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-Como te encuentras?

-Muy bien, gracias, perdón por molestarte- estaba muy apenada, tenia mucha vergüenza.

-hey que dices, no me molestastes; estoy feliz de haberte ayudado- me regalo una sonrisa tan hermosa que me hizo imaginar como seria ser mas que amigos. Pero rápidamente lo borre de mi mente al recordar mi maldito destino y que yo para el no soy mas que una amiga.

-Sos muy bueno, gracias- necesitó tanto un abrazo y no tengo a quien pedírselo, por un momento me vi tentada de pedírselo pero su celular sonó y el se levanto de la cama.

-Disculpame, ya vuelvo- se disculpo y salio de la habitación, era momento de marcharme así que salí del departamento.

-Belén!!- al escucharlo me gire,y lo vi parado en la puerta del departamento a menos de un metro de distancia de mi.
Al verlo a los ojos, el camino hasta mi.

-Quizás no debo, quizás lo arruine, pero no voy a quedarme con las ganas otra vez- después de esas palabras tomo mi rostro con sus manos y me beso apasionadamente, por instinto intente alejarlo; pero después respondí el beso. Me atreví a subir mis manos hasta su nuca y acercarlo mas a mi, Teo bajo la intensidad y sus manos que se posicionaron en mis caderas, ya no era un beso salvaje pero aun mantenía una sensación de lujuria de pasión. Pero el momento llegó a su fin, y tuvimos que separarnos.

-Creí que me golpearias- dijo con una sonrisa tímida, y yo no supe que responderle, baje la mirada y el acaricio mi rostro con su mano- después de ese beso que nos dimos no puedes ponerte timida.

-Creó que no debió pasar- susurré con pena.

-Bromeas, ambos lo queríamos.

-Debo irme- intente marcharme pero Teo me sujeto del brazo.

-Porque lo niegas?

-Debo irme- me solté y corrí hasta que mi cuerpo aun dolorido pudo.

Eran las siete de la tarde aun faltaba para llegara a casa y no sabia donde ir, así que camine hasta la plaza que esta cerca de la panadería. Hay sentada intente encontrar una respuesta de lo que había sucedido con Teo, pero no llegue a nada; nunca imagine que el pudiera sentir algo por mi siempre pensé que solo quería ser mi amigo, pero ahora ya no entendía nada. Además tampoco puede haber nada entre nosotros existen mucho problemas en el medio que me impiden tener cualquier relación sentimental con alguien.

Cuando llegue a casa ordene todo el desorden que había y subí a dormir, aun el cuerpo me ardía pero no tenia nada que me hiciera relajar así que como pasaba siempre que me golpeaba, me la aguante hasta dormirme.

Pasaron tres días desde el beso con Teo, luego de ese día no volví a su departamento, creo que ya nó tiene sentido que nos sigamos viendo. Hoy doña Lorenza abrirá la panadería y debo volver a trabajar. Estoy segura que me tocara hablar con Teo y me tocara decirle mi decisión de ya no vernos mas.