POV Ángeles
Me siento aliviada, por fin pude liberarme, ahora solo tengo que largarme de aquí, busco mi maleta y meto toda mi ropa, en otra maleta meto mis zapatos y joyas, agarro un documento que estaba guardando hace días para esta ocasión, abro el sobre y firmo en la parte que me corresponde, lo dejo encima de la cama y saco mi teléfono.
-Ya estoy lista.
-¿Tan rápido?
-Ven por mí, no te pago para que me cuestiones.
-ok, estoy cerca.
Cuelgo la llamada y marco a otra persona.
-Cielito, acabamos de separarnos y ya me extrañas— se ríe.
-Solo quiero decirte que ya me divorcie, acabe con esta farsa.
-¿Que dices? ¿Estás loca?
-Si estoy loca, loca por vivir mi vida, por ser libre.
-No estás hablando enserio, sabes que para el divorcio debe haber un proceso largo.
-No me interesa, ya entregue el documento con mi firma.
-Acabas de arruinar nuestras vidas lo sabes ¿Verdad?
-No, acabo de arruinar tu dinerito extra amor.
-No te burles de mi cielito porque me encontraras.
-Y tú a mí no, esto es una despedida, no volverás a verme nunca más y aunque te amé como loca, en estos momentos solo quiero ser libre y vivir mi vida.
-!Ángel¡...
Le cuelgo y salgo con mis maletas, me despido de todo con un suspiro, ayer supe que la enfermedad que estaba inventando se hizo realidad y solo pensé en mi tiempo perdido, ¿En qué momento deje de amarme? ¿En qué momento deje de ser yo misma para convertirme en el trapo de los demás? Pues desde ahora mi prioridad es vivir mi vida, amarme a mí misma y morir siendo libre.
-Señora— levanto mi rostro lleno de lágrimas y veo a Alida con mi hijo en brazos, ese pequeño que no tiene la culpa de nacer de un monstruo como yo.
-Ali, cuida de mi pequeño por favor, no lo dejes solo y enamora a ese imbécil, ellos no se merecen que este a su lado— ella me lo acerca para que lo agarre, lo dudo pero termino abrazándolo y llorando más fuerte.
-Puede quedarse señora y mejorar las cosas, ellos la aman de verdad, déjese querer— niego.
-Ya lo hice, lo intente, pero me siento atrapada en una jaula en donde no quiero estar, ¿te confieso algo?, me caes mal, me desagradas, eres la típica mujer que lucharía por amor, para que ambos sean felices, pero yo no soy así— ella me mira con tristeza.
-No he tenido una vida fácil, mi ex pareja casi me mata y estuve en rehabilitación por un año completo, él está en la cárcel y yo destruida, no puedo formar una familia, es por ello que no seré feliz con nadie, ni quiero apoderarme de una familia que no es mía— ella también llora y yo le entrego al niño.
-Has lo que quieras, de aquí en adelante yo solo les daré preocupaciones y dolor— me rio sarcástica— la enfermedad que invente, se hizo realidad, pero más grave de lo que presentía, no hay vuelta atrás, quiero morir siendo libre.
-No te vayas mi amor, quédate conmigo, con tu hijo, nosotros te apoyaremos y ayudaremos hasta el último día de tu vida llenándote de amor— ese hombre me tienta pero sé que no cambiaría nada.
-Eres demasiado empalagoso, me repugna tu manera de ser.
-¿Por qué no entiendes que te amo?
-Porque yo no te amo, quiero ser libre, y si me amas como dices debes dejarme ir-- suspira resignado y asiente.
-Adiós, mi amor— al escuchar eso se instala un dolor fuerte en mi pecho y salgo corriendo con mis maletas. "Hasta nunca Eddie, gracias por amarme" pienso.
POV Verónica
No puedo creer el dolor que le ha causado esa mujer a mi hijo pero estaré aquí para apoyarlo y darle consuelo. Veo cómo sale corriendo de la casa, se sube a un carro y el hombre dentro sale y mete sus maletas en el maletero, sé que está llorando, que esto le duele también, pero es tan materialista que ha olvidado amarse a sí misma, me hace recordar a una vieja amiga que cometió el mismo error que ella y murió sin enmendarlo, no le deseo el mismo mal, al contrario deseo que ella pueda darse cuenta de todo lo que ha logrado y cosechado para que pueda mejorarlo.