Capitulo II

Al paso que la ciudad desaparecía. En la mitad de la guerra, Oxluz se dirigía entre las calles con mas sangre de varios soldados que han sacrificado sus vidas para proteger su rey de la invasión de Eón. 

Desde las calles que recorría el, solo podía ver solo cadáveres de varias familias que estuvieron escapando de este lugar maldito, en donde solo servían como estiércol para la tierra que pronto crecerá las plantas que fueron alimentados con la sangre de sus caídos. 

No importaba lo que paso a esa gente, solo le importaba su siguiente victima, tenia solo un propósito y no era solo de matar a los que se los merece, algo en el que era muy importante, aunque me precio era grande. Haría lo que sea, incluso dar su propia alma para conseguirlo. 

Al caminar en el cruel camino que le esperaba al final. Vio desde lo mas lejos de esta calle que aun habían personas siendo atrapadas y encerradas en las celdas que tenían los soldados de Eón, tapaban el camino hacia el rey, no le gustaba que haiga algo en su camino, así que solo siguió en aun mismo camino, no le importaba si lo mataran, de todos modos, el resultado será igual. 

Cuando llegaba hacia ellos, uno de esos soldados se dio cuenta de su llegada, le aviso a los otros que por fin tenían algo de diversión por ahí, aunque no sabían que clase de hombre se enfrentaban. Al esperara que llegara hasta aquí, las personas estaban aterradas al ver a ese hombre con muchas vendas en el cuerpo y con esa arma tan extraña, no sabían que era uno de los buenos o malos, pero al ver esa expresión en su cara, esa cara de un hombre muy peligroso y con demasiado odio, sabían que no venia a salvarlos. 

Uno de ellos, se acerco con su espada preparada para su movimiento y le dijo al frente de el como si fuera su propio jefe. 

Asesino1: ¿si no quieres que te mate? debes irte de este lugar y correr como perro cobarde. 

Oxluz: largo de mi camino. 

Asesino1: que acabas de decir. 

Oxluz: no te lo voy a repetir otra vez, imbécil. 

Con las palabras que le dijo al frente de su miserable cara, puso su espada justo en su garganta y le dijo con rabia. 

Asesino1: ¿crees que me das miedo? solo eres basura que será quemada con los otros. 

Oxluz: te lo advertí. 

Cuando le tenia la espada en la garganta, con su mano derecha, la tomo rápidamente y quebró la espada en mil pedazos y después con la otra mano, atravesó el cuerpo de el y con tu tirón, le arrancón su corazón como si nada. Al ver al tipo cayendo al suelo rápidamente y causando una gran charco de sangre a su alrededor, dijo: 

Oxluz: te lo dije. 

Cuando vieron como quedo su amigo, cinco mas de ellos, rodeaban a Oxluz para atacarlo justos y así matarlo. Cuando todos estaban y listos para hacerlo, de pronto saco su guadaña y la dividió en dos, harán como tener dos guadañas a la vez, al hacerlo, las guadañas se a largaron y al dar un giro, corto cada cabeza de cada enemigo con solo un corte. 

Cada uno de ellos, soltó un montón de sangre que hizo como si fuera una fuente de agua, pero en vez de agua, era sangre de ellos. Oxluz vio que solo quedaba uno, al verlo huyo lo mas lejos que podía de el, pero al verlo huyendo, saco un daga y con ella, lo lanzo lo mas lejos y ahí, la daga llego y le enterró justo en la nuca, causándole una muerte rápida e indolora. 

Cuando termino la masacre, se fue sin hacer nada mas. Aunque cuando se iba, vio a esas personas aun atrapadas en esas celdas. No me importaba en lo absoluto, pero aun no estaban listas para aceptar su destino, así que fue a donde mas celdas y las libero, al hacerlo, los dejo irse así nomas. Pero cuando se iba, una niñita fue a por el. 

Oxluz la vio y solo era una niñita pequeña e inofensiva, era de 10 años como la veía, pelo blanco liso largo, ojos Amarillos, era de piel blanca como la nieve. Estaba un poco sucia por la tierra y con unos moretones en el cuerpo. 

Ella no hacia nada, solo lo miraba. Al verla así, me recuerda a alguien con esa mirada, pero no quería recordar ese momento cuando la vio irse. 

Entonces la dejo ahí, el camino que tomo no era para una niña como ella, no sabe los peligros que el tomaba, sabia que todo esto, era un suicidio. Así que dejo a la niña para que acompañara al grupo para que saliera de la ciudad. Oxluz vio algo en ella que era difícil de ver, era verdad que le recordaba a alguien, pero no quería ver ese pasado que vivido hace mucho tiempo. 

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Cuando llego la tarde, la mitad de la ciudad fue devastada, todos estaban muertos pero al menos los que sobrevivieron al ataque, son encontrados con lo rápido que destruían lo que estaban en su camino. 

Desde ese punto, Oxluz llegaba desde la escalera mas alta a la torre donde estaba el rey. Fue fácil que no hubo ningún retraso en el camino, todos los soldados de Eón ya hicieron todo el trabajo y se fueron al saber que el rey estaba muerto, Eón el mismo lo matara para saber que sus tierras son ahora suyas. 

Cuando llegaba ya, a la cima con su arma lista para sacar la sangre del rey. En el ultimo escalón, encontró a una persona que había conocido en el tercer circulo del infierno, era el único de ese lugar maldito el que podía confiar. 

Oxluz: creía que estarías ocupado en el infierno poeta. 

Poeta: el trabajo mío, solo es conducir a los condenados y contar sus pecados que han cometido. Y ahora que abro mis ojos. Veo que hay muchos nuevos en el infierno y también en el purgatorio. 

Oxluz: (...) esta gente se esta muriendo a cada segundo cuando llego Eón, están condenados. 

Poeta: todos estamos condenados... incluso tu, el que derramado mucha sangre en el pasado, sangre de inocentes que no vieron la realidad de este mundo. 

Oxluz: yo ya estaba condenado de ningún pecado en el infierno, y el me saco de esa miseria. 

Poeta: sabemos no podemos confiar en ese monstruo. Solo te salvó porque quería algo de ti, solo caíste en su trampa. 

Oxluz: al menos me dio que ustedes no me dieron, un propósito. 

Poeta: ¿propósito? 

Oxluz: me mostro que este mundo, no hay esperanza, y se también que nuestro creador es falso. 

Poeta: no quieres que se enfade y haga desaparecer de este mundo. 

Oxluz: crees que le temo su furia, si viene hasta aquí. Sabrá que esta arma que me dio el, puede matar mas que solo personas. 

Poeta: (...) 

Oxluz: si te importa. Tengo algo que terminar. 

Al terminar con su conversación, camino hacia la puerta para ver al rey, dejando al poeta viendo ese caos que se desató. Cuando llego a la puerta, algo le dijo el Poeta a el. 

Poeta: se que has sufrido mucho estos años... por ella... pero hay otro camino hacia la paz que te ayudara a borrar esos recuerdos del pasado y así te perdonará para que puedas descansar... por fin serás libre. 

Oxluz: si... eso es lo que dijeron ahí mismo y una si, sigo sufriendo por eso... voy a terminar el trabajo que eh comenzado. 

Poeta: espero que encuentres la paz con esa niña. 

Oxluz: (...) 

No sabia que quería decir sobre la niña, pero si tenia un camino en vez de este. Pero no sabe lo que va pasar después de eso, y tampoco lo quería saber. 

Así que dejo al Poeta tranquilo y cruzo esa puerta para poder terminar su trabajo en esta ciudad. Cuando lo dejo, el Poeta dijo sus ultimas palabras a esta ciudad. 

Poeta: que todos que aun siguen con vida... que dios se apiade de su alma.