Capítulo 1

*Audrey*                                                          18 de septiembre de 2017.

Es mi último año de preparatoria y sigo en mi cama, mi hermana gemela sigue insistiendo que me levante, pero no estoy convencida en hacerlo. Mi madre me llama a desayunar, pero mis ánimos están por el suelo, no tengo ganas de hacer nada y muchos menos ir a la preparatoria.

Con mi familia vivimos en un pueblo en Canadá, se llama Ciberburng. Tengo una hermana gemela llamada Casiopea pero le decimos Cassy, un hermano mayor sobre protector llamado Liam, nuestra madre Jane y nuestro padre Carter, él es militar, así que no está casi en casa.

Yo soy de esas chicas que piensan que si tienes un buen cuerpo, hay que aprovecharlo al máximo y eso es lo que hago. Tengo diecisiete años y con Cassy estamos en nuestro último año de preparatoria. Me encanta el arte, la música, todo lo relacionado con la belleza de la vida.

Mi hermana Cassy, a diferencia de mi, es más deportiva, le encantan las sudaderas, pero también tiene su propio estilo. A ella le gusta el arte también, sobre todo el arte musical, tiene una voz espectacular y  toca el piano como nadie.

Físicamente Cassy y yo tenemos estura promedio, piel clara, nuestro cabello lacio, largo y oscuro. Tenemos ceja pobladas, ojos colores esmeralda con pestañas largas. Somos esbelta y muy linda a decir verdad.

 En ese instante suena mi teléfono, una llamada entrante de Nathan:

―Solecito hermoso, espero que estén listas porque dentro de unos aproximadamente treinta minutos pasaré a buscarlas ― dijo Nathan.

―Pero....― traté de decir.

―Pero nada, quita la cara de perro que debes de estar teniendo en este instante y alístate, chau ― dijo y colgó,

Se preguntarán ¿Quién es Nathan? Es mi mejor amigo, bueno, el mio y de mi hermana. Sonrío sin poder evitar ¿Quién diría que esta pequeña llamada me subiría el ánimo?

― Apostaría mi estuche de maquillaje a que la persona con la que hablaste ahorita, su nombre comienza con N ― dijo la insoportable de Cassy.

―Deja el fastidio, Cassy. Ve alistarte ¿O es que piensas ir en pijama? No es que te quede mal, pero no es tu look ― le dije. ― Ah, y rápido, Nathan pasará por nosotras

― Oh, Nathan, Nathan ― canturreó Cassy mientras salía de mi habitación.

No les he contado, Nathan además de ser mi mejor amigo, es el chico que me gusta desde hace unos años, pero él, ni enterado esta, para esas cosas, él es un idiota.

Me levanté de mi cama, me bañé, me arreglé y bajé a desayunar, allí ya se encontraban Cassy, igual como salió de mi cuarto.

― Hijas, lo siento mucho, pero me tengo que ir, me llamaron del hospital, tenemos una emergencia. Pero no se preocupen, su hermano  las llevará a la preparatoria ― nos dijo nuestra madre Jane.

― No te preocupes, mami, Nathan pasará por nosotras ― le dije mientras me sentaba.

― Con razón te arreglaste tanto, hermanita ― dijo Liam llegando.

― Deja el fastidio, Liam ― dije sonrojándome un poco ― Y tu, Cassy, ve a alistarte que ya viene en camino.

― Esta bien, hermanita, me voy a alistar ―dijo Cassy, subiendo a su habitación.

A los minutos, Cassy bajó, lista y hermosa, junto a tiempo, porque en ese instante, sonó la corneta del auto de Nathan.

― Adiós, Liam, llegaron por nosotras ― dijo Cassy encaminándose a la puerta.

― Esperen, mamá dijo que las llevara ― dijo Liam.

― Ya hablamos con ella, nos vamos con Nathan ― dije.

― El amor de Audrey ― gritó Cassy.

― Cállate que te puede oír ― le dije sonrojada.

― Ya saben que no me gusta que pasen tanto tiempo con Nathan, se ve mal  ― dijo Liam en tono protector.

Verán, mi hermano es un tanto sobre protector, para él, Cassy y yo somos su vida y así nos trata. Tiene los ojos azules, es alto, su cabello es negro y lacio y ama usar gorros pasamontañas y combinarlos con chamarras, en sus gustos de ropa, es más parecido a Cassy que a mi. Esta en la universidad estudiando arquitectura, es su pasión.

― Cálmate, hermanito, no nos pasará nada con él, es buena persona y lo conocemos desde hace años― dije.

― Además, nos importa poco lo que crea o vea la gente ― dijo Cassy ― En lo que es a mí, Nathan es como un hermano, Audrey es otro cantar.

― Cállate, Cassy, hoy te levantaste con las ganas de molestarme ¿O qué? ― dije ya molesta.

― Ya, ya, cálmate, es jugando ― dijo Cassy riendo.

Nathan volvió a tocar corneta.

― Chao, Liam ― dijo Cassy saliendo.

― Esperen ― dijo Liam, pero no le preste atención

― Te amamos ― dije saliendo también.

― Yo igual, par de locas― lo escuché decir antes de cerrar la puerta.

Camine hacia el auto y me subí, estaba entusiasmada y no era por la preparatoria, esa era la reacción que él me causaba.

― No saben la sorpresa que les tengo preparada ― Nos dijo Nathan entusiasmado.

Nathan era un chico....hermoso, alto, su tono de piel es claro, tiene ojos oscuros y cabello castaño oscuro y lacio. Tiene un cuerpo bien tonificado, ya que le encanta el deporte. Una característica que encanta de Nathan es su afición a la lectura, le encanta las novelas románticas y las de misterio. Él es el tipo de chico que enamora sin pretenderlo, ya que es cariñoso, dulce, protector, lindo.

Si, ya sé, sueno empalagosa, pero me encanta.

Cassy y yo lo miramos y luego nos miramos entre nosotros, nos preguntábamos lo mismo: ¿Qué será esa famosa sorpresa?

― ¿Y esa sorpresa es.....? ― preguntó Cassy entusiasmada y curiosa.

― Pues no sería sorpresa si les digo que es ― dijo Nathan con tono de obviedad.

― Pero Nathan......Dinos, plis ―le dijimos al unisón.

―No chicas, de mis labios no saldrán nada, así que dejen de existir ― dijo Nathan mientras conducía.