Mis queridas Estelas

Martes, 23 de Febrero, 04:41 pm

    Cuando tenía 15 me volvieron a cambiar de escuela. En todo mi trayecto, hasta ahora, fui a tres escuelas diferentes: 


   La primera fue una pública y fui desde jardín hasta 4to de primaria, conociendo a Ariana mi primera mejor amiga. 


   La segunda escuela, fue una privada un tanto particular, donde, ya seas chico o chica, el uniforme era el mismo: con pantalón y chomba; a esta misma fui desde 5to de primaria hasta 3ro de secundaria, y conocí a una de mis amigas mas importantes (básicamente, una de mis dos mejores amigas) mi querida y adorable Celeste. Sin olvidarme de Paulina, una gran amiga mía. Paulina y yo todavia nos envíanos memes por las redes, pero nuestra amistad no va mas allá de eso. 


   Después, y por último, me volví a cambiar a otra escuela privada, de 4to a 6to de secundaria, en esta escuela fue la primera vez que sufrí con el uniforme para chicas, mis piernas nunca paraban de temblar debido al frío...¡dios mio! No quiero ni recordar los días de invierno.


   Esta última descoloco a mi yo inocente. Ese mismo año, que me cambie, a la edad de 15 años, tuve mi primer beso cuando fui a mi primera fiesta. Si, realmente no fue algo fantasioso e ideal, como, no sé, una situación imaginada: estando con un chico de rostro perfecto en un lugar apartado y oscuro, ambos sentados en un silencioso banco y lentamente uniendo nuestros labios, mientras se escucha el palpitar acelerado de nuestros corazones, como un fondo melódico que impregna nuestro ambiente. Finalmente un beso para fundir nuestra relación y, como si de cenicienta se tratará, yo salí corriendo dejando caer la lata de cerveza. ¡JA! ¡JA! ¡JA! ¡Demasiado cursi para mi gusto!. Encima la lata de cerveza le da su esencia a esa situación, te saca completamente de la burbuja...bueno, no sé a vos, pero a mí sí que lo hace, porque me recuerda a mi verdadero primer beso.


   El chico estaba completamente borracho y yo estaba saliendo del baño, después de acompañar a una compañera que quería "quebrar" (basicamente, tomó tanto que vomitó), al salir del baño, el pibe me agarro del brazo y me encerró contra la pared (kabedon) para decirme borracho, y obviamente arrastrando las palabras:


   "Eres..., sos...muyyy linnndaaa..."


   Exactamente, un aliento a cerveza tenía el chico y me lo dejo notar de una manera incleible. Pero bueno, después de eso, me encajo el beso en toda la jeta (cara) y me embarró desde la nariz hasta la pera con saliva. Básicamente, un beso de sapo (según lo que leí). Realmente, no tengo un precioso recuerdo, pero bueno, tampoco estuvo tan mal. Yo, por otra parte, quede re sonrojada después de eso, porque imagínate ¡era mi primer beso! Y encima, después de eso, tuve mi segundo beso con otro chico que ¡también se me tiró encima!. Igual, fue más bien porque estaba borracho y perdió el equilibrio (pero quedaba mejor de la primera forma en la que lo escribí, de todas formas, no estoy mintiendo ¿no?), pero como yo pasaba por ahí, lo atrape justo para que no se caiga, pero el chico habrá pensado:


   "Ya fue, está bonita"


   Y me encajo un beso ¡Ja! Ese pibe iba regalando sus labios. Justo antes estaba con una piba que (después me contó) aprovechó que estaba borracho y se descargó todas las ganas, acumuladas, que tenía de besarlo. En fin, cosas de adolescentes. Aunque, tengo que agradecer, que lo único bueno que me pasó esa noche, es que nadie, absolutamente nadie, vio el segundo beso, fue solamente esa chica, Josefina, que lo había estado besando antes, pero con un charla por allá y una conversacion por ahí, la piba me prometió no decir nada...¡Y menos mal que fue así! Si pase un infierno, durante meses, por el primer chico que besé...¡No me hubiera imaginado si todos se hubieran enterado del segundo!. Pero bueno, lo único que puedo decir es que, al pasar semanas, hubo, de aquel segundo beso, simples rumores.


   Una vez, recuerdo que alguien se me acerco a preguntarme, pero como no habia evidencia de nada, yo simplemente negue todo. (¡Aprecio que el pibe estaba en tremenda borrachera! Creo que nunca se acordó de eso).


   En fin, hoy quería contar de esa primera experiencia, no fue la mas agradable, claro que no, pero fue un suceso que en definitiva me marco.


   Ah, el romance adolescente. Cómo olvidarlo a Juan que se enamoró de mi fachada externa y fue un testigo ocular de mi primer beso (cuando lo vi, se estaba yendo corriendo, creo que incluso lloró el pobre). Lo único que decía cada vez que se tocaba ese tema, era lo siguiente:


   "Fue casi como si te estuvieran obligando"


   No sé si fue por resentido pero, incluso así, le acertó. Porque yo sí me sentí media obligada por la forma en que el chico me encerró.


   Pero en fin, Juan, tú no eres ningún inocente, yo sé que fue en gran parte tú culpa aquel infierno durante mi primer año en esa escuela. También recuerdo lo mucho que me presionaste para que sea solamente tuya. La verdad, es que aprecio enormemente no haberte conocido antes, y no tener que volver a verte. Ay Juan querido, lo tuyo se transformó, poco a poco, en obsesión.



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En el texto hay: familia, recuerdos, preparatoria

Editado: 04.03.2021

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