda vamos que ya estoy que me muero de hambre. _Pues alégrate princesa la abuela Asunción está en casa. _De verás pa que bueno…_Dijo Tina llenando sus ojos de felicidad-Ahora amiga conocerás a un personaje sin igual. Y sin dudas lo era…La abuela la esperaba con los brazos abiertos llenando de besos a Tina. Cuando se dieron un respiro comenzaron a cantar una canción que hablaba del sol, la luna las estrellas y un bello corazón. Guadalupe las miró con un nudo en la garganta, ella jamás había sentido es calor de familia y muchos menos de una abuela que la abrazara al llegar, muchos menos su madre…no entendía ese frio entre ellas…o tal vez lo entendía demasiado bien…cada vez que le decía “eres igual a tu padre”, ese padre que según su madre había acabado con su vida, la había destruido y lo único que le había dejado era una hija igualita a él y demasiado rebelde. La abuela Asunción se llegó junto con Tina hasta ella. Sin medir distancia ni palabra la envolvió en sus brazos y el aroma a la colonia jazmines que Tina tanto le hablara que era el aroma más dulce que emanaba de su abuela, una colonia que ella misma hacía. Guadalupe no podía respirar apretada a su pecho pero como era bueno eso, como era tan sencillo hacer sentir bien a alguien con un simple pero el mejor abrazo de todos. _Era aún más hermosa de lo que mi nieta describió…Guadalupe quería tanto conocerte. _Y yo a usted señora. La abuela asunción se llevó la mano a la boca. _ ¿Señora?, no pequeña para ti abuela Asunción yo hoy acabo de adoptarte como mi nieta.-El abrazó y el aroma a Jazmines nuevamente. Sin dudas fue uno de los fines de semanas más lindos para Guadalupe, vivir esa sensación de familia, los padres de Tina eran gente sencilla y amorosos, tenía un hermano menor Pakito de 8 años que era fanático de los súper héroes y cada día se vestía de uno diferente. El domingo de día de campo de Pascuas en la comunidad se realizó una gran fiesta con feria y comida al aire libre, música, baile un día dónde Guadalupe recordó lo que era ser feliz. Pakito ese día venia vestido de Superman por lo que había que seguirlo por toda la feria a la velocidad de sus súper poderes y sus ocho años que se frenaron frente al puesto de salchichas. _Ya basta Superman que te comiste cuatro súper panchos tío que la panza no te va dejar volar- Pakito se subió sobre un tronco y adopto la pose de vuelo de Superman. _ ¿Quieres ver que puedo volar y más?...además si no me compras le digo a papá el día que le sacaste el auto. Tina lo bajo de un brazo. __Ves es un enano subversivo dichosa de ti que no tienes hermanos…_Guadalupe sonrió pero se denotó tristeza en su mirada. _Perdón amiga soy una bruta…-se percató Tina. _Bruta es poco-acotó Pakito engullendo el quinto pancho _Guau la super rueda…-dijo corriendo hacia uno de los juegos. _ ¡Pakito! Me cacho en die contigo niño que te cargaron con las mejores pilas mi santa madre _ ¡Quiero subir!-dijo en un grito Pakito _No!_ respondió con mayor fuerza Tina _Ahí está papá le gustará saber de tu aventura con su auto… _Tres boletos_ dijo entre dientes Tina ante la risa de Guadalupe. Estaban en la fila y el encargado midió a Pakito _Sólo puede subir con alguien mayor. _Listo no podemos vamos_ Se alegró Tina Pakito cruzó sus brazos y se sentó en el suelo. Tina sabía que eso era el acabose. _Sube con él yo iré en otro_ Propuso Guadalupe, rezongando bastante tina empujo su hermano hasta la rueda gigante Guadalupe la siguió, sentándose en la bambolera de atrás, antes de que esta se diera cuenta alguien se sentó junto a ella. _Hola Pollito…-Esa voz Guadalupe cerró sus ojos y meneo su cabeza. Ringo Dark estaba junto a ella y no podía escapar estaba girando a 20 metros de altura. _Eres de no creer-dijo casi en susurro Guadalupe. _Pues sí lo soy…y vos sos muy difícil de olvidar…_Guadalupe lo miró sorprendida._ Olvidar todo lo que me hiciste y que pienso cobrármelas _A sí pues no es de hombres amenazar mujeres… _Yo no te amenazo, te aviso y eso de que eres una mujer…da un poquito de gracia eres apenas una niña malcriada. Los ojos de Guadalupe comenzaron a echar chispas. _Puede ser, puede ser que se una niña pero vos sos un agrandado ridículo que se cree el rockero de las pampas con esa campera vieja de cuero y el pelo largo aaaaa y el arito claro. Y el pelo sucio me olvide decir… Ringo coloco sus piernas hacia el contado de la bambolera y Guadalupe se sobresaltó. _Estás loco mete las patas adentro que nos vas hacer matar. _No lo hare, soy un rockero sucio puedo hacer lo que quiero, no me importa nada… _Comenzaré a gritar… _Hazlo, que te lo impide._ La desafió _Eres un idiota _ Y vos una niña boba _ Creído. Ringo metió sus piernas dentro y la miró fijamente. _¿Qué?-dijo molesta Guadalupe. _Hagamos algo Pollito…te desafío, ahora hay un concurso de canto, ¿te animas? Si pierdo te pido perdón de rodillas y no molesto más, si ganó sales una tarde conmigo… _Estás loco… _Cobarde… _Idiota…. _Miedosa… _Guadalupe!!!-escucho la voz de Tina que la llamaba desde abajo. Niña que ya diste tres vueltas de más. No podía creerlo con tanta locura no se había dado cuenta cuando se había detenido la Noria. _Así que Lupita…-bromeo Ringo. _No me digas así, soy Guadalupe…- se enfadó ella _Para mi eres Lupita la malcriada… La rueda gigante se detuvo y ella se bajó rápidamente seguida por Ringo. _A pero si tenemos al hombre de las mil apariciones, ¿nos estás siguiendo chaval? _ Hey ringo ¿cómo estás?-las sorprendió Pakito corriendo hasta el muchacho y chocando puños. Las muchachas se miraron sin entender. _ Colaboró con las horas de música en la escuela de Pakito…es muy buen pianista… _Soy el mejor._ Aseguró el niño haciendo la pose de Superman. Los altavoces llamaban a la inscripción del concurso de karaoke y canto, el sol iba teniendo el cielo de un violáceo atardecer las farolas comenzaron a encenderse. _ ¿Y?...Dejó en suspenso Ringo mirando a Guadalupe. _Y ¿qué?-se interesó Tina. _Nada-respondió seriamente Guadalupe _MMMMMM _Nada Tina, nada vamos tu familia debe estar buscándonos. _Tienes miedo niñita…es comprensible esto no es para todos. _Era un malnacido, pensó Guadalupe acercándosele y enfrentándolo. Ringo la desafío con sus ojos de mirada única. Ella no era una niñita y no existía nadie que pudiera confrontarla…ella no era una cobarde, aunque le temblaran las piernas. Guadalupe comenzó a caminar hacia el sector del escenario, seguida por tina que arrastraba de un brazo a Pakito. _La vio acercarse a la mesa de las inscripciones y una sonrisa brotó de los labios de Tina. _Bien amiga, bien, anímate esa hermosa voz debe ser escuchada. Guadalupe tomó una guitarra que le acercaron y como jamás la había visto su amiga se sentó sobre el taburete y cerrando sus ojos comenzó con esa canción que había compuesto para su amiga. “Eres de primavera mi bruja buena de los cuentos La que me escribe con nieve de colores Los letreros de mis tristezas y sabes que soy La que conoce tus silencio, mi hermana del alma Mi amiga de tantas soledades calladas De tantas cartas perfumadas no mandadas De abrazos para sanar mis lágrimas Mi amiga mi hermana la de la risa de campana. Porque amigas desde el aire Porque amigas desde el corazón Porque amigas aunque nos asuste el dolor Porque eres mí querida amiga Mi mejor canción… La gente se fue agolpando frente al escenario atraído por la increíble voz de Guadalupe. La familia de Tina aplaudía a rabiar como todos cuando la muchacha termino su canción. Tina no daba más de la emoción. Guadalupe abrió sus ojos y no lo podía creer más aún aquella sensación de sentirse en la cima del cielo. Ringo tenía una expresión entre admiración y sorpresa esa chica tenía una voz única. _Amiga…-Dijo llorisqueando Tina abrazando a Guadalupe. _Anden vamos una foto todos, ala vamos-pidió el padre de Tina queriendo inmortalizar el momento. Tal vez por eso hasta el día de hoy atesora aquella foto como uno de los momentos más felices de su vida… Ringo tocó el hombro de Guadalupe. Se arrodillo ante ella y le pidió disculpas. _ ¿Qué haces ridículo?, levántate que pasamos vergüenza, además aún no cantaste…_Le dijo jalándolo del brazo para que se pusiera de pie, o cual era una proeza ya que ringo era de gran estatura y buen cuerpo. _No hay nada que decir, jamás podría ganarte, esa voz…esa voz es única-Lo decía entornando sus ojos, esos ojos que la asustaban y al mismo tiempo le provocaban una sensación que no conocía_ ¿Tregua?-dijo extendiéndole la mano, Guadalupe levanto su cabeza y sonrió…