El despertador lleva sonando hace más de 26 minutos y no, no pienso levantarme que se jodan todos...que se joda todo el puto mundo.
Querrán saber por que puse el despertador a las 5 am ¿no?.
Todo empezó cuándo presenté mi exámen de admisión en la Universidad, pretendo estudiar medicina.
Bueno bueno, les doy un resumen necesito encontrar trabajo para pagar la Universidad.
No tengo demasiado dinero con las carreras ya que cada vez que gano simplemente hago fiestas jodidamente grandes y despilfarro mi dinero y no me sobran para pagar la Uni.
Edward Kennedy es cómo mi padre,me había conseguido una entrevista de trabajo en una de las mejores Empresas de Londres y la cita era para las 8 am pero puse la alarma a las 5 am por que me tendría que arreglar.
¿Cómo conocí a Edward?
Lo conocí en la cafetería a la que siempre voy todas las mañanas antes de ir a mis clases de Boxeo.
Una mañana 3 hombres entraron a la cafetería a robar e intentaron violarme, Edward se arriesgó para salvarme yo apenas empezaba con las clases de boxeo asi que no podía defenderme demasiado.
El golpeó a los hombres y me sacó del lugar en su auto.
Desde ese día mantenemos un lazo de Padre e Hija.
No conozco mucho de su pasado pero no me gusta meterme en su vida ni incomodarlo con mis preguntas.
El no sabe que desde hace 3 años que estoy en las carreras clandestinas ya que si lo supiera se caería al piso por lo sobre protector que es y le daría un ataque cardíaco.
Soy la chica más preciada en el mundo de las carreras ya que a Jack (Jefe del lugar) le conviene bastante que gane cada una de las carreras.
Pero dejando ese tema de lado,tengo que prepararme para mi entrevista.
Me levanté de la cama y fui rápido al baño metiendome debajo de la regadera, poniendo la pasta dental en el cepillo de dientes y metiendomelo a la boca para no desperdiciar ningún segundo.
Salí del baño luego de 20 min enrrollada con una toalla lila por el cuerpo y mi cabello mojado suelto dejando que se seque con el calor del ambiente.
Busqué en mi armario una blusa color negro, una falda también del mismo color y una chaqueta de color gris.
Me vestí con toda la tranquilidad del mundo ya que faltaban todavía 2 horas para mi entrevista, me puse unos tacones color negro que combinaban con mi falda y mi blusa.
Me seque el cabello y lo peine alzandolo y haciendome un rodete.
Solo me puse un poco de sombra en los ojos y brillo labial para no llamar mucho la atención ya que era lo menos que quería.
Pasaron 1 hora y 10 min y agarré mi pequeño bolso y mis papeles para mostrarselos a mi futuro jefe.
Podría ser una chica rebelde pero también responsable, de día soy una pero de noche soy otra ¿cómo lo decía Fiona?.
Caminé hacía la puerta y baje por las escaleras ya que el elevador no funcionaba y estaba en reparaciones.
Tardé 10 min ya que yo estaba hasta el séptimo piso, por suerte al salir del edificio y vi un taxi le di la dirección y solo tardamos 30 min en llegar y llegué 10 min antes.
Me presenté en recepción y me dijo que subiera hasta el último piso y buscara la última oficina.
Toqué la puerta y una voz grabe me invitó a pasar, tomé aquella invitación y entré con cuidado.
-Bienvenida Señorita Aniston-.Se levantó aquel hombre con cuerpo de infarto y me extendió su mano-Soy James Parker, un gusto en conocerla-Era un hombre de aproximadamente 35 años sus ojos eran azules convinados con un color verdoso y sus labios eran rojos pero un poco finos, tenía barba pero le quedaba exagerdamente bien,ese pelinegro era el sueño de toda mujer pero no de una mujer como yo-.
-El gusto es mío-Sonreí tímidamente-Mi nombre es Chloe Aniston.
-Siéntese-lo demandó con amabilidad y obedecí-Edward me habló mucho de usted y me dijo que era bastante inteligente.
-Eso creo-Sonreí falsamente-se distintos idiomas-le pasé los papeles que tenía en mis manos y los comenzó a revisar y a asentir-
Pasaron unos minutos, me hizo algunas pruebas y vio por completo mi currículum.
-Tiene el trabajo-me sonrió-desde mañana será mi asistente, debes venir en el mismo horario-asentí con una sonrisa calurosa-.
Salí felíz de aquel lugar, fui a la cafetería de siempre ya que no había desayunado, Lucy, la mesera de aquél lugar me trajo mi café con una rebanada de pastel de chocolate y le agradecí.
-Mi pequeña, me e enterado que ya tienes trabajo-Escuché aquella voz detras de mi y vi a Edward sonriendo emocionado-Felicidades mi niña-me dejó caer un beso en la frente-.
-Hola Ed, si he conseguido trabajo y gracias a ti ya que haz hablado demasiado bien de mi-Sonreí-.
-Eso es mentira yo solo dije la verdad-llamó a Lucy y le pidió un café-dime mi pequeña ¿Cuándo empezaras?-me miró con ternura, estaba muy orgulloso-.
-Mañana-sonreí-Ya es tarde para que te vayas a trabajar, Ed-me miró seriamente-.
-¿Ya no quieres a tu padre?-Fingió llorar pero yo reí, era demasiado inmaduro para su edad-bueno en realidad si tengo que ir a trabajar-agarró su café y me plantó otro beso en la frente-te veo luego mi pequeña-diciendo eso se alejó y yo sólo le dije "Adiós"-.
Pasaron unas horas y fui a mis clases de boxeo que desde mañana ya tendría que cambiar de horario.
Estaba bastante sudada y Ian solo me miraba sonriente cuándo lo había dejado como puré en el piso.
-Te haces cada vez más fuerte-Dijo riendo en el suelo-ya me empiezas a dar miedo-Reí en lo bajo y lo ayude a levantarse-.
-Eres demasiado débil Ian-empecé a reír-.
Había conocido a Ian en las clases de boxeo era un buen amigo y me ayudaba con mis entrenamientos diarios.
Fui a casa adolorida, exhausta y con hambre.
Puse una pelicula llamada "Siempre a tu lado" esa noche me la pasé llorando por aquel final triste.
Me quedé comiendo galletas hasta la 1 am y luego fui a dormir.
A las 5 am sonó mi despertador y fui a mi trabajo.
Salí a las 3 pm y fui a una pizzería.