Capítulo 17

Dos meses más tarde en California

— Hija, ¿estás bien? Estás pálida... ¿Deneb te despierta en la noche?

— Nada de eso... vamos que el señor Smith nos espera.

— De acuerdo.

En el tiempo transcurrido, Lizzy menciono a su padre que el señor Smith quería hablarle de negocios, a su vez le pidió al secretario que solicitará una cita con él y el señor Smith estuvo dos meses en espera. Él ya era una anciano así que su prioridad era su salud no los negocios así que el señor Smith podía esperar.

Lizzy por su parte, tenía las manos ocupadas con cuidar a Deneb y los negocios de su padre, que sentía que su salud iba disminuyendo. Ya habían terminado las fiestas decembrinas y no había contactado con Takumi desde ese día de ruptura. Él tampoco la había llamado, se sintió utilizada y al mismo tiempo no le importó porque sentía que alguien más podía valorarla. Con él iba demasiado rápido como si él entregará todo a su primer amor mientras ella buscaba amor sincero.

En la sala de reunión, ya esperaban el señor Smith y Takumi. Los mayores hablaron durante varias horas acerca del plan de negocios en el que el señor Solst se negaba a invertir. No lo veía viable. Takumi parecía no haber dormido bien en muchos días y Lizzy estaba sentada escuchando cada palabra que decían.

— Señor, tengo una condición... si quiere que invierta en el proyecto de la televisora tendrá que darle a mi hija el 40% de la empresa.

El señor Smith palideció

— Solo es temporal, mientras la inversión crece al grado de ver ganancias pueden ser de cinco a diez años... cuando las ganancias sean el doble de la inversión, mi hija le regresará esas acciones.

— Señor... ese valor... es casi todo el poder del actual presidente — titubeó

— Lo sé... pero cuando los demás inversionistas escuchen mi interés en el proyecto será más fácil atraerlos a invertir que antes.

— Es verdad... de acuerdo, lo haré y mañana lo anunciaré a la junta directiva — accedió el señor Smith.

— Excelente, nos retiramos — se despidieron

Lizzy y su padre salieron. El señor Smith miro a su hijo menor y le agradeció infinitamente que conociera a esa mujer. Estaban salvados.

— Papá... no lo hice por ti — le aclaro — ella es la mujer que amo y puesto que cree que me acerque a ella con interés no me ha dirigido la palabra. ¿Te das cuenta de que ni siquiera he podido disculparme?

— Hijo... ella no... Ella no es adecuada. Tuvo un escándalo con un abogado, se casó y se divorció además ya tiene hijos... tu mereces algo mejor que una persona así.

— Como puedes decir eso... tú... ya no me enojare pero, en serio, ¿te atreves a llamarte padre? Con razón ninguno de mis hermanos te cuenta nada...— salió enojado dejando al hombre desconcertado.

Takumi salió... no sabía a dónde fue Lizzy.

La extrañaba y al mismo era demasiado cobarde para buscarla.

Hace un mes en navidad

En Francia

— ¿Está es tu casa Logan?

— Si, aquí crecí con mis padres. Mi hermano dijo que llegaría más tarde así que me toca limpiar.

Haru visitaba todos los días a Logan. Le enviaba flores o chocolates incluso le pedía ir a cenar. Logan lo rechazaba cortésmente, para él solo había espacio en su corazón para sus hijos pero Haru no se daba por vencido. Tanto fue su esfuerzo que Logan lo invito a pasarla navidad en Francia.

Acepto antes de pensar que se vería con la familia de su amado.

— Papi... ¿quién es este hombre? — pregunto Audrey

— Un amigo... ¿dónde está Patrick?

— Ya se durmió. El vuelo fue largo.

Patrick era solo un bebé cuyo mayor tiempo pasaba con la niñera.

Haru no lograba ganarse el aprecio de los niños de ninguna forma. Cuando llegó el hermano de Logan con su esposa e hija; las cosas estaban algo incómodas. Lo peor comenzó cuando llegaron sus padres y Logan lo presento como un amigo. Los mayores sonrieron incómodos.

Antes de cenar se ausentó para fumar un poco.

— ¿Estás bien?

— No... ¿A tus ojos solo soy un amigo y no interés romántico?

— Exacto... apenas va a ser un año desde que Carla falleció así que no tengo ningún interés en iniciar una relación contigo ni con nadie.

— Lo sé... soy yo quien se ilusiona y al misma tiempo al que le rompen el corazón. Discúlpame con ellos pero creo que no cenaré.

— ¿Te vas?

— Si... no soporto esa felicidad... también siento por si no lo recordabas... me voy.

La cena familiar fue igual de alegre que otros años pero el observador Zyphr noto que su hermano menor trataba de alegrar el ambiente, lo que no hacía muy bien.

— ¿Paso algo? — pregunto en medio de la noche alejado de todos.

— Nada... escuché de la cuñada que esta embaraza de nuevo... ¿estás feliz? — pregunto Logan.