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Cara Smith

No sé que acaba de pasar, estoy en shock, hace 10 minutos la puerta se ha cerrado, ha sido con un portazo seco y Steve no ha sido porque ha salido por la ventana, sólo me queda una opción... ¡Dueñas!.

Los lloros es escuchan desde el pasillo y provienen del cuarto de mi hermana. -¡Helena! ¿Estas bien? No claro que no-. No sabía que decir, por lo que me limité a abrazarla. -Cara, yo... íbamos a hacerlo.... y yo.... me entro mucho miedo.... y le pedí parar... me encerré en el baño... y el se fué...-. Sus palabras cargaban una inmensa tristeza, como me gustaría cambiarme por ella. No se lo merece joder, no. Estuvimos un rato así hasta que vi que se calmaba y minutos después su voz sonaba acompasada indicios de estar dormida. 

Mañana sería un día largo de sábado en el que las tareas y la casa, iban  a ocupar un gran espacio... Creo que Helena debería aclarar lo de ayer con el, jamás la he visto tan dolida por un chico, pero creo que esa conversación tendrá que esperar, mañana vendrán los tíos a comer y vendrá la única persona que puede hacer que el ánimo de mi hermana vuelva a su sitio ¡Nathaniel!. 

Helena Smith

Me he levantado con dolor de cabeza pero eso no es excusa para ponerme a hacer las tareas, Cara hace tiempo que ya anda levantada, seguro que le queda poco para acabar... y yo, aún no he empezado... Me levanto, cogo el móvil y camino al cuarto de baño, veo que tengo cuatro mensajes de ^Desconocido^

^Desconocido^: Helena, soy Dueñas... yo, lo siento, ayer cuando te encerraste en el baño ... yo... no sabía que hacer. No pienses que estoy enfadado, por favor dame una oportunidad, déjame enamorarte como a una princesa.

^Desconocido^: Entiendo que no quieras responderme, pero no podemos estar así, te quiero joder y el ver que estas así conmigo me duele. Desde que eramos enanos me has gustado y nunca he tenido el valor para decírtelo, por favor, dame una última oportunidad para demostrarte como soy en realidad.

^Desconocido^: Sé que la he cagado pero de verdad, lo siento si te has visto presionada, no era mi intención, yo... sólo quería hacerte única y especial, no quería hacerte daño. Entenderé si no quieres volver a hablarme...

^Desconocido^: Te quiero Helena, siento por lo que has tenido que pasar...

Mi cabeza da vueltas, ¿ha dicho que me quiere? Se lo tengo que contar a Cara, ella sabrá que hacer. Me giro para estar segura de que ni papá ni Cara andan cerca para responderlo. 

^Helena^: Yo, de verdad que siento lo que pasó anoche, no era mi intención dejarte así, simplemente, creí que estaba preparada y no era así.

^Helena^: Yo no tengo motivos para estar enfadada y sé que lo que ocurrió ayer no se te va a olvidar tan fácilmente y me gustaría pedirte volver a empezar de cero.

^Helena^: Puede que esta sea la mayor confesión que he hecho nunca, pero yo también te quiero, desde 1 de la eso. Bueno el lunes nos vemos vale? mañana tengo comida familiar y no voy a poder salir. Adiós.

Me pasé el resto del día en las nubes.

 

Cara Smith

A Helena le ha pasado algo, sólo hay que ver su cara, ayer compungida y hoy radiante, lo mas probable es que hayan estado hablando. A decir verdad la envidio un poco, que el tío mas buenorro de todo el instituto se fije en tí... No tiene palabras.

-Cara!-. Y ahí viene Helena a contarme que pasó. -Sabes que ayer nada terminó bien entre Dueñas y yo? Pues nos vamos a dar una oportunidad, por lo que el lunes como fuera, inventaté cualquier excusa con papá si es que llega antes-. La verdad, que todos los favores que en su día me hizo, vuelven a ella... -Claro, y si le digo que Abel te ha cambiado el entrenamiento?-. Es una buena idea hay que admitirlo. -No, porque si le decimos que tengo clase a las cuatro en vez de a las seis, no puedo volver dos horas antes, dile que me he ido a la biblioteca con Astrid, no creo que diga nada. Hablando de Astrid, le tendré que contar todo esto... -. Helena es tan inocente... creo que eso es lo que la hace única y tan aparentemente frágil.