Es curiosa la vida.
Hace tan solo 25 años no teníamos móvil,
no nos imaginábamos lo que era el WiFi,
lo que era internet para el móvil.
No nos imaginábamos que jugaríamos con ellos, pensábamos que el fijo lo era todo para poder comunicarte con la familia que estaba lejos.
Ahora en 2018 se supone tenemos móvil pero nos quedamos en casa enganchados al cargador,
nos da un micro infarto al no notarlo en el bolsillo.
No podemos vivir sin la tecnología.
Gracias a las redes sociales nos comunicamos con nuestra familia que puede incluso estar al otro lado del charco,
quizás no nos damos cuenta del peligro que corremos al estar metidos en ese mundo.
Nos podemos encontrar alimañas,
monstruos,
en definitiva...
Cabrones e hijos de puta.
Pero también podemos encontrar gente maravillosa incluso llegar a enamorarnos sin conocerle en persona.
¿Pero realmente nos estamos enamorando de la persona que es o solo del personaje que interpreta?
Estoy aburrida de los tíos que dicen
"te quiero"
solo para tener sexo.
Siempre he querido encontrar el amor,
casarme...
Pero a día de hoy estoy tan aburrida del
"amor"...