Solo tú me calmas

Me desperté temprano y empecé a hacer la lista de compras, ya hacía falta hacer mercado y me dispuse hacerlo, Manasés seguía dormido y no quise despertarlo, ya llevaba 2 semanas de castigo y podía empezar a darle más espacio, además está Alex en la casa por lo que no se quedará solo.

-Buenos días Alex.

-Mmm, buenos días Nat, ¿qué pasa?

-No es nada, solo quiero aprovechar que me desperté temprano para ir a comprar lo que hace falta para la casa, ¿te puedes quedar a echarle un ojo a Manasés? Por favor.

-Claro que si, y gracias por estar confiandomelo otra vez.

-No es nada, ahorita vuelvo, espero no demorarme. -Lleve lo que necesitaba hasta el auto y me dispuse a emprender camino, pero no sin antes revisar que mi agenda del trabajo estuviera vacía para poder tomarme el día-

No tenía nada agendado para hoy y parecía haber pocas citas, por lo que llamé a mi equipo y les dije que si no llegaban más emergencias podían cerrar temprano y pasar tiempo con sus familias, y que ya mañana volveríamos a la normalidad. Llegué a donde hago el mercado y empecé a buscar todo lo que necesitaba.

En casa

-Mmm, ¿mami? -Me desperté y mamá no estaba en la cama, y necesitaba encontrarla porque aunque no recuerdo muy bien que estaba soñando me hizo despertar de malas-

-Hola peque, tu mamá ya vuelve, fue a hacer las compras.

-¿Se fue sin mi?¿Porque?

-Ella no quería despertarte pequeño, además que considero que como ya has tenido 2 semanas de castigo, un poco de espacio te haría bien.

-Pero necesito a mami, quiero a mamá. -Empece a sentir lágrimas llenar mis ojos, y aunque no se identificar muy bien lo que pasa se que no quiero meterme en problemas como ayer, por lo cual me escondí bajo las cobijas, sea lo que sea que estaba soñando me puso muy sensible-

-No llores pequeño, ¿qué pasa?

-No se, pero no me siento bien, por favor déjame solo.

-Déjame revisar que no estes enfermo.

-No tengo nada, solo sal de aquí.

-Manasés, destapate un momento, solo quiero asegurarme de que no tengas fiebre.

-No te alteres, no vayas a contestar mal otra vez- Alex en serio, por favor déjame, te aseguro que no me siento enfermo, pero tampoco estoy entendiendo exactamente lo que siento y no quiero meterme en problemas.

-Ok, me voy, pero prométeme que si algo te duele me lo vas a decir.

-Te lo prometo.

-Estare abajo si necesitas algo. -El no me respondió con palabras, pero logré ver un pequeño asentimiento desde debajo de las cobijas-

Fuí a la cocina y empecé a preparar el desayuno, depronto eso pudiera ayudar, es bueno ver que aprendió algo de ayer al pedir su espacio, pero me preocupa mucho ese peque y no me gusta que me deje fuera sin saber si puedo ayudar.

Por mensaje

-Hola Nat, ¿te demoras?

-Si un poco, hace mucho no hacemos mercado y faltan muchas cosas, pero dime que paso.

-Mmm, ¿porque supones que paso algo?

-Porque dudo que me escribieras si no fuera ese el caso, más teniendo en cuenta que sabes a que vine y lo demorado que puede ser.

-Bueno si, tienes razón, a ti no se te puede ocultar nada, lo que pasa es que Manasés se despertó de malas, no se que tiene y al parecer el tampoco, pero no me deja ayudarlo.

-Se que le gusta intentar hacer las cosas solo, pero avísame cualquier cosa.

-Está bien.

Fin del mensaje

-Buaaa mami, ¿dónde estás? -Había intentado volver a dormir, y aparentemente lo había conseguido, pero tras unos pocos segundos lo que sea que este soñando y mi cabeza esté bloqueando me despertó sin poder recordar lo que es-

-Shh, ella aún se demora un poco Manasés, porque no mejor me acompañas un momento abajo y te sirvo el desayuno.

-No tengo hambre.

-Vamos Manasés, no puedes pasar la mañana sin comer, además hice tus favoritas.

-Gracias, pero en verdad no quiero.

-Manasés no te voy a dejar sin desayunar, ahora depende de ti si bajas o te lo traigo y me quedo acá hasta que termines.

-Grr, bien, bajaré.

-Voy a ir sirviendo todo, te espero.

-Si, ya voy. -Alex salió e inmediatamente tome una almohada y ahogue un grito en ella, todo lo que quiero y necesito es a mamá, pero el no deja de insistir y no se cuanto más pueda resistir sin responderle mal-

Bajé y me comí el desayuno en total silencio, en realidad estaba muy rico, pero aún así por alguna razón todo lo que quería hacer era gritar, me sentía agobiado sin saber porque exactamente.

-Terminé, ¿puedo irme ya?

-Si, pero por favor no te encierres, y no dudes en pedir ayuda si lo necesitas.

-Susurrando- Solo necesito a mamá. -Salí corriendo hacia la habitación y volví a meterme bajo las cobijas-

-Bueno ya me queda claro que si quiero ayudar solo hay una cosa que puedo hacer.

Por llamada

-Mm, Nat debes venir.

-¿Qué pasó?

-Logré que desayunara, pero estuvo en silencio todo el tiempo, está muy cerrado y evitativo, además aunque lo dijo entre susurros pude escuchar claramente que te necesita.

-Rayos estaba tan cerca de terminar e ir a pagar, pero no importa, mi hijo es primero- Voy para allá.

-Yo.. perdón, debería poder hacerme cargo.

-No te preocupes, no pasa nada, no es tu culpa.

-Nos vemos ahorita.

Fin de la llamada

Termine la llamada y me puse a lavar la loza, pero no había pasado casi nada de tiempo cuando escuché a Manasés gritar.

-AAAAAA, solo quiero dejar de sentirme así, no se que me pasa.

-¿Estas bien Manasés?

-Si, todo bien, puedes irte.

-¿Seguro?

-Que si.

-Esta bien, ya me voy.

Bajé y Nat estaba abriendo la puerta, no me dijo nada, solo me dedico una mirada como diciendo lo hiciste bien y subió para estar con su niño.