La pelinegra estaba sentada mirando a la nada mientras recordaba todo el revuelo que había sido su vida y como poco a poco las cosas la habían vuelto tan melancolica.
-Ellie- murmuro un hombre de unos 29 aňos y le sonrio al ver a aquel castaňo que en su juventud habia sido su más grande perdición.
- No deberías de estar impartiendo clases en el instituto de brujas y brujos?.
El se acerco mirando a la nada mientras que escuchaba la risa alocada de los dos niňos que jugaban dentro de la casa y intentaba olvidar el hecho que ambos compartian un lazo tan grande.
-El esta cerca y los quiere- fue lo último que dijo antes de que una maraňa de oscuridad les envolviera llevandoles al mundo del más allá, donde ningun ser humano o bruja regresaba.
Editado: 15.07.2021