Alemania
Ethan.
La brisa llegaba directo a mi rostro, era salada lo suficiente para resecar un poco mi piel, había pasado ya un año y tres meses desde aquel drama. Al final mizuky se había salido con la suya me había casado con ella en una de mis tantas borracheras, hoy me encontraba lejos de la ciudad lejos de mitzuky y kyo, me había envuelto cada vez más en los negocios y a pesar de estar siempre en los negocios por algún extraño motivo siempre tenía tiempo de recordar a ella, sus ojos soñadores y su tierna mirada siempre estaban en mi mente, no podía olvidarle ni con el paso del tiempo, había ido varias veces a la casa de Zhao después de aquel coma etílico pero no la encontré y su casero no me supo decir nada más que... se había regresado a Taiwan, he viajado a Taiwan unas diez veces pero aún no encuentro un solo indicio de ella.
Me pregunto si alguna vez la podre encontrar nuevamente extraño su mirada, su sonrisa y su piel extraño a mi Genie y estando aquí la extraño aún más. Otra vez estoy tomando y de mis ojos vuelven a brotar lágrimas de arrepentimiento, miro al cielo y me pregunto nuevamente donde estarás. De pronto suena mi celular el tono de aquella canción llega a mis oídos, tomo el teléfono desganado y sigo pensando si tengo que responder de pronto deja de sonar, estoy a punto de aventarlo a la cama, sin embargo vuelve a sonar insistiendo en ser respondido le doy en el botón de contestar, una voz melodiosa me cuestiona al otro lado del auricular es ella mi esposa mizuky yagami preguntando donde estoy, le respondo que salí de la ciudad por negocios sin más detalle cuelgo, le quitó la batería, lo aviento a la cama y vuelvo al balcón a seguir bebiendo a seguir recordando aquel día donde fui feliz.
Solo eso queda en mi mente un recuerdo y aquella foto donde estamos ella y yo, ella en un sueño profundo entre mis brazos y yo con una sonrisa, la última de mis sonrisas desde aquel día mi vida se ha convertido en un maldito infierno y los yagami son los demonios que habitan en él.
Nunca me había arrepentido de nada, sin embargo, cuando Yan kai me dijo que me olvidara de Genie fue el día que más remordimientos eh tenido en mi vida. Sabía muy bien que él conocía la ubicación de ellas sin embargo en estos dos años por más amenazas o sobornos que le insinuaba nunca había cedido, recuerdo que después de lo sucedido en el aeropuerto le perdí la pista y seis meses después apareció ante mi como jefe de operaciones de k&m industries, tenía que preguntarle que sabía, donde estaban, como podía localizarlas, el simplemente dio la vuelta y dijo que no estaba al corriente de noticias de ellas, mi enojo se convirtió en rabia, me acuerdo que lo tome del brazo y lance un golpe, mi puño se estrelló directo en la pared pudo leer mi movimiento, desde ese instante mi resentimiento aumento más y más con Yan Kai, No!!!, mi odio empezó aquel día en el hospital aquel momento en que puso sus manos en Genie, aquel día en que perdí todo lo valioso para mí.
Mitzuky. Oxford
Soñaba con casarme desde hace mucho tiempo una pequeña boda con mis seres queridos, en una pequeña iglesia y un vestido sencillo, pero que había obtenido nada ni un poco de aquello de lo que había soñado, mis padres y amigos ninguno de ellos estaba en aquel lugar y aquel novio estaba muy lejos a pesar de estar frente a mí. ese día no fue para nada el día más feliz de mi vida, el ministro era feo y llevaba un traje que le quedaba enorme y además tenía manchas de dudosa calidad, el novio estaba borracho y todo vomitado y yo la novia estaba llena de lodo y despeinada. Pero aun con todo esto era la oportunidad de casarme con el amor de mi vida.
el mantra que repetidas veces me decía era que estaba con aquel hombre y que sería muy feliz, nada de eso fue cierto nada de eso se cumplió y todo cada vez empeoró más y más.
la noche de bodas Ethan como pudo me llevo a la alcoba pensé que quería estar conmigo, el suavemente me deposito en la cama y me dio un beso lleno de ternura me beso una, dos, tres, diez veces pero siempre con los ojos cerrados quería sentirme protegida en sus brazos y le pedí que abriera sus ojos, amaba aquella mirada el dorso de su mano acarició mi mejilla y de sus labios salió un murmullo diciendo "Genie te amo".
De pronto su mirada cambio era penetrante y llena de odio se alejó rápidamente y me dejo sumida en una profunda soledad en aquella gran habitación. No podía soportar más, aquel había sido el día más horrible de mi vida y sin pensar más lloré amargamente.
Al día siguiente salí a buscarlo, pero lo único que encontré fue una nota en la mesa que decía "me regreso a Oxford espero disfrutes de una grandiosa luna de miel". Los siguientes días fueron igual estaba en el trabajo salía a altas horas de la noche y se iba muy temprano casi de madrugada, seguía en borracheras y cada día lo buscaban diferentes tipos de mujeres, llegaba con pintalabios en las mejillas y el cuello con olor de otras. Mi vida se había convertido en una pelea continua, pronto solo vivía para seguirlo y para quitarle de encima a aquellas personas, sin embargo, pude notar que el desprecio era por igual para todas el seguía buscándola en cada una de nosotras sin embargo nunca la encontraría y de eso yo me iba a encargar le haría sufrir tanto como él me había herido a mí.