Capitulo 11

Dos ataques de pánico, en eso se resumió mis cinco horas de vida sin Caden. Lorena trato de ayudarme pero me negué, como la misma imbecil que soy me negué a recibir ayuda porque era consciente que Caden la estaba pasando peor y nadie estaba ahí queriéndolo ayudar. 

Papá después de todo ese rato llego a la casa y me encontró bajo la ducha completamente vestida mientras me comía la uñas de mi mano derecha, mi teléfono ya no servía porque lo había tirada al inodoro cuando tuve el impulso de llamarlo. Papá no dijo nada se acercó a mí lentamente dejando su saco y celular en el lavado para sentarse junto a mí en el frío y mojado piso. 

—Se que tenemos que hablar, pero tienes que calmarte primero princesa. 

Me estremecí por tanta hipocresía que brotaba de su boca, trato de acariciar mi cabello pero yo lo evite y levante la vista con toda la furia volviendo a acumularse en la boca de mi estómago, deje de morderme las uñas y lo señale a él. 

—¡No te atrevas!, ¡ni se te ocurra dartelas de padre compresivo, porque sabes muy bien que todo esto es por tu culpa!. —los saltones  ojos azules de mi padre se abrieron de par en par cuando esas palabras abandonaron mi boca. 

Él se tenso me imagino que asumiendo que ya yo sabía todo, sus facciones que trataron de ser comprensivas se endurecieron y tomó mi mano para bajarla. Nathaniel Henderson y yo no compartíamos ningún razgo físico similar más que el cabello rubio y eso era algo que agradecía enormenete, ya de por sí me avergonzaba tenerlo como progenitor. 

—Ali, hice eso por tú bien, por su culpa es que tú no has avanzado y por tú culpa él no puede avanzar. —Su tranquilo tono de voz me irritaba demasiado, porque me hacia ver a mi como la del problema y él quedaba como el padre compresivo que solo trataba de buscar una puta solución. 

—¡Tú no sabes lo que necesito realmente!, ¡a ti no te importa nadie más que tú! —

probablemente tenía la cara enrojecida de la furia y mis gritos los habria escuchado Lorena, pero necesitaba sacar eso de mi sistema. 

Él sonrió y se levantó para apagar la regadera y volverse a ponerse frente a mí analizandome con sus ojos tan azules como el acero que podría intimidar a cualquiera hasta en un punto a mi, pero ya no. 

—No Alicia, a pesar de la idea erróneas que tienes influenciada por tu demente madre no es así. —Su afirmación y su calma me molestaba, sobre todo como hablaba de ella sin ningún rastro de remordimiento cuando entré él y Caden declararon que estaba loca y la metieron en el agujero donde está. —Lo hice porque te aprecio y porque también quiero un bien para él, Conozco a Caden desde que tiene 8 años, él me ayudo a que te librarás de la influencia de esa loca, pero ustedes no pueden seguir así, no pueden estar juntos si quieren avanzar. —Él suspiro como si fuera muy duro decirme aquello cuando podía juarar que hasta lo disfrutaba, Nathaniel Henderson era un muy buen actor. —Lo intente por las buenas pero no funcionó, tú sigues cayendo en las manipulaciones de esa maldita loca y a su vez Caden cae en las tuyas, ¡entiendelo de una maldita vez Alicia no quiero que termines como ella! —Su calma se desvaneció definitivamente y los último lo grito, su pecho subía y bajaba y una gruesa lagrima caía por su mejilla, lo odie tanto en ese momento porque me hizo sentir mal y me recordó tanto a Caden. 

Así que no resisto más y me dispuse a sufrir mi tercer ataque, mientras lloraba y negaba, derrepente sentí que mi cabeza explotaba y mi pecho ardía otra vez con gran intensidad. Él intento abrazarme mientras que en susurros me pedía que me calmara, asegurándome que todo estaría bien. 

—¡Es mentira!, ¡todo es un maldito engaño!—. Grite nuevamente y me aleje más arrinconandome en la ducha sin permitir que me tocara, todo esa faseta de padre preocupado era mentira, él también quería encerrarme en ese lugar, ella me lo dijo, me lo aseguro y le creo porque yo se que mamá no está loca, que todo eso fue una trampa de mi papá y Caden, ella no provocó mi bulimia, solo quiso ayudarme a que no sufriera de acoso en la escuela por ser gorda, me prometio que todo saldría bien, seria delgada, a la delgadas todas las quieren y seguro Caden me iba a querer así y no gorda. —No me toques. —Adverti aun con la respiración irregular y la punzada de mi cabeza en aumento por cada segundo, que pasaba y él traba de hablar 

—Sabes que tengo razón, ella es la causa de tus problemas, pero te convenció que yo era el malo. Alicia ella fue la que hizo que sufrieras de Bulimia cuando tenía 11 años, mi niña. Ella te dijo que odiaras a Caden, que él era un traidor y no merecía tu amor, ella no te deja avanzar y te convence de que no necesitas visitar a Jazmín, ni tomar tus medicamentos  porque sabe que si lo haces, que si mejoras no podrá manipularte, ella confunde tus sentimiento y te hace tóxica Alicia, por eso Caden no puede estar contigo porque por culpa de Elena tú le haces daño y no eres buena para él, créeme hija a pesar de todos mi malditos errores y de que sea una horrible persona, yo amo a mi familia y me preocupo por ella con todo mi ser créeme por favor.