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Frente a mi tengo sentando a Michael Jones padre acompañado de su esposa una adorable rubia que no levanta la vista de sus manos que tiene apoyadas en su regazo.

Mi antiguo acosador del colegio me mira con superioridad mientras esperamos a que la directora Davis aparezca para comenzar con la reunión. Estamos sentados en su despacho el matrimonio a un lado de la mesa y yo de la parte donde está la silla de la directora.

El recibimiento a sido bastante incómodo sobre todo por la manera en la que me a mirado Michael, me a pegado lo que se suele llamar un repaso, lo comprendo ya que en la mujer que me he convertido no queda nada de la asustadiza niña que ridiculizaba y agredía en el colegio.

Llaman a la puerta y me sorprende ya que lo normal sería que la directora entrara sin llamar ya que estamos en su despacho, extrañada indicó a la persona que pase y para nada me sorprende encontrarme con mi antiguo amor, este hombre jamás a entendido un no por respuesta.

-Siento llegar tarde pero debo informar a la profesora Miller de que la directora no podrá asistir a esta reunión *dice Elián*

Maldigo por dentro mi suerte mientras veo como el hombre que tiene mi mundo del revés toma asiento en la silla que debería estar ocupando su madre, ahora me arrepiento de haber tomado asiento tan cerca de esta silla y encima la estatura de Elián no ayuda en el espacio reducido en el que estamos su rodilla termina impactando contra mi muslo, es solo sutilmente pero aún así consigue que se me acalore el cuerpo.

-Vaya ya estamos todos, parece una reunión de ex alumnos   *dice burlón Michael*

Me crispo al escucharlo hablar de nuevo, odio sentirme así pero en mi interior se está batiendo una batalla entre levantarme y arrearle una bofetada al hombre que tengo frente a mi o en salir corriendo de esta habitación y marcharme a llorar.

-Bueno señores Jones les hemos reunido aquí para hablar sobre la situación de su hijo Michael Jr...

-A mi hijo no le pasa nada, seguro que solo estaba jugando *le interrumpe Michael*

Veo como Elián le dedica una mirada fría al hombre bigotudo y obeso que tenemos plantado frente a nosotros.

-Por favor permita que el señor Davis hable antes de comentar algo usted *le digo sería*

No sé de donde me sale esta valentía pero algo dentro de mi está burbujeando y deseoso de salir al exterior.

Michael sorprendido asiente antes de callarse y dejar que Elián continúe explicándole un poco la situación, le explica al matrimonio las repetidas veces en las que su hijo a agredido a alguno de sus compañeros porque después de investigar un poco hemos descubierto que no solo acosa a Gael si no a todos los niños que son de origen extranjero.

-Eso son solo chiquilladas, mi hijo no tiene culpa de los niños de esa clase sean más débiles *dice Michael*

Me tensó al analizar su comentario y cómo acaba de delatarse.

-Vaya así que el problema de racismo viene desde casa, pues que sepa que seguramente su hijo tenga algún porcentaje de ADN débil como se refiere usted *dice un cabreado Eliàn*

-Eso no es cierto mi hijo es cien por cien puro, tanto yo como mi mujer Mandy lo somos, vamos Elián nos hemos criado juntos, sabes que nuca fui un debilucho.

¿Mandy? Miro mejor a la mujer que no a levantado ni un solo momento la mirada de sus manos, miro sus ojos, esos verde oliva que antaño irradiaban luz, veo que todavía mantiene eso de llevar los labios pintados pero no queda nada de esa chica alocada que era la fantasía de todos los chicos del colegio incluyendo a mi acompañante.

-Bueno creo que no vamos a llegar a ningún punto sólo queremos avisarle de que si su hijo vuelve a agredir a alguno de sus compañeros será expulsado de este centro permanentemente *le digo seria*

-Vaya niña tonta, los rumores son ciertos estos años fuera te han vuelto una mujer de verdad. *me dice Michael*

Después de esto me dedica una mirada completamente lujuriosa que hace que se me revuelva el estómago veo como Elián se levanta de su asiento en el mismo momento que Michael lo hace, los dos hombres se dedican una mirada desafiante, sé lo que está pasando por la cabeza de Elián en estos momentos así que como instinto le agarro de la mano entrelazando nuestros dedos.

-Esto no quedará así, la próxima vez que nos reunamos será con un abogado de por medio *dice Michael antes de marcharse*

Pobre de él yo soy familia de la mejor abogada del pueblo.

Salgo de mis pensamientos cuando veo que Elián me observa bueno más bien observa nuestras manos entrelazadas, acaricia con su pulgar mi mano antes de soltarla para unir nuestras miradas.

-Florecilla siento tanto que tengas que volver a enfrentarte a este mal nacido.

Todavía tengo clavada en mi mente la manera lasciva con la que me a mirado mi acosador, ahora mismo estoy luchando con las ganas de llorar pero tengo un buen motivo para luchar, no pude hacer nada por la pequeña Emory maltratada pero pienso hacerlo por Gael.

-Florecilla di algo aunque sea mándame a la mierda pero no te quedes tan callada, temo que estés teniendo otra crisis de ansiedad

Me estremezco al escucharlo decir por primera vez algo referente a mi ansiedad, me duele mucho recordar las secuelas de la muerte de mis padres y posteriormente las secuelas de haber descubierto que mi mayor amor me había traicionado.

-Estoy bi-en  *le digo temblando*

-Florecilla perdóname por lo que voy a hacer a continuación *me dice*

Antes de que pueda darme cuenta Elián me a pegado a su pecho y estoy siendo refugiada en sus brazos como tantas veces hice en el pasado, odio sentirme segura en ellos pero eso es algo que a perdurado en estos años.

Seré débil pero me dejo hacer ya que aunque me cueste reconocerlo hacia demasiado que no me sentía así.

Segura y protegida.