Moisés y Ramsés

Meses después

Moisés ya se empezaba a acostumbrar al palacio y a su nueva vida, Ramsés estaba ayudándole mucho en ese aspecto, y eso le gustaba bastante

Un día jugando en el río Nilo, vieron a un niño solo y sucio, Moisés quiso acercarse a hablarle pero Ramsés lo detuvo

- No Moisés, el es hebreo, nosotros no nos acercamos a ellos, vamos a jugar a otro lado - Moisés Asintió, pero el niño los había visto y había reconocido a Moisés

- Moisés!!!! Soy yo, Aaron!!

- Silencio esclavo!! No te voy a permitir que te dirijas así a mi sobrino Moisés! El es tu soberano, y aunque no sea el futuro faraón, será alguien importante en la corte, así que alejate esclavo - Moisés miraba la escena sin saber que hacer

- Pero, el es mi hermano, Moisés, yo sé que eras pequeño, pero tienes que saber quién soy - Decía triste Aaron, en ese momento apareció una criada de la princesa para buscar a los príncipes

- Altezas - Hace una reverencia - La princesa los busca majestades - Ramsés asiente

- Vamonos Moisés, no perdamos tiempo, Henutmire nos busca - Moisés sigue a Ramsés y la mujer se queda un momento mirando la cara de Aarón que está triste

- Aaron, no debes acercarte así a los príncipes

- El olvidó quien soy, y no ha pasado mucho tiempo

- El es el príncipe, y se debe acostumbrar a la idea, vete a casa Aaron - El niño lo hace algo triste

En palacio

- Dónde estaban? Me tenían preocupada, ya iba a alertar a mi padre para que los buscara

- Perdón hermana, nos quedamos en el río jugando

- A la próxima no se alejen mucho, Ramsés sabes que debes cuidar a Moisés, el lleva en palacio menos tiempo que tú ¿Por qué sus ropas están manchadas de barro?

- Nos encontramos un hebreo que decía conocerme, pero yo no le reconocí - Cuando Moisés pronunció esas palabras, ella sabía a quién se refería y no le gustó nada la idea, su Moisés ya se estaba acostumbrando a ser príncipe y nadie le iba a quitar eso

- Vayan y díganle a sus criadas que los cambien y les busquen ropa elegante, hoy tenemos cena con el faraón

- Papá cenará con nosotros? - Dijo Ramsés ilusionado

- Así es Ramsés - Este, más feliz que antes, arrastró a Moisés a la habitación

- Vamos, tenemos que cambiarnos, corre - La princesa rio al ver a su hermano tan emocionado por algo así

Cenar con el faraón fue maravilloso, Moisés no se imaginaba lo maravilloso que era hasta que lo experimentó por su cuenta

- Te gustó la comida Moisés? - Pregunta el faraón

- Si abuelo

- Espléndido, y a ti Ramsés?

- Si papi

- Maravilloso

- Moisés, casi lo olvidaba, tu padre te estaba buscando para llevarte a tus clases de la tarde y luego a los aposentos a jugar

- Espléndido mamá

Disebek ama ver a Moisés crecer y que sea parte de su vida, el adora a ese niño como si fuera suyo

Después de comer, Moisés va en busca de su padre y lo encuentra en las afueras de sus aposentos para llevarlo a sus clases

- Hola hijo

- Hola papi

- Como está el principe mas lindo de todo egipto? - Disebek lo alza en brazos y el ríe

- Deberias preguntarle a Ramses - Disebek sonrie y le da vueltas en el aire

- Que todo el mundo sepa que eres el principe mas lindo de todo egipto

A lo lejos una sirvienta de la princesa ve esto y sonríe y piensa para si «Espero que aquí seas muy feliz Moisés»

- Que haces mirando al príncipe y a su padre?!

- Perdón yo, solo estaba viendo que no lo fuera a lastimar

- Eso jamás pasará, vuelve a trabajar - Ella asiente

Mientras tanto con Moisés

- Bueno, vámonos ya, es hora de tu entrenamiento

- Si papá, vamos

Al llegar a su entrenamiento ve el lugar libre junto a Ramsés y este se lo señala, así que va junto a su tío

- Ven Moisés, ya empieza el entrenamiento

- Si Ramsés

- Jóvenes príncipes por favor tranquilos - Dice el maestro

- Maestro una pregunta - Dice Ramsés

- Dígame príncipe

- Por qué tenemos que recibir clase con los hijos de los esclavos? A mi padre no le gustará esto - Esa era la única clase donde habían un montón de niños de los hebreos recibiendo clase junto a los príncipes, porque de resto, los príncipes tenían clases personalizadas

- Discúlpeme alteza, su padre lo ordenó así, luego de ver qué el joven príncipe Moisés no conoce muy bien las costumbres de nuestro reino, no quiere que ningún niño sea privado de ellas, después de ver cómo les inculcan un solo Dios

- Es que solo existe un Dios, no se para que el faraón se empeña en darnos estás clases, está perdiendo su tiempo

- Adriel cállate, el maestro nos va a regañar

- No, no me callo Aaron, el tiene que saber que solo existe un Dios

- Adriel, no te voy a permitir que te dirigas a mi o a los príncipes de esa manera, por favor guarda el respeto - El niño se enoja pero asiente - Muy bien, continuemos con la clase

Ramsés se acercó a Moisés y le susurró

- Esclavos - Moisés Asintió, aún se incomodaba un poco con la situación, pero ya se estaba acostumbrando

- A el no le va a decir nada? - Dijo Adriel mirando mal al príncipe Ramsés

- Adriel por favor, basta, te lo pido por favor, es el príncipe, los únicos que tienen poder sobre el, son los soberanos, así que por favor ya basta

Luego de que terminó la clase, aparecieron para recoger a sus hijos, incluyendo el padre de Moisés y la madre de Ramsés

- Ramsés hijo, ¿que pasa? - Preguntó la mujer

- Hijo, ¿Que le pasa a tu tío Ramsés? - Preguntó el hombre a su hijo

- Es que un esclavo estaba atacando a nuestros dioses y luego a Ramsés, y más adelante a mí - Disebek frunció el seño, permitía que su suegro le diera oportunidades a los hijos de los esclavos pero no que tratarán mal a su cuñado y más importante a su niño

- Dime quien fue - Moisés señaló a Adriel y ambos padres se acercaron a la madre de Adriel - Espero que su hijo tenga más cuidado en clases futuras, porque esta oportunidad de recibir clase con los príncipes no se da todos los días