Cap. 17

Parecía que mi mamá estaba más emocionada que nosotros. Nos tomo fotos hasta cuando nos estábamos yendo.                                                               Antes de ir al baile pasamos a mi cuarto a despedirnos de chimi. Aliste una pijama y un cambio de ropa.

-- No veas mi ropa interior. -regaño a James mientras escondo mi ropa.

-- ¿Porqué no? -pregunta juguetón.

-- Porque me da pena. -me quita toda la ropa de las manos y la mira. Me muero de la vergüenza.

-- Lindas bragas de gatitos. -estoy demasiado roja. No se si estoy enojada, pero en parte me hace gracia. 

-- Sueltalos. -le exijo mientras intento quitárselos. El los levanta lo más alto que puede. -Vete de mi casa. - le digo lo más sería que puedo.

-- ¿Hablas enserio? -se queda quieto.

-- Hablo muy enserio. -la cara que pone James me da risa y no puedo evitar reírme.

 Terminó de guardar mis cosas.                                 Cada que miro a James recuerdo la cara de asustado que hizo y me río de el, el me hace cosquillas por lo que hice. Terminamos desarreglados así que nos damos un retoque. 

-- ¿Alice? -pregunta James mientras conduce, aún con la mirada fija en la carretera.

-- ¿Si? -lo miro.

-- ¿Ya te dije lo perfecta que luces esta noche? Todos los días luces así, pero por alguna razón hoy más. De todas las formas luces perfecta, despeinada, peinada, con pijama o con vestido. -dice en un tono tan dulce, que me dan ganas de tomarlo de su smockyn traerlo hacia mi y besarlo. -No puedo verte bien pero se que ya te pusiste roja. 

-- Si. Es... eres... tan lindo. Perdón por no decirte cosas lindas como tu lo haces... -bajo la vista. El me levanta la cabeza con un una mano y lo miro a los ojos.

-- No es necesario que lo hagas. Se lo que sientes por mi y con eso basta. -le doy un beso en la mejilla.

Entramos al salón. Todos se nos quedaron viendo.

-- ¿Vez? Te miras tan perfecta que todos te miran. -me dice James. 

-- Claro que no. -deseguro lo miran a el. O ¿a los dos? No importa. El punto es que de verdad nos vemos bien.

Caminamos al centro de la pista. James tomo mi cintura con ambas manos, y yo entrelace mis brazos en su cuello. Pusieron una canción lenta llamada "2u" casi lloro con la letra, si hay una canción que le tenga que dedicar a James sería esa.                                 Después, ponen mi canción favorita "Thinking out Loud", bailamos cuerpo a cuerpo, recargue mi cabeza en su pecho. Fue el mejor baile de todos.       

La mayoría de la canciones fueron románticas, y me alegro por eso, disfrute mucho de bailar con James.

-- Su atención porfavor. -dice una compañera. Todos dejan de bailar y sólo ponen música de fondo. -Llegó el momento de coronar a reyes y reinas.                         Coronaron a la reina de generación y su rey.

-- Y la pareja de generación es... -después de unos segundos respondió. -James y Alice.

-- ¿Qué? -pregunto sorprendida.

-- Vamos. -me jala James y ambos subimos al escenario. 

Nos pusieron unas coronas y una vandala que decía "pareja de generación".

-- No necesitabas una corona para que supieran que eres una princesa. -dice James cuando le pasan un micrófono. Lo beso y todos aplaudieron.                    Dimos la gracias y nos dirigimos de nuevo a la pista.

Me encantó a ver ganado con James. Fue lindo que nos hayan considerado como la mejor pareja.

-- ¡Alice! -me grita James. La música esta demasiado alta.

-- ¡Mande! -le regreso el grito.

-- ¡Te vez hermosa! -me dice sonriendo y yo me pongo roja. Lo abrazo, como si fuera el último abrazo que nos fuéramos a dar. Y olvido todo, sólo estamos el y yo, en un mundo perfecto, donde somos felices y nada lo demás importa.

-- ¿Lista para acampar? -pregunta James cuando llegamos. 

-- Lista. -le sonrió.

James guarda las coronas y las vandalas en la cajuela del carro. No me deja ni hacercarme, deseguro ya tiene algo planeando.                                   Mire a los alrededores, no se donde estamos, ya es muy obscuro, lo único que puedo distinguir es una casita de campaña y las cosas para hacer una fogata. 

-- ¿Tienes frío? -me pregunta James al oído. Cada que me habla así, se me eriza la piel.

-- Estamos en pleno julio. -me río.

Nos sentamos frente al fuego. James paso una mano por mi espalda para abrazarme, recargue mi cabeza en su pecho.                                                                         Tomo unos tenedores grandes y le puso bombones para azarlos. No me dejo de abrazar.

-- Traje fresas con chocolate. -dice James pasandomelas.

-- Genial. -las tomo y me como una.

-- Cierra los ojos. 

-- ¿Para qué? 

-- Tu sólo hazlo. -dejo las fresas con chocolate en el suelo y me tapó la cara con las manos. Escucho los pasos de James alejándose. Miro un poco, esta en la cajuela del carro.                                                         Tarda unos segundos en volver.

-- Ya puedes ver. -me destapó la cara. Tiene en las manos un ramo de rosas color fiucha. -Para ti. -dice con una tierna sonrisa.

-- ¡Gracias! Me gustaron muchísimo. -las tomo, y lo primero que hago son olerlas, como lo imaginé, huelen delicioso. -¿Porqué eres tan lindo conmigo? 

-- Porque te amo y yo... Estoy enamorado de ti Alice, ¡Estoy enamorado de ti! -grita. Su eco resuena por todo el lugar.

-- Tam... bien estoy... enamorada... de ti. -tartamudeo. Me a dejado sonrojada.

-- Te pusiste como tomate. -se burla de mi.

-- Dejame. -intento golpearle la cabeza pero no lo alcanzó.

-- Ni con tacones me alcanzas. -se burla de nuevo.

-- No es mi culpa que seas un poste. -pongo los ojos en blanco.

-- Me encanta cuando te enojas. -se tapa la boca para reírse.

-- ¿Porqué?

-- Porque te vez bien linda. -me carga en sus brazos. - No te quiero perder. -dice casi en un susurro.