CAPITULO 8

Una luz hace abrir mis ojos lentamente, ME DUELE LA CABEZA HORRIBLE. Siento que me va a estrellar, levanto la cabeza y miro hacia y miro que no estoy en mi habitación,

¿DIOS DONDE ESTOY? Muevo la cabeza para ver hacia el otro lado, Oh My God, Ulises esta completamente dormido justo a mi lado, quito la cobija que me cubre y observo, aun tengo mi ropa, trato de levantarme pero su brazo rodea mi cintura y me lo impide. Quito su brazo con cuidado y observo lo lindo que se ve dormido, esta boca abajo y muestra su formada espalda. QUE SEXY, un mechón de su cabello cae en su frente, asi que aprovecho y me levanto para ir al baño.

_ ¿QUE SUCEDIÓ ANOCHE? Me pregunto mirándome en el espejo del baño.

PUES FUE UNA LOCURA (grita mi conciencia) A DEMAS DEL FABULOSO BESO QUE TE DISTE CON ULISES (se muere de las risas )

_ Pues no recuerdo. Seco mi cara y me dispongo a salir.

Ulises aun estaba dormido, tome mis zapatos y me dispuse a salir, necesitaba ir a casa, abro la puerta y cierro con mucho cuidado, bajo las escaleras ( Dios que lindo departamento ) y miro hacia ambos lados, me acerco a la puerta, ESTA CERRADAAA. Miro a todos lados y no observo ninguna llave.

_ TENDRE QUE LEVANTAR A ULISES.

Subo rápidamente las escaleras y abro la puerta, aun esta dormido, camino por toda la habitación pero no veo las llaves, me acerco a su cama y miro que hay una repisa encima de la cama, DONDE ESTABAN LAS FULANAS LLAVES. Subo lentamente a la cama, cuando de pronto, siento que me jalan hacia abajo y me impactan con la cama.

_ BUENOS DIAS BONITA. Era Ulises que estaba encima de mi.

_ QUITATE DE ENCIMA. Empujándolo hacia un lado.

_ ¿Entonces ahora si tengo que quitarme de encima?. Se sienta en la cama y se ríe. Es tan lindo

_ NO INVENTES. Le digo tirando la almohada y levantándome de la cama.

_ No invento nada, cuando nos besamos anoche no me dijiste que me quitara. Exclamo sentado con su pecho desnudo.

_ PUES NO RECUERDO NADA, Y SI NO LO RECUERDO NO PASO, ¿entendiste?. Se levanto de la cama y se acerco hacia mi pegándome contra la puerta.

_ Entonces yo voy hacerte recordarlo. Rápidamente impacto sus labios en los mios.

PORQUE DEMONIOS HACE ESO.

Quede totalmente impactada, con los labios aun entre abiertos, el acaricio mi cabello que caia en mi rostro y deposito un beso en mi hombro, lo cual hizo cerrar mis ojos.

_ Te llevare a casa. Dijo, esquivándome y dejándome hay parada.

_ Yo me puedo ir sola, tranquilo.

_ No te lo estoy preguntando Esmeralda. Entro al baño y cerro la puerta.

Baje hacia la sala y me senté ah esperar, mientras esperaba, mire unas portarretratos de Ulises con una mujer, me imagino que es su madre, tienen mucho parecido. A los veinte minutos bajo, estaba vestido con un suéter manga larga y un jeans.

_ HASTA QUE POR FIN. Le dije sacando una linda sonrisa de el.

_ Vamos, me levanto y camino hacia la puerta. El me toma por el brazo y me hace girar en mis talones para mirarlo de cerca.

_ Esmeralda, necesito que sepas que… lo interrumpo colocando mis dedos en sus ladios.

_ No digas mas nada ¿SI? Por favor, deja las cosas como estan. Lo miro y beso su mejilla. ¿VAMOS? El queda impactado, toma una bocanada de aire y camina abriendo la puerta.

Mientras vamos camino hacia mi casa, no emite ninguna palabra, lo miro y el sigue con su mirada fija en la carretera. QUE OSTINADO ES.

_ TE PASA ALGO. Pregunto. El dura segundo en responder.

_ Si estoy bien. Voltea y me mira.

_ Te noto extraño, se que… me corta la palabra y me mira.

_ Conoci a tu tio ayer. Digo soltándolo de una vez. Me quede mirandolo un momento y luego mire a la ventanilla.

_ SI Y COMO. Pregunte confundida.

_ MI PADRE ES SU NUEVO SOCIO. Dijo sin mirarme.

Quedo totalmente impactada, estaria mas cerca de mi, oh bueno, sabriamos un poco de cada uno. Llegamos a mi casa y se queda mirando hacia la puerta.

_ Te acompaño, dijo mirándome sin mostrar nada de felicidad en su rostro. Abro la puerta del auto y lo miro.

_ Bueno, hasta pronto. Al cerrar la puerta, siento que apaga el motor de su auto y baja de el caminando hacia mi rodeando el auto.

_ Mejor te acompaño. Me dice colocándose frente de mi.

_ No, no, no, ni hablar lo esquivo y sigo caminando, el me toma por el brazo y me jala hacia el.