Cap 19

Otro joven había aparecido muerto en los pasillos, las muertes seguían y nadie entendía a lo que nos estábamos enfrentando. Los directivos y profesores trataban de mantenernos a salvo pero la seguridad no era la misma.

Los rumores corrían por todo el sitio como era habitual, esta vez el colegio estaba solo y no tenia la ayuda del pueblo por eso Itaro y Tavia habían optado por usar nuestras habilidades de protección.

El recuerdo de aquel sombrío lugar donde tenían escondidos y el libro con la imagen de la casa Fiimburg, estaba más que claro que eran las piedras lo que buscaban.

Brais y Eider iban a ayudarme para poder entrar de nuevo en la habitación misteriosa. Necesitaba conseguir ese mapa y llegar a las piedras mágicas.

Después de clase me dirigí nuevamente al salón del elemento tierra. Y Ezio se encontraba allí.

— ¿Qué haces? —pregunte viendo como el buscaba algo.

— Estoy buscando algo —el era un chico serio y a la vez misterioso— lo perdí después de desperdiciar mi tiempo en salvarte la vida.

Sonreí al recordarlo que él me había sacado de la cabina.

— No te agradecí por eso —dije tratando de sonar amable.

— A tu chico no le agrado que te salvara la vida —el se puso de pie y salió de allí.

Sali de allí y a lo lejos vi a Itaro y Tavia hablando. Me dirigí hacia el salón de practica donde el profesor Gaslor y la profesora Merila nos estaban esperando.

— Chico expandir su escudo no es tan fácil como muchos piensan —hablo la profesora Merila— por este ser un caso importante… tendrán el privilegio primera vez en la historia de darle un extra a sus habilidades…

Itaro y Tavia aparecieron con dos cajas de vidrio dentro de ella había unas piedras brillantes.

<< Las piedras preciosas >>

Tome la piedra de color morado y Brais tomo la azul. La pusimos en nuestros cuellos y nos tomamos de las manos.

Las piedras eran mágicas tanto se sentía como la energía era máxima en todo su esplendor.

Querían eso era magnificas tanto que su poder era admirable. La práctica había terminado y nosotros estábamos satisfechos con el resultado, pero a pesar de todo la muerte estaba allí y nadie estaba seguro a pesar de todos los intentos.

Necesitaba encontrar un momento exacto para poder buscar el mapa quería saber de qué salón se trataba el lugar donde guardaban aquellas piedras. Ahora las noches no eran tranquilas, siempre había alguien cuidando en los pasillos.

Me levanté sin hacer ningún ruido, salí y me dirigí hacia el pasillo principal. El ruido de una puerta abriéndose llamo mi atención de repente el profesor Seth paso corriendo y logre esconderme detrás de un muro.

Seguí los pasos del profesor y a lo lejos pude ver como el cruzaba el campo magnético directo hacia el bosque.