Capitulo 3

Pasaron muchas horas desde que salimos de casa,todavia no habíamos llegado,por lo que el conductor habia dicho faltaban solo unas pocas horas y llegariamos,todavia seguia un poco triste por mi despedida con mis amigos,pero también por otra parte,estaba un tanto emocionada,Buenos Aires es una ciudad muy bonita,ahi van cantantes famosos y todo eso,tal vez sera divertido,y el colegio es un lugar muy sostificado por lo que lei,aunque soy una alumna bastante responsable,nunca me saco notas bajas,pero esperemos que aca no sea tan exigente.

Me saca de mis pensamientos un mensaje de Damián.

—Hola,ya llegaste?

—Todavia no,faltan unas horas,es un viaje muy largo,ya los extraño.

—Si,es un viaje muy largo,y nosotros a ti,pero ey!,seguro te ira genial allá,siempre lo tienes todo bajo control,eres increíble.

Ese mensaje hizo que me sonrojaran las mejillas,estas cosas no son de sucederme mucho,osea un poco,pero no le doy importancia.

—Muchas gracias Dami,sos un gran amigo...

—Bueno,te dejo,mi mamá quiere que salga a vender empanadas,bueno lo que queda de ellas jaja

—Esta bien,no te las comas todas,la mitad por lomenos vendelas,jaja,nos vemos

—Lo pensare,adiós.

Terminando de hablar con Damian intente dormirme,al principio no podia,pero después de unos cuantos intentos lo logre,me dormi tres horas,al despertar mi mamá todavía seguía durmiendo,me fije la hora eran las 20 de la noche,pensaba que nunca llegariamos,pero en eso,dieron un anunció en el colectivo,diciendo que faltaba solo 1 para llegar.

Pense en todo lo que podia hacer estando allá,hay cosas muy lindas en ese lugar y haria amigos?

Salgo de mis pensamientos cuando mi mamá me habla.

—Dormí mucho?mira por la ventana y ya es de noche,pone una cara de expresión,no penso que dormiria tanto.

—Si,y además no sabia que roncabas,mi mamá se rie por mi comentario,pues ronca muy fuerte

—Ay enserio,ojala no lo haya escuchado mucha gente,con una sonrisa avergonzada por la situación.

—No creo,además roncar no es cosa de otro mundo,cualquiera puede hacerlo,es normal mamá,le toco hombro—Pero por un momento pense que tenias algo en la garganta un pan o algo asi atragantado,y me hecho a reir.

—Muy graciosa,además el pan no es lo mio,estoy a dieta,y se encoge de hombros y su vista se fija en el telefeno.

—Hace rato dijeron que faltaba poco para llegar,ahora seguro falta menos,miro la hora y son las 20:30,no podia creer que solo paso media hora,estaba cansada y aburrida del viaje.

—Si seguro en media hora más estamos allá,con una emoción que sobresalia de su rostro.

Le hice una breve sonrisa,ya que la idea como saben no me terminaba de pasar,paso una media hora más y el autobús se detuvo,todos empezaron a bajar,yo tenia mi cabeza recostada por el vidrio cuando mi mamá me toma del brazo diciéndome que bajara wue habiamos llegado.

Saque mis pertenencias de la parte de arriba del asiento,donde se guardan las cosas,el resto lo tenian en la parte de abajo,bajamos y un señor nos entrega todo lo nuestro.

Después de estar un rato sentadas en una de las banca de un parque,un remis alfin para enfrente nuestro diciendonos que era el que nos llevaría a nuestro edifio,nos subímos y al rato llegamos a un barrio muy bonito,la calle se llamaba,"Palermo" y nuestro departamento estaba alado de una gran casa,era una mansión,muy lujosa,y tenia un hermoso perro un pitbull,al bajarnos del auto mi mamá pago al remisero,entramos al lujar unos instantes después de ver el gran edificó era uno muy lindo,enfrente de el había una señora barriendo,dirijimos nuestra mirada hacia ella y luego caminamos.

—Hola,disculpe usted es el ama de llaves?una calida ronrisa se refleja en el rostro de mi mamá.

La mujer deja de barrer para luego dirigir la mirada hacia nosotras.

—Buenas noches señorita,si esa soy yo,que necesita?La señora muy amable nos responde.

—Yo me llamo Sandra Fernández ,ella es mi hija zoe,dirige mi mano hacia mi,dandome la señal que me acercara más—El señor Castillo Mariano me dijo que usted podría ayudarnos.

—Ah si claro,lo habia olvidado,pasen señoritas,su piso es el que esta casi a lo último del edificó,el número 34,puede subir por el ascensor o tiene las escaleras,como mejor le resulte,la señora era muy hablame,tenia el aspecto de una edad de 50,pero era muy amable.

—Muchas gracias,las dos asistimos con una sonrisa,la mujer nos entrega las llave de nuestro piso y entramos.

—Si necesita algo no dude en decirme,estoy en último piso,que tengan buenas noches.

—Igualmente,le sonrio igual que mi mamá lo hace y alfin entramos,decidiimos ir por el ascensor,porque ir por las escaleras seria mucho,salimos de el y había varias habitaciones y una de las últimas era nuestras,entramos y era muy bonita,estába pintada de un color blanco,bien amueblada,la cocina era de un color amarillo clarito,no pense que seria tan bello el lugar,de verdad me sorprendi,también tenia un pequeño balcon,pero afuera se venia una hermosa vista de la ciudad y una gran playa que se veia bastante a lo lejos,el lugar me fascinó,tanto temi que no me gustara y fue todo lo contrario,estába maravillada con el lugar.

—¡Me encanta ma!es un lugar hermoso y con una vista espectacular.

—Si hija,es un lugar muy bello,tu habitación esta del otro lado de la sala,junto a la mia.

Zoe le sonrio y se dirigió rápidamente hacia su habitación,al verla le parecio hermosa,las paredes estaban pintadas de un rosa clarito,tenia un baño dentro,era muy grande cabian muchas cosas,también tenia un escritorio,un placar,una mesita de luz y dos lámparas alado de su cama,entre otras cosas,pero muy bonita todo lo que siempre soño.