Ni 1millón de Estrellas

Capitulo 8

Los niños estaban hoy mas ruidosos que nunca.

- ¿¡Enserio te pegó!? - soltó Jack entre carcajadas

- Ni me lo recuerdes - respondió Julen con una bolsa de hielo en la mandíbula.

- ¡Me encanta esa niña! - rió Natham

Y así llevaban toda la tarde. No había manera de poder concentrarme en mi lectura. Desde que llegó esa chica todos han estado revoloteados, un completo desastre. ¡Y solo había pasado una semana!

- Bueno chicos, yo me voy ya a casa - dije cerrando mi libro.

- ¿Ya? ¡Aun es pronto! - se quejó Jack

- ¿Ya no nos quieres? - hizo pucheros el surfista.

Son como críos.

- Necesito concentrarme y poder terminar mi lectura, pero al parecer en este lugar no lo conseguiré nunca.

- Tss, estúpido libro que distrae a nuestro Nick.

- Los que me distraéis sois vosotros - dije amenazante mientras me ponía mi abrigo.

- Pues mañana nos vemos - dijo Natham.

- Hasta mañana - respondió Julen

- ¡No volváis muy tarde! - ser el mayor de los cuatro no me salia rentable, pues ellos eran demasiado irresponsables - Ya son mas de las 9 de la noche, para las 10 tenéis que estar en casa.

- Si mamaaaa - se burló Jack.

Sin decir nada mas, me dirigí hasta el parking exterior de la universidad, abrí las puertas de mi coche, puse la calefacción y me puse en camino de mi casa.

Aunque aún era febrero, hacía mucho mas frío de lo normal. 

Una vez en marcha, encendí la radio para escuchar las noticias de la noche.

El camino iba tranquilo entre aquellas sendas que cruzaban por el paraje natural en el que estábamos. Era realmente bonito, por el día resplandecía con el sol y por la noche brillaba con la luna. Cada animal acompañaba al día o la noche según el momento del día. Los pájaros piaban con el sol y los búhos ululaban con la luna.

En un momento, aquella luz de mi coche se encendió. Poco a poco mi coche dejó de moverse hasta que terminó parado en mitad de la calle. Al menos pude aparcar fuera de la carretera.

¡Pensé que Teo había rellenado el tanque del coche! Mi padre contrata siempre a los sirvientes mas torpes.

Cogí mi teléfono para llamar a mi padre y que viniera a recogerme.

Perfecto.

En mitad de la nada, sin gasolina ni cobertura.

Miré hacia delante en busca de ayuda, alguien o cualquier luz que me dijera que ahí había gente.

Caminando y caminando con aquel frío conseguí llegar hasta un pequeño pueblo....o ¿barrio? No sabía exactamente lo que era, pero nunca pensé que un lugar para vivir tan pequeño fuera posible.

Justo a la entrada de este pude ver una especie de gasolinera....¿pero eso todavía existe? Supongo que para la clase baja sigue siendo así.

Me fui acercando hasta el lugar.

- ¡Oye, señorita! Llene mi tanque con esa gasolina.

- ¡Ahora mismo señor! - dijo la trabajadora.

Wow....realmente sigue existiendo este tipo de servicios. 

No sé en que momento aquellos dos comenzaron a discutir. Parecía que se iban a pegar ¿Nadie iba a pararlos? Aunque bueno....tampoco había nadie al rededor.

- ¡La hoja de reclamaciones! ¿¡Y el encargado!? - comenzó a gritar el

- Ahora mismo está ausente, pero pronto llegará.

- ¿¡Como te vas a encargar de esto!? ¿¡Lo pagarás tu verdad!?

- No puedo encargarme de esto señor - respondió ella.

- ¿¡Y QUIÉN LO HARÁ!? Tranquilo bebé, papá lo solucionará - dijo hablándole a su coche, yo también lo hacía. Seguro era un señor con clase - ¿¡Como te llamas mocosa!? 

- Alina, Alina Vell.

Espera....ese nombre y esa voz me suenan....

 

- ¿Le habéis dado una beca a una pobre? - dijo Jack

- ¿La de la patada en tu entrepierna? - respondió Natham.

- Si.... - suspiró 

- ¿Como se llama? ¡Creo que soy su fan número 1! - gritó Jack

- Mmm....¿Amina?¿Amanda? ¿Alicia? No lo sé....

- Déjalo, ya sabemos que tienes la cabeza para decorar - reí desencadenando una guerra.

 

 

¿Podría ser esa chica? El nombre se parece a los que dijo Julen....y esa voz....

- ¡Mas te vale que esto se solucione! ¡POR QUE TE JURO QUE ARRUINARÉ TU VIDA SI MI COCHE SE ROMPE!

Aquí es cuando ella explotó.

- ¡No es mi problema que usted se haya equivocado!

Si....esos gritos, definitivamente era ella.

- ¡AHORA SI QUE LO VA A SER PORQUE POR TU CULPA MI COCHE TIENE GASOLINA DE MALA CALIDAD!

- ¡Usted vino a este lugar en medio de un pueblo con recursos bajos!

- ¿¡Me estas diciendo que cometí dos errores!?

- ¡SI!

Rápidamente, el hombre la agarró del cuello de la camisa. Echó su mano abierta hacia atrás y ella cerró los ojos.

No se en que momento, mis piernas reaccionaron por si solas y corrieron hasta él.



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En el texto hay: adolescentes, drama, amor

Editado: 18.11.2019

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