Capitulo 32 "CONCLUSIÓN"

El tiempo de Dios siempre es sabio, él decide cuando poner cada cosa en su lugar, y como bien dicen uno es arquitecto de su propio destino...
Y en quién menos piensas puedes encontrar la respuesta a tus dudas, puedas sacar la conclusión y saber qué la respuesta siempre estuve en tí.
 

KEDAE


 

Narra David...

Note la cara de asombro de Diego al ver qué lo había saludado, francamente yo reaccionaria de la misma forma pero necesitaba hablar con él sin que Dalia estuviera presente y no se preocupara al vernos a los dos juntos...

—Soy David Curiel amigo de Dalia, nos conocimos hace poco tiempo, y aunque no empezamos de la manera adecuada me gustaría hablar contigo conocerte un poco más, después de todo eres el hombre que Dalia ama—

— Mucho gustó David, así es mi nombre es Diego Velázquez... Pero dime de que que quieres o pretendes hablar, no somos dos niños y francamente dudo que podamos ser los mejores amigos, así que te pido que seas breve...—

— Agradezco tu sinceridad, no pretendo ser tu amigo o alguien cercano a ti, pero tenemos algo en común; El bienestar de Dalia... Yo quiero mucho a esa mujersita, la vi sufrir por ti el día de tu boda he compartido demasiado a su lado tanto que he llegado a quererla de una manera difícil de explicar...

—Ve el grano, quiere decir que la amas y que no me dejaras el camino tan fácil...—

— Disculpa que te interrumpa Diego,  aunque tú lo hiciste primero, pero bueno... Que ganaría con decirte tales palabras !por Dios¡ no soy masoquista o estúpido. Debes aprender a relajarte y dejar de pensar que todo el mundo está contra tí.

—¡Vamos empiezas a agotar mi paciencia!, dime a qué quieres llegar si solo me vas a dar consejos pierdes tu tiempo...—

— No, no pretendo aconsejarte es más tampoco eres mucho de mi agradó pero esto lo hago por Dalia y no por tí. Retomando el tema de inició, si es un cariño difícil de explicar no lo voy a negar que me gusta mucho y el tiempo a su lado pasa muy rápido... Pero soy consciente de que te ama aunque ella lo ha tratado de negar por dos años el día que los vi juntos note ese resplandor en sus ojos, y en los tuyos. Es difícil poder competir por un sentimiento así, y aunque Dalia hubiese aceptado salir conmigo jamás la tendría completa, pues no me gustaría que confundirá amor con gratitud, es difícil aceptarlo y darme cuenta de las cosas, Dalia te ama tanto que se alejó de tí para que pudieras hacer tú vida con tu familia... Pero viendote aquí con la determinación de ir en su buscá y saber del bienestar de tu hijo, me alegro mucho porque eso quiere decir que antepusiste cualquier cosa por estar a su lado y eso habla del amor que le tienes.—

— Sabes David, eres más maduro que mi ex esposa, por el echo no aferrarte a algo que no va a funcionar, aveces uno confunde amor con capricho, gratitud, atracción, compromiso, o quizá costumbre, en todos estos años que estuve con y sin Dalia me di cuenta de muchas cosas, te las compartiré solo porqué apreció tu sinceridad y tus palabras.
Cuando vi a Dalia por primera vez sentí solo atracción, y tú no me podrás negar que sentiste lo mismo, ella siempre ha sido muy linda, inteligente, madura, , sabe cómo generar ese enigma a conocerla, es una enigma tan grande que te enfrasca en querer saber más de ella de su vida y saber porqué es así, pero también siempre ha tenido bien resaltado su trasero.—

— ¡Deja de referirte a Dalia como un objeto, ella es más que eso!, —

— ¿Dónde ha quedado tu calma y tú madurez? Ni siquiera me haz dejado terminar de hablar...—

— ¡Deja de jugar conmigo Diego... Me harás perder la compostura! —

-Could you bring it down a little bit?-

- Sorry it won't happen again-

Mi paciencia era bastante pero junto al imbécil de Diego me fue imposible calmar mi furia, tanto que me olvidé del lugar donde estábamos y no pude evitar alzar la voz, si no hubiera sido por la azafata que me pidió bajar la voz le habría soltado un puñetazo en la cara... Respira David... Respira que nada ganas en caer en su juego y provocaciones... Después de que la hermosa señorita se fuera trate de tomar la plática sin exaltarme.

— Tienes razón en algo David, lo sé Dalia es más que eso, pero como te he dicho eso fue en un inicio, después esa atracción se convirtió en apreció, admiración, y sin darme cuenta poco a poco se fue metiendo en mi ser, no sabes lo que sería capaz de hacer por ella, estuve dos años lejos de ella no solo una ocasión, fueron dos veces la primera vez me aleje por temor ella apenas era una niña tenía casi 15 años cuando la bese por primera vez,—

Pude notar como el semblante de Diego cambio, podía notar la sinceridad en sus ojos, pude entender un poco el sentimiento de ambos...

— Sabes yo también me sentí atraído por ella, y talvez no por su trasero como tú... en mi caso fueron sus ojos, esa mirada transparente que hace que puedas leerlos sin ningún problema, se que tampoco le fui indiferente y que talvez sintió algo por mi, pero jamás se podrá comparar con lo que ustedes han pasado, su amor ha ido madurando poco a poco, sus errores los fueron marcando y eso los ha echo más fuertes, pero también debés reconocer que tú fallaste al aver ocultado ciertas cosas, no pretendo juzgar ni nada parecido solo quiero saber más, saber que Dalia queda en buenas manos, pues la quiero tanto que no me gustaría verle sufrir una vez más por ti.—

— Se que falle, que hice mal muchas cosas en el pasado, y cuando la perdí por segunda vez sentí que el mundo se me caía encima, yo también traté de hacerme a un lado para que ella hiciera su vida, por eso no hize nada por buscarla, pero al verla de nuevo ese sentimiento que permaneció dormido volvió y más intenso que en un inicio y estaba dispuesto a alejarme de ella si me lo hubiera pedido de una manera sincera, pero como tú lo haz dicho su mirada me lo dijo todo, aunque ella lo negara sabía que me amaba, pero también note algo... Se que ella siente algo por tí, y no sé que es lo que sea, y por eso no te tolero, ¡No puedo soportar el echo de que temo perderla!, Verte solo hace que ese miedo aumente...—