굿바이 민윤기

Capítulo 27. Adios Min YoonGi.

Caminé despacio, poniéndome de pie a como pude, mis piernas seguían entumidas, la lluvia seguía cayendo, los labios me temblaban y los ojos me ardían, caminé con rumbo a mi departamento, subí al elevador, las lágrimas cayeron con más fuerza . Porqué tenía que pasarme ésto a mi, ¿Porqué me estaba doliendo tanto? ¿Porqué? ¿¿Porqué?? ¡¿Porqué?!

Ingrese en mi departamento y me dejé caer en el sillón, observaba a la nada, ¿Realmente merecía esto? ¿Qué hice mal? ¿Era mi culpa? Si, era cierto que era un trabajo, pero lo amaba y podría jurar que el también lo hacía, con mis manos limpié mi mejilla, no pensaba rendirme, pero tampoco sería algo tan fácil de olvidar, lo acababa de perder todo, mi corazón estaba destrozado, y no encontraba manera de curarlo o repararlo. Todos tenían razón, pero yo era ingenua, porque jamás me había enamorado. Y el se aprovechó de eso. Llegar a odiar a la persona que más amaste, es algo icónico, pero también escalofriante, porque si el dolor no me mató, me hizo más fuerte. Siempre traté de demostrarle cuanto lo amaba, y el no supo verlo o no quiso hacerlo, vi galaxias en los ojos de una persona, que no vió ni una estrella en mi.

¿Y qué tal si yo soy tu nuevo comienzo?

— Yasiri. —SooMin entró por la puerta, se acercó a mí y me rodeó con sus brazos—. Dios, ¿Qué pasó?

— YoonGi y yo terminamos, eso es lo que pasó. —Le grité correspondiendo su abrazo—. El me dijo que sólo había sido un juego, que ésto solo era trabajo y que jamás había estado enamorado de mi...

— Dios, Yasi, lo lamento. —Limpié mis lágrimas—. ¿Qué piensas hacer ahora?

— No lo sé, quizá irme de aquí, quiero... Quiero dejar de pensar en el, en todo ésto, no quiero sufrir más... —Moví mis brazos tratando de cubrirme con las sábanas de el sillón.

— Mira, te voy a decir lo que me dijiste una vez. —Ella entrelazó sus dedos con los míos y me dedicó una sonrisa—. Yo sé que esto te duele, aunque trates de soportarlo, es algo normal, porque tú lo amas... Pero debes aprender a vivir sin él,si tu decisión es no luchar por el...

—Es que no se trata de luchar, se trata de una decisión de el, y yo no pienso escucharlo, lo odio, ¡Lo odio tanto que podía matarlo!

— El odio no es bueno, mírame a mi, Aprendí a vivir sin SeokJin y no me morí en el intento... —Por alguna razón sonreí—. No dejé de amarlo, pero... Me siento mejor así, conocí mejor a Hoseok, en el encontré un compañero, un amigo y alguien que me comprende y me da mi espacio y tiempo... —Yo asentí, sus palabras parecían tener sentido—. Creo que... También fue lo correcto que terminaran... Su relación no estaba muy bien...

— ¿ A qué te refieres? —Ella sonrió, fue por unas toallas para que secara mi pelo que no dejaba de chorrear.

— Siempre que estaban juntos, había algo que los hacia separarse y tomar distancia. Quiero decir, que siempre peleaban, el te hacía menos y tú siempre dejabas que lo hicieras, con eso no quiero decir que te hubieras dejado... Pero si le diste muchas libertades... Ambos vivieron su relación tratando de alejarse de lo mierda que ya estaba. Y en parte fue lo mejor.

— Talvez tengas razón, pero no puedo perdonar lo que él me hizo, simplemente no puedo...

— Mira, no puedes vivir odiandolo, sal, vive tu vida, sigue Adelante, hazlo por tí, y no para demostrarle que eres superior... Quierete y dete tu lugar por ti misma... Sé que no podrás perdonarlo, pero no lo odies... —Me abrazo—. Te entiendo mejor que nadie... ¿Quieres escuchar música triste de BTS?

— Eso no me ayudara a olvidarlo. —Comenté entre risas limpiando mis lágrimas.

— Es que no se trata de olvidar, Noona, se trata de recordar sin que te duela. Y esa es tu próxima meta.

Le agradecí con una débil sonrisa la cual la hizo devolvermela, se puso de pie y fue a su habitación. Ella tenía razón, debía comenzar a pensar en mí, ponerme a mi como prioridad. Una notificación sonó en mi móvil, era un correo de Estados Unidos. Ésta era mi oportunidad de volver a encontrarme, de olvidarme de ésto... De ser yo...

A la mañana siguiente...

— ¿A dónde irás? —SooMin me tendió una taza de café mientras yo guardaba algunas cosas en mi bolsos.

— Me enteré que detuvieron a Katherine, quiero hablar con ella sobre algo. —Tomé de golpe todo el contenido de la taza, acomodé mi pelo y salí de ahí seguida de SooMin.

— ¿Por asesinar a San? —Por alguna razón estaba sonriendo, como si disfrutara del sufrimiento de la estadounidense

— No, pero confío en que pronto le darán la pena máxima por eso, la detuvieron por el plagio del libro.

— ¿Y que tienes que hablar con esa asesina?

— Tenemos mucho de que hablar, y deseo decirle todas sus verdades, antes de comenzar de nuevo...

Páramos un taxi y fuimos con rumbo al reclusorio, uno de los oficiales me dejó pasar a la sala de visitas y ahí pude ver a la causante de tantas desgracias. Ella me miró y sonrió con cinismo, no puedo creer que a pesar de estar bajo rejas siga sonriendo como si hubiera conseguido lo que quería, es una cínica.

— ¿Qué quieres? —Escupió con rabia y yo tomé asiento en la silla.

— ¿Yo? Quiero que pagues por todo lo que hiciste y que sufras todos los días por haber asesinado a mi mejor amigo. —Respondí—., Pero fuera de eso, nada importante. ¿Por? —Ella gruñó con rabia ante mi sarcasmo.

— No entiendo porque sigues tratando de vengar a San si el jamás significó nada tan importante como YoonGi, realmente en amor por ese Idol te hizo más suave.

— Ay Katherine, —Reí con inocencia y relamí mis labios para después mirarla directamente—. Soy ese tipo de persona que sabe acoplarse muy bien a todas las facetas, puedo ser tan dulce y a la vez tan amarga como no puedes imaginarte.

— ¿YoonGi te terminó no es así? —Ésta vez ella sonrió—. Las noticias no dejan de hablar de eso...