Pintura Perfecta || Jeon Jungkook #2

Capítulo Dos.

Capítulo Dos: La Castaña de ojos caramelo
Jeon Jungkook
17 de marzo del 2014

—¡¡No voy a ir!! —grito exasperado al escuchar la puerta del departamento ser tocada por TaeHyung.

Me niego ir a esa Universidad y más si a NamJoon por una jodida vez se le ocurrió buena idea ingresarme a una facultad de arte sabiendo aun mis recuerdos, como también se le dio la maldita gana de traer a esa mujer con nosotros.

Simplemente detesto todo esto, pero la pregunta que no he parado de hacerme desde que no realice el trabajo era:

¿Me arrepiento de haber ido a esa exposición de arte? ¿valió la pena?

No me arrepentía y si valió cada jodido segundo la pena.

Eso no quita el hecho de que estamos en Nottingham por mi irresponsabilidad.

—JungKook no seas un niño. —la voz de TaeHyung me hace poner los ojos en blanco. —Nam va a cabrearse.

—NamJoon puede irse a la mierda. —me levanto e ingreso a mi habitación dejando a TaeHyung golpeando la puerta principal.


No pasa mucho cuando él deja de tocar y con eso finalmente me da una tranquilidad absoluta, pero entonces escucho ruido dentro del departamento hasta que la puerta de mi habitación es abierta y la cabeza de Jimin se asoma.

Maldito, debí saber que TaeHyung lo traería para que manipule la cerradura.

—Lárguense. —señalo la puerta y TaeHyung se deja caer en el sofá de mi habitación. Jimin se acerca a la ventana.

—No eres el único al que le dijeron que estudie algo que no quiere Jungkook. —la dura voz de TaeHyung me hace girar a verlo. —no eres el único mártir en esto.

—¿Creen que en verdad yo quiero estar en esa facultad de danza? —la voz de Jimin nos hace girar a verlo y tiene la mirada perdida en la ciudad. —porque realmente es la última de las cosas que deseo hacer, pero lastimosamente es lo que debemos solo para encontrar a Bryan y quienes nos traicionaron y exportaron la droga. Así que mueven sus traseros y vayan.

—¿Tu no irás? —mi pregunta lo hace voltear.

—Yo ingreso dentro de un mes. —se encoge de hombros. —así está en los documentos que me dio Nam.

—Es realmente injusto todo esto. —un suspiro frustrado es todo que se oye por parte de TaeHyung antes de que el se levante y salga.

Observo los lápices de carbón, los cuadernillos y con eso el boceto que intenté hacer ayer y que terminé por romperlo. No he podido volver a dibujar y no creo que pueda.

—Vas a poder. —Jimin se acerca y se sienta a mi lado. —quizás no ahora o mañana, pero nadie sabe si esto es solo un incentivo para retomar lo que perdimos de adolescentes.

—No lo creo, ayer solo pensé en mi madre y no he podido tocar un jodido lápiz.

—No puedo decir que estaremos bien porque claramente ni yo lo sé. TaeHyung ayer simplemente se encerró y no ha salido hasta hoy. ¿Qué crees que hizo él? —siento su mirada.

—Recayó. —respondo y lo veo de reojo. —¿Qué hay de ti? ¿enserio ingresarás a esa facultad sabiendo lo que te tienes o…— dejo de hablar cuando el voltea rápidamente. —No se los has dicho. — concluyo.

—Te dejo alistarte. —se pone de pie esquivando el tema. —No podemos regresar a Seúl a menos que se no ingenie una buena solución, hasta entonces hagamos esto. —sin más voltea.

***

Odio cuando Jin dijo que mi motocicleta lo traerían dentro de dos días y con eso tengo a TaeHyung quejándose del tráfico de la ciudad y a Jimin diciéndole unos cuantos comentarios sarcásticos a la vez de que se burla porque simplemente TaeHyung no las capta.

—¿Por qué no le dijiste a NamJoon que te llevará, Jimin? —Espero paciente la respuesta de Jimin quien patea el asiento de TaeHyung y este se queje.

—Porque si lo llamo el vendría corriendo, con lo mucho que ama verme. —reprimo una risa cuando observo a TaeHyung arrugar sus cejas.

—Eso no es verdad.

—Veo que sigues sin captarlo. —Jimin ríe abiertamente.

—No veo lo gracioso a todo esto. —pone mala cara.

—JungKook se ríe y nadie dice nada. —volteo a verlo y el se encojo de hombros con una sonrisa maliciosa.

—¿Tú no habías comprado tu motocicleta? —esta vez me toca decir un comentario sarcástico y la impaciencia de Jimin es asomarse en medio de los dos asientos esperando a que le responda a TaeHyung

—Se me apetecía estar en esta grandiosa compañía de ustedes dos. —digo y la carcajada de Jimin se oye fuerte.

—Los odio cuando utilizan el sarcasmo conmigo y me demoré en captarlo. Algún día lo usaré en sus contras. —dice y pasa a toda velocidad casi por la acera antes de ingresar a la universidad.

—Despacio rayo McQueen. —lo reprende Jimin. —una chica estaba a nada de cruzar y casi te la llevas.

No dice nada más cuando ingresa al estacionamiento y aparca el auto. Jimin sale al igual que yo que ordeno el maletín de materiales, pero me detengo cuando él se pone adelante mío y la voz de TaeHyung se oye seria.

—¿Qué demonios haces acá? —antes de subir la mirada la voz de Jiely se oye.

—No vine a verte a ti Kim. —se intenta acercarse a mí y es Jimin quién se adelanta y la encara.

—¿Qué parte de tu diminuto cerebro no entendió que JungKook no quiere verte?

La observo y ella también lo hace, pero la repulsión que siento por ella es inmensa y no solo es eso y es cada vez que la veo siento un asco de solo recordarla desnuda bajo el hombre que fue mi verdugo. Fue la peor traición que pudo hacerme y de la cual el solo recordar me duele porque para ella solo fue un revolcón.

‹‹—¿No tienes remordimiento estar debajo de mi con mi polla dentro de ti en la misma cama que compartes con ese bastardo?

Sus risas se oyen en toda la habitación y con eso su respuesta.

—Porque se enteraría si él no… está acá. —la escucho jadear y con eso siento mi estomago revolverse.

—¿Lo amas, Jiely? —escucho gemidos mientras abro la puerta de la habitación que comparto con ella y la veo con las piernas enrollada en la cadera de ese hijo de puta.




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